Los Colores De Tylor [Yaoi]

siete

Al siguiente día fui el primero en llegar al salón, sólo para ver como Tylor entraba por la puerta.

Los demás fueron llegando poco a poco y el salón se fue llenando.

La clase era en otro salón que, para mi buena o mala suerte, los asientos eran por parejas, ya saben, en una mesa tenían que estar dos alumnos.

Luke llegó antes que Tylor, lo que me hizo sentirme un poco decepcionado. Se sentó a mi lado y se recostó en la mesa.

-Vaya, Luke te ves realmente mal- y era verdad, su cabello que normalmente estaba planchado ahora estaba enredado, bajo sus ojos sobresalía el morado de sus ojeras y su ropa estaba arrugada-. Parece que te atropellaron.

-Ahgg... cállate, ayer no dormí nada...- llevaba un gorro negro, el cual usó para cubrirse la cara.

-¿Jordan te abrió?

Luke levantó su mano haciendo la seña del dedo de enmedio y la apuntó hacía mí.

-Al menos yo ya tengo novio- su voz, aunque se notaba cansada, dejó revelar que estaba un poco molesto.

-Vamos Luke, no te enojes, oye... ¿puedo pedirte un favor?

Luke se reincorporó y me miró con malicia.

-¿Qué quieres?

-¿Podrías dejar libre tu lugar?

Levantó una ceja mientras su sonrisa se volvía malvada.

-Muy bien, lo haré, pero, te costará un cómic- se levantó del asiento-, y el helado de ayer- dio unas palmadas a mi hombro y fue a sentarse al lado del chico de cabello naranja, no recordaba su nombre.

Tylor llegó un minuto antes que el maestro llegara.

-Tylor- lo llamé, él me buscó con sus ojos y yo le hice señas para que se sentara a mi lado.

-Gracias- Tylor dejó su mochila en el respaldado de la silla-. Pensé que te sentarías con tu amigo- sonrió mientras acomodaba un mechón de cabello detrás de su oreja.

-Sí... hum, él quería platicar con otras personas- le sonreí apenado.

Tylor soltó una dulce risita mientras cubría su boca con una mano. Seguro que descubrió mis intenciones.

-Está bien- respondió dulcemente.

Durante todo la clase tuve que necesitar de todo mi autocontrol para no voltear a mirar a Tylor cada dos minutos, pero aún así no pude evitar voltear un par de veces.