-Gracias, de verdad.-respondo sonriente, olvidando cualquier dolor que anteriormente sentía.

A los minutos empecé a hablar de Harry, les expliqué como me había ayudado y lo bien que me había hecho eso, pero lo mal que me hacía a la vez; por lo tanto: lo confundida que estaba.

-Sabes…-empezó Danielle, dando un largo suspiro.-Mientras Harry este con Taylor él estará encerrado en una jaula. Quiero decir, nunca será libre hasta dejarla.-termina de decir arqueando una ceja.

-Eso es verdad.-afirma Eleanor, decidida.-Pero me parece muy bien que le hayas dicho lo que pienses. No todos hacen eso con Harry, creo que tienes mucho valor para enfrentarlo.

-¿Nunca nadie le dice las cosas como son en realidad?-pregunto con una pequeña risa, demostrando lo patético que eso me parecía.

-Bueno… Los chicos sí, su familia… Pero la prensa y demás solo quieren a un Harry comercial.-contesta Perre.

-Yo diría que continúes haciéndolo, así el abrirá los ojos y rápidamente verá como son las cosas.-propuso Danielle.

-Lo sé… Lo seguiré haciendo, me encanta pelear.-respondo de manera graciosa para calmar un poco la tensión, y todas reímos.-Pero… Harry me debilita, quiero decir… Soy “mala” -dije haciendo señas con los dedos- al estar con él, pero mi corazón late a mil por segundo cuando lo tengo cerca.

-Todas sonrieron pícaramente y se miraron.-Eso no es malo Sam…-dijo Eleanor en tono compasivo, como si le estuviera diciendo a un niño de 5 años que salirse de las rayas al pintar esta bien.

-Es que creo que si lo es, porque más lo pienso peor me hace.-digo en tono cansino, aunque sabía que ellas tenían razón.

-Lo sabemos y te entendemos.-dice Perrie.-Solo hay que esperar a que él vea lo hermosa que eres por dentro y por fuera. 

-Y no faltará mucho para eso.-terció Eleanor, segura de lo que decía. Yo sonreí, aliviada con sus respuestas. De una manera u otra, sentía que ellas tenían razón, aunque no quería ilusionarme con nada. De repente, salió el tema sobre los rumores, las fans, los haters, y las grandes distancias.

-¿Y no es difícil cuando están de gira?-pregunté algo afligida, imaginándome a mí en una situación así.- ¿O tener que soportar los falsos rumores?-Todas se miraron entre ellas: a todas les tocaba vivir la misma situación.

-Claro que lo es.-contestó Perrie, con una voz apagada.-No ver a Zayn por cinco, seis o hasta siete meses no es agradable, pero él se ocupa de que nos mantengamos en contacto; y eso es lo importante, ¿no?

-La distancia nunca es el fin para nada... Aunque cueste muchísimo aceptarlo.-terminó de decir Danielle, poco convencida; aunque su expresión pasó desapercibida.

-Y sobre los rumores…-prosiguió Eleanor.-Siempre es mejor ignorar. La prensa hace cualquier cosa por conseguir dinero, y algunos fans están realmente locos. ¿Recuerdan cuando inventaron que a Niall lo había tropellado un auto, y que estaba en el hospital a punto de morir?-continúo mirando a las demás, riendo.- Se armó un gran revuelo y, en realidad, Niall estaba jugando al golf con Harry.

-Hay que tener ciega confianza en el otro, saber que si nos decimos la verdad, no nos falta nada.-cerró la conversación Perrie.

En todo lo que me dijeron tenían razón. Hay que tener muchísima confianza en el otro porque, si de verdad lo amas, vale la pena intentarlo; y hay que mantenerse en contacto pase lo que pase. Y sobre los rumores, ya que era mejor ignorar, ¿qué mejor que ignorar los insultos por Twitter? Creo que ya había aprendido mucho.

-Tienen toda la razón.-contesté sonriendo aliviada.-Gracias infinitas por ayudarme.

Perrie hizo una seña y nos abrazamos: “abrazo grupal”, le decían ellas. Realmente me sentí plena al abrazarlas y sentir su amistad, por más que hacía solo una semana que nos conocíamos. 

Cuando ya eran casi las 9, en el auto de Danielle nos repartimos cada una a sus respectivas casas. Ese día no podía ver a mi mamá y tampoco quería pasar por el hospital, estaba muy cansada; así que pedí que me lleven directamente al departamento. Luego de dejar a Perrie y Eleanor, aproveché y me saqué las dudas con Danielle.

-Sé que las cosas entre tú y Liam no están bien, Dani.-digo una vez que ella frenó en un largo semáforo, esperando no estar equivocada.-Lo veo en tu mirada, se nota.

-Suspira y sonríe vagamente.-Amo a Liam con todo mi corazón, Sam.-responde con los ojos llenos de lágrimas. Era como si las tuviera contenidas por mucho tiempo. Estaba siendo realmente sincera.-Pero siento que no puedo más. Ya hace 2 años que acepte mantener esta extraña relación con Liam, pero aun así…

-No lo sientes cerca, lo sientes distante.-digo completando su oración.

-Exacto.-responde con un hilo de voz, secándose las lágrimas y arrancando el auto de nuevo.-Pero si no estoy con él, no soy yo, me falta algo. Y estoy decidida a hacer que todo esto funcione.

-Me alegra saber qué quieres seguir adelante.-digo tomándola de la mano y mirándola fijamente, una vez que estacionó en la puerta del mi edificio.-Y si quieres algún consejo, aquí estoy yo. Pero estoy segura de que Liam tampoco querría perderte.-

Danielle me abrazó fuertemente, sentí su agitada respiración y pude notar como las lágrimas discurrían en sus mejillas. Me dolía verla así, en esa situación, pero no podía hacer nada más que ofrecerle mi apoyo.

"CHANGE YOUR LIFE"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora