Cap 12

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  Mi maldita triquiñuela está hecha, Tn__ terminó con Logan y ahora que su corazón está partido en dos. Jos se encontrará allí, para consolarla, para animarla y devolverle la sonrisa. Camino hacia ella, quien ya está sentada en un rincón oscuro en todo este enorme Centro Comercial. Ella está abrazando sus rodillas, pone la cara entre sus manos y aún sigue sollozando. Me siento a su lado, sin decir nada. La verdad es que no sé qué decir ahora. Se supone que la comprenda, que la consuele, pero ¿qué le diré? "Lo lamento, pero solo así te puedo conquistar". Definitivamente no.
- No te atrevas si quiera a decirme, te lo dije, o ya lo sabía o... algo... parecido -menciona entre susurros y sollozos.
- No, eso no pasará -le digo en tonos dulces y amables- ¿Quieres irte ya a casa? -pasa un buen rato antes de escuchar una sola respuesta de ella. Pero no me importaría estar con ella hasta que se calmara; pues se suponía que este era el plan.
- De acuerdo –dijo y se levantó lentamente. Me paré a su lado y caminamos hacia las escaleras que nos llevarían al estacionamiento subterráneo.

Llegamos a mi auto y le abrí la puerta, por la cual ella entró aún con lágrimas en los ojos. Mordí mis labios, no sabía cómo sentirme respecto a esto, de alguna forma la había herido y sabía que volvería a pasar cuando yo la enamorase y tuviera que terminar con ella. Me sacudí la cabeza se suponía que esto era solo una apuesta y yo debía de cumplir, no tendría que andar con sentimentalismos.

Entré al auto y ella miraba hacia delante con la mirada perdida, como si estuviera perdida en sus pensamientos. No derramaba lágrimas, pero sus ojos estaban enrojecidos y sus labios también. Sin decir nada encendí el motor y nos dirigimos a casa. Metí el auto a mi garaje y luego me acerqué a su puerta para abrirla y ayudarle a salir. Cuando lo hice, ella salió con muchas lágrimas y sus labios temblaban. En cierto modo me odiaba por lastimarla, pero supongo que esto se quitará cuando yo entre a su corazón.

La acompañé a la puerta de su casa en silencio y ella abrió la puerta.
- Me había divertido si no hubiera sido por lo de Logan -murmuró- hasta luego Jos...
- Hasta luego Tn__ -dije y ella se acercó a mí dándome un ligero abrazó, pero cuando se encontró entre mis brazos la apreté a mí y ella comenzó a llorar más fuerte. Cerré los ojos y respiré profundo, su aroma impregnaba mi ropa y sus lágrimas empapaban mi camisa, pero eso no me importaba.
- Lo siento -susurró y yo acaricié su cabello.
- Está bien, tranquila -dije y ella se separó de mí.
- Me tengo que ir -susurró y entró a su casa, cerrando la puerta tras de sí. Yo caminé hacia mi casa y entré sin decir nada, mis padres al parecer no estaban, tampoco mis hermanas.

Subí a mi habitación y me tiré en la cama. Ahora sabía cual era mi siguiente paso, ahora tenía que encargarme de ser dulce, amable y no dejar que Logan se le acercara a quererle dar explicaciones, porque sabía que posiblemente ella lo perdonaría y era muy fácil que lo hiciera. Cerré mis ojos y me dediqué a pensar en todo lo que tendría que hacer ahora.

Tn__-.
Creí que mi mundo se venía abajo. ¿Cómo podía ser posible que el hombre en quien en realidad confiaba que no fuera mi hermano me hubiera engañado y de esa manera? Al entrar a casa traté de respirar profundamente, traté de calmarme y pensar que no era el fin del mundo que había muchos chicos afuera y yo podría tener al que quisiera, que... Logan no era el centro de mi universo. Pero, era imposible dejar de pensar en todo, en lo que habíamos vivido en lo mucho que yo lo quería y en lo mucho que despreciaba a Hanna.

Mis padres no estaban y eso era raro. Pero me dirigí a la cocina y tomé un vote de nieve del refrigerador, metí la cuchara y le puse demasiado jarabe de chocolate. Siempre me he preguntado por qué las mujeres deprimidas hacemos eso, pero... bueno, al final te satisface la dulzura o simplemente te empalaga. Las lágrimas venían nuevamente a cantidades exorbitantes. Tomé el teléfono y marqué al único que me ayudaría con esto. Dos, tres timbres y contestó.
- ¿Hola? -dijo un tanto cansado.
- Logan me engañó -susurré bajito. Él se quedó callado un segundo y suspiró marcadamente.
- ¿Cuando? -preguntó Joseph un tanto molesto.
- Hace un rato... lo encontré en el comedor del Centro Comercial con Hanna -murmuré y él me escuchaba tranquilamente mientras yo le contaba toda la historia.
- Odio a esa tipa, "Hanna la besucona", pero... enserio me sorprende por él. De verdad creí que era honesto contigo -las lágrimas de nuevo se encapotaron en mis ojos- Tn__, bonita, deja de llorar por favor.
- Es que me molesta mucho -lloriqué- ¿por qué son así? ¿por qué no les basta estar solo con una?
- Amor, tranquila... -susurró apesadumbrado.
- ¿Por qué no estás aquí? -lloré más fuerte- ¿por qué te tuviste que ir?
- Cuida lo que dices linda, sabes que estoy acá por la Universidad y que de todas formas siempre estoy al tanto de ti. Si fuera por mí ahora mismo le estuviera pateando el trasero a Logan y tú y yo comeríamos pizza hasta cansarnos y morir por dolor de estómago.
- ¡Te extraño! -lloré en mi balcón.
- Me graduaré en un par de días, así que no llores más... prometo volver a casa en cuanto esto termine. No me hagas sentir mal -pidió- no me hagas querer dejarlo todo ahora. Aguanta solo un par de días y te veré aquí en mi graduación, ¿quieres?
- Siempre te estoy preocupando -murmuré- debo dejar de acudir a ti siempre que tengo problemas estúpidos.
- No Tn__, escúchame bien -pidió- prefiero que acudas a mí aunque sea por un problema trivial, no me interesa qué tan estúpido sea. Siempre voy a estar protegiéndote. Si tengo que dejarlo todo por ti, lo haré.
- No Joseph -luché- esto no puede ser así siempre.
- Tn__, por favor cálmate -pidió- no hagas nada estúpido de acuerdo.
- Sabes que si dices eso de todas formas lo haré -murmuré de forma sombría y seca.
- Tn_ Bouvier, deja de decir tonterías, métete a la cama y duerme -dijo de forma dura- y sí, señorita es una orden.
- No -dije y colgué. Tomé mis cosas y salí de mi casa, al final no había nadie. Así que nadie me detendría.

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