Rutina nocturna

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Orihara Izaya era un hombre, de lo que podría decirse, variados "intereses" siempre y cuando estos estuvieran relacionados con sus preciosos humanos, pero había un interés que el azabache nunca pensó que surgiría y aunque lo evito por años....finalmente la bestia consiguió el interés del informante de Shinjuku.

Es que así era, el hombre más fuerte de Ikebukuro y el gran informante de Shinjuku estaban juntos después de años de peleas y profesarse amor-odio había iniciado una relación un poco extraña, pero que para ellos era (a su manera de ver) ideal. Esa noche aquel informante admiraba a su hermosa cuidad llena de sus hermosos humanos en aquel momento su celular sonó, no necesito ver el número para saber que era el.

-Shizu-chan~ -pronuncio con burla.

- Olle pulga, a que hora piensas volver, eh? – su tono era entre molestia y quizás preocupación, aunque eso ultimo era la interpretación del informante.

- Lo siento Shizu-chan~ pero hoy llegare tarde- pronuncio sin mucha importancia ganándose un gruñido del otro.

- Más te vale no estar haciendo algo estupido pulga!! O iré donde estas y te romperé los brazos! – el informante sonrío sabiendo que seguiría después-...asegúrate de que llegar vivo...por que no pienso cargarte donde Shinra.

- Si, si, si...Shizu-chan, nos veremos en casa...no me esperes despierto querido~ -después de aquello beso cerca del micrófono y corto sabiendo que eso habría avergonzado a su bestia.

Después de reunirse con su cliente y de hacer algunos planes el azabache llego por fin a su departamento, con pereza se deshizo de sus zapatos y con ligereza entro al cuarto donde estaría su bestia durmiendo, asomo su cabeza para luego dejar su abrigo dentro del armario y tomar su ropa para dormir. Aun sin hacer mucho ruido en su llegada sintió como una voz lo llamo.

- Izaya? – pronuncio con pereza aquella voz.

- Mmm? – el azabache se voltio sin decir mucho pensando que aquella bestia solo hablaba en sueño.

- Pulga....sabes la hora que es?....

- Creo que desperté a la bes- pero antes de que pudiera seguir hablando o protestar aquel rubio ya había atrapado al pelinegro bajo sus brazos.

- ....Shizu-chan....de verdad....estas durmiendo bestia? – pero este no recibió respuesta.

- Vaya....si que eres increíble y con un sueño muy pesado bestia...-con sus manos tomo el brazo del rubio en un intento de liberarse sin mucho resultado- al menos déjame cambiarme....

- Ya cállate!! Quiero dormir y tu molesta voz de pulga no me deja...

- ...pero tu eres quien me tiene atrapado!

- Este es tu castigo Izaya!... ahora serás mi almohada para dormir – el rubio solo reforzó el abrazo dejando cero posibilidades de chistar al pelinegro.

Para el informante paso una hora mirando el techo pensando en como había llegado a este tipo de relación con esta bestia que lo abrazaba con posesión, aunque el sabía que una hora era exagerado se lo planteo así. Al ver que no tendría chances para "escapar" solo se rindió ante su bestia, se volteo quedando frente a frente al dormido rubio lo abrazo y miro su cara con detenimiento; sus pensamientos vagaron entre lo idiota que era hasta lo dulce que a veces podía ser. Con suavidad rozo los labios de Shizuo con su pulgar, esos labios a los cuales era adicto y del cual ya no podía negar a no besarlos, tras ese pensamiento solo sonrío y beso la frente del rubio con ternura en un abrir y cerrar de ojos el rubio estaba sobre el pelinegro.

- Vaya pensé que Shizu-chan quería descansar como un humano normal~

- Izaya....- beso su cuello con ternura acercándose a su oído susurro- estaba preocupado por ti....sabes?.

- ...no confías en mi? – con ternura rodeo el cuello del rubio con sus brazos.

- La ultima vez...te encontré golpeado y sangrando en la madrugada sabes....así no puedo confiar en que llegaras sin rasguños.

Por unos segundos el pelinegro tenia su típica cara inexpresiva la cual de un minuto a otro sonrío con burla mientras una leve risa salía de sus labios, esto hizo enfadar al rubio el cual no veía lo "divertido" de encontrar a su pulga en ese estado; el pelinegro lo miro con aquella sonrisa y con suavidad se acerco más a la bestia besando su mejilla.

- Eso paso hace como un año bestia boba~ -un gruñido se escucho en respuesta, el pelinegro suspiro y cerro los ojos- pero.....amo que Shizu-chan se preocupe por mi....me hace sentir especial sabías - la mirada del pelinegro estaba cargada de lujuria y ternura.

- ...I-izaya....- el sonrojo se hizo presente en las mejillas del rubio, desviando la mirada de aquel que lo hacia estremecer.

- Te amo Shizuo...- el rubio volteo rápidamente y sorprendido eran pocas la veces que su pulga decía su nombre.

- Y yo a ti Izaya...- lentamente acerco sus labios al del pelinegro uniéndose en un calido beso casto, pero lleno de significado.

- Posesivo~ -susurro cerca de los labios del rubio.

- Estorbo...- acaricio la mejilla del pelinegro con suavidad.

- Meloso...

- Problemático...

- Bestia...

- Pulga...

- Idiota...

- Apestas...pero te amo- sonrío mientras volvía abrazar al informante.

- ...y yo a ti...Shizu-chan...mañana quedemos juntos todo el día – se acerco a su oído para susurrar de forma seductora- quiero a Shizou Heiwajima para mi...y solo para mi ~

Con un sonrojo en las mejillas y un pequeña vena asomándose por su frente Shizuo suspiro escuchando la leve risa de su pulga para luego besarlo, pasaron algunas horas así dándose carias y besos dulces y cargados de amor hasta que cayeron dormidos en los brazos de Morfeo.

Shizaya one-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora