Pero él no creía en la normalidad, solo en lo común, lo típico.

Se levantó solo para ir al baño a lavar su cara, eliminando los rastros del pequeño episodio que había tenido minutos atrás.

Tras regresar a su habitación, un mensaje le llegó en la red social más popular en el momento, conocida como facebook.

»Hola, soy Park Jimin y queria saber si querías meterte a un grupo en whats app, te dejaré mi número por si quieres«

Baek rió ligeramente, jamás le habían dicho algo asi y menos un desconocido.

Pero de igual manera terminó aceptando. No tenía nada que perder.

Paso casi un año desde que ese hecho pasó.
Conoció varias personas, todas vía internet, pero con este chico, Park Jimin, habían sido pocas las palabras que habia compartido con él.

Conversaciones, grupos, personas, todo aquello habia entrado a su vida con tanta facilidad que parecía increíble la importancia que ahora tenía para él.

No fue mucho el tiempo como para que las "conversaciones en privado" comenzarán a surgir con aquel chico de cabello anaranjado, o como él observaba en sus fotos de perfil.

Al principio solo se hablaban de trivialidades, estupideces que podían llegar a hacer en su día.
Horas y horas de conversación eran en las que eran partícipes, horas que ambos disfrutaban.

Poco a poco la confianza se fue impregnando en el vínculo que habían creado.

La emoción al escuchar un mensaje llegar.

La alegría al ver ese "en linea"

La sensación que lo inundaba al ver que estaba "escribiendo"

Todas esas cosas se fueron haciendo más y más importantes.

Pronto los secretos fueron compartidos, confesiones, pensamientos profundos que viajaban en sus mentes y habían tenido miedo de revelar con otros.

Lo preocupante empezó cuando incluso los celos por compartir aquella persona aparecieron.
Cuando habia la ausencia de uno de ellos, el otro lo extrañaba.

Llegaron los momentos en los que Baek se preguntaba a qué hora aparecería cuando éste no se conectaba, qué estaría haciendo en el momento en el que no hablaban juntos y horas en las que solo aquel chico reinaba cada uno de los pensamientos del bajito.

Baek se habia enamorado.

Habia caído profundamente en un sentimiento sin sentido en el que la distancia era algo que hacia casi imposible.

Se había metido en un abismo, solo que este no era para nada oscuro, si no que era malditamente cegador.

El día de conocerse en persona llegó.

Las palmas de sus manos se sentían húmedas y se removía constantemente en donde encontraba sentado.

Su elección para verse por primera vez habia sido un parque que se ubicaba en un área alejada de la ciudad.

A diferencia de otros parques, éste se diferenciaba por parecer un bosque.

No había zona por la que el pasto perfectamente podado no adornara el suelo. Unas cuantas flores silvestres yacían al rededor de él mientras que uno que otro árbol de aspecto frondoso decoraban al rededor.

La noche anterior había caído un ligero sereno haciendo que el rocío quedara en las hojas verdes, dándoles más color.

Debido a las pequeñas gotas de agua que estaban en las plantas, su pantalón se había mojado ligeramente en las orillas de la parte baja de estos, cerca de sus pies.

➰INEFABLE➰Where stories live. Discover now