-Izzy nos mandó un par de invitaciones para la boda de Alec.
La expresión de Nico se torció-. Oh, cierto...Lydia...
Will imitó su expresión de decepción-. Lo sé, pero tenemos que estar allí para apoyar a Alec.
-¿Irán?-preguntó Percy, sentándose en la mesa de Hades, junto con Annabeth, Piper, Jason, Hazel, Frank, Reyna, Leo y Calypso.
-Tenemos que-dijo Annabeth-. Es Alec.
-Pero Magnus...-comenzó Leo.
-Los conocemos lo suficiente-dijo Piper-. Estoy segura de que se quieren de verdad, pero Alec tiene miedo, y con justa razón.
-Magnus no deará que se dibujen la runa del matrimonio, no dejará que lleguen hasta ese momento-dijo Calypso.
-Iremos-concluyó Hazel-. Sea como sea.
***
Los semidioses entraron al Instituto, vestidos de gala y resaltando su sangre divina. Se veían increíblemente genial.
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El Hermano Silencioso anunció la entrada de Lydia. Su vestido de novia era hermoso. Blanco con detalles dorados. Alec se tensó pero no lo dejó demostrar. Izzy estaba radiante.
Se sentaron en la fila de atrás de Simon y Clary, ambos increíblemente vesitidos.
Antes de que todo comenzara, tuvieron una pequeña charla.
-¿Cómo está Alec?-le preguntó Annabeth a Clary.
-Lydia sabe que él tiene sentimientos por Magnus, pero...
-Familia y honor antes que nada-dijo Reyna-. Es entendible.
Jason asintió.
-Eso no quita que tengan que ser infelices-dijo Nico.
-Solo podemos apoyarlos-dijo Frank.
***
Lydia cogió la estela desde la almohadilla de Izzy y la dirigió a lo que parecía ser hielo seco con la runa del matrimonio. Miró a Alec, como queriendo confirmar que estaba seguro y dirigió la estela a la piel del chico, a punto de marcarlo para siempre.
De repente, las puertas se abrieron y Magnus entró, interrumpiendo todo.
Alec se quedó sin respiración. Habló un par de cosas con Lydia. Jace le brindó apoyo desde atrás, haciéndolo reaccionar de su estupor. Todos los semidioses contuvieron la respiración cuando Alec se adelantó y separó de Lydia, mirando fijamente a Magnus.
-Oh dioses-exclamaron todos en un susurro.
Maryse había querido detener a Magnus, pero no pudo. Quizo impedir que su hijo siga avanzando hacia el brujo, pero este le dijo "Suficiente" y al segundo siguiente, Alec cogió de las solapas del traje a Magnus y lo atrajo hacia sí, besándolo con todo lo que tenía y con todos los sentimientos reprimidos.
-¡SÍ!-celebró Leo.
-Shhhh-le dijo Calypso, aunque ambos sonreían. Simon parecía a punto de explotar en un ataque de fanboy.
Cuando terminaron de besarse, Magnus le sonreía con tanto amor que los semidioses pensaron que era irrespetuoso invadir su privacidad y estar mirándolos. Alec se separó de sus labios con tanta lentitud que no podían creerlo, con tanta delicadeza. Tenían un gran futuro por delante.
Pero se habían besado frente a La Clave y su familia.
Su madre no parecía para nada contenta. Izzy fue la primera en acercarse, Simon la siguió y comenzó a hablar de una película que había visto. Las caras de Magnus y Alec eran épicas y sus expresiones cambiaban y eran tan claras que entendieron todo. Luego, se acercaron todos los semidioses y Calypso.
-¡Felicidades!-les dijo Piper muy emocionada y abrazó a Alec.
-Woha-dijo este pero sonrió.
Luego Piper fue a abrazar a Magnus. Su Afrodita interior estaba muy emocionada.
-Estamos muy orgullosos-dijo Percy.
-Se lo merecían-dijo Nico, sonriente.
-Gracias chicos-dijo Magnus-. Significa mucho que estén acá.
-No hay por qué-dijo Leo-. ¡Ha sido épico!
-Ahora es momento de una salida doble, ¿eh?-les dijo Will-. Ustedes dos y Nico y yo. Pero claro, después de que tengan su primera cita-les dedicó un guiño.
-Está hecho-dijo Magnus.
Siguieron hablando un poco más, hasta que todos supieron que era hora de dejar a Malec solos. Alec parecía estar algo nervioso y ahogándose de las miradas.
