|Restoring My Soul|

14. Tattos

Bella Miller Point:

-¿Qué te parece si te doy un chocolate con la condición de que juegues fútbol conmigo?- me preguntó entusiasmado con el balón de soccer en sus manos.

-Pero yo no se jugar, Biebs- le dije honesta- tu siempre me ganas, por eso no me gusta jugar -dije volviendo a tomar mis muñecas.

-Esta bien, te doy dos chocolates y mañana jugamos a lo que tu quieras -me intento sobornar de nuevo, pero saben ¿a quién engaño? Amo los chocolates, aun que sean los causantes de mis dientes duelan aveces.

-Acepto, pero esta vez no me golpees con el balón -le advertí con una mirada fulminante.

-No lo haré, Linda Bella -me dijo y después me lanzo el balón, lo atrapé.

Después se escuchó a alguien abrir la puerta corrediza que daba lugar al patio, donde nos encontrábamos, ambos la miramos, rió al ver el balón en mis manos.

-Vaya, Justin lograste que volviera a tocar ese balón, ¿cómo pasó? -dijo acercándose.

-Digamos que me toco dos chocolates y quedarme sin mesada, junto con jugar mañana probablemente a las princesas -contestó el rubio, rió de nuevo mientras se acercaba a mi.

-Ven aquí cariño, dejame ponerte el abrigo -me pidió luego le lance el balón a mi amigo de cabellos rubios para obedecer- bien, ya estas perfecta para jugar de nuevo- me dijo cuando término de ponerme el abrigo.

-Muchas gracias -le dije, era mi abrigo rosa favorito.

-De nada, pequeña- me estaba alejando, cuando me llamo de nuevo- Y Bella- la miré- te amo mi pequeña.

[•••]

Desperté a causa del sol en mi cara, al hacerlo me di cuenta que el sueño fue diferente y más que un sueño es un recuerdo, doloroso pero de los mejores que pudiera tener en mi memoria si les soy honesta.

Me moví de mi lugar cuando siento algo pesado en mi cintura, me giro a mi lado izquierdo y me encuentro a un Justin Bieber dormido pacíficamente,  tomo su brazo que se encontraba en mi cintura cuando de repente la manga de su suéter sube y deja a la vista el inició de tatuajes, me quedo estática admirando esa diminuta parte, luego él se mueve, alejándose y dándome la espalda.