Si a Calum le hubieran dicho que cuando se despertara todo sería un caos, probablemente hubiera estado de acuerdo, pero no se imaginaba tal cosa.
Luke se encuentra sentado en frente de su computadora, con varias tazas a su alrededor- que posiblemente hubieran tenido café-, mientras teclea rápidamente, casi pareciendo un maníaco. Su mirada luce cansada, y el diamante sobre su cabeza se encuentra color amarillo.
-Luke, creo que deberías parar de escribir- murmura Calum mientras apoya una mano en el hombro de su amigo. Si seguía así, el rubio sufriría un colapso.
-¡No me toques!- exclama Luke mientras se remueve- Voy en el capítulo diez de mi libro, es un éxito en la zona hispana, te va a encantar cuando lo termine.
-Luces como si estuvieras a punto de morir.
-Vete, me desconcentras.
Calum obedece y se retira de la habitación, manteniendo el ceño fruncido e intentando recordar en qué momento Luke había descubierto su pasión por la escritura. El rubio nunca mostraba interés por los libros, así que verlo tan entusiasmado escribiendo fue algo que realmente sorprendió a Calum.
Tratando de ignorar lo sucedido, se dirige hacia el salón, en donde se encuentra la televisión rota, el sillón manchado, y a un Michael durmiendo en el piso. Parece estar cómodo, así que decide dejarlo dormir y dirigirse a la cocina, ignorando qué había pasado.
Y allí se encuentra el peor desastre de todos.
Hay cenizas en el piso, el horno ya no está y hay varios platos de waffles quemados sobre la mesa.
-¿Ashton?- pregunta el moreno al verlo entrar. Tiene un delantal de cocina puesto, y su pelo parece tener restos de alguna comida.
-Calum, oh Dios, no sabes lo que fue la noche- exclama el ruloso mientras pasa ambas manos por su cara- Estuve siete horas cocinando waffles. ¡Hasta quemé la cocina! Tuve que apagarla con un extintor que apareció. Siento que el juego se está descontrolando.
Antes de que Calum pueda hablar, Ashton se arroja a sus brazos y lo besa. El moreno mira hacia arriba, encontrándose el tan conocido recuadro azul, por lo cual entiende que aquello era obra del juego.
Cuando ambos se separan, Ashton comienza a disculparse.
-No importa, sé que no fue tu culpa- susurra Calum, aún algo aturdido por el beso.
-Tenemos que salir de aquí. Luke esta totalmente loco escribiendo, Michael lloró dos horas al no poder arreglar el televisor y yo, a este paso, podría quemar la casa entera.
-Mierda, por más que me cueste admitirlo, tienes razón, pero el juego esta encendido, no tengo certeza de cuando lo van a apagar.
¿Esta seguro que usted desea salir de la partida? Presione guardar para no perder su avance.
Guardar.
-O tal vez si.
Un ruido proveniente del salón llama la atención de ambos.
-¿Michael?- pregunta Ashton.
Al no recibir respuesta, ambos se acercan hasta el teñido.
-Dios, Michael, ya levantate- exclama el ruloso mientras lo patea suavemente-. Tienes una televisión igual a esta arriba, deja de llorar y usa aquella.
-Pero en esta tenía mi progreso en Skhutr 4: Ghi.
-¿Probaste llamar al técnico de reparaciones?- comenta Calum al ver la opción desplegarse en el menú.
-¿Qué? No. No la había visto- responde el teñido mientras se levanta-. Gracias Calum, tu no eres inservible como Ashton.
-Vete a la mierda.
-Callense ambos- Calum se dirige a Ashton- Ya resolvimos un problema, sólo nos queda despegar a Luke de la computadora.
-Es, literalmente, imposible.
-¿Por qué?
-Cada vez que Luke intenta irse, el jugador le vuelve a dar a la opción de escribir, por eso se ha obsesionado. La última vez que lo vi salir fue cuando Michael lo fue a molestar.
-Esta bien. Tu intenta llevar a Michael con Luke, yo iré a comer.
-Genial- Ashton comienza a caminar en dirección al teñido, hasta que entiende lo que Calum le dijo- Espera, ¿qué? ¿Tú qué?
-Acabo de despertar, necesito desayunar- dice Calum mientras se dirige a la cocina.
-Ojalá te ahogues con los waffles carbonizados- murmura Ashton mientras retoma su camino.
Ahora lo difícil sería lograr que Michael se mueva.
el sig cap va a ser la continuación de este, si no iban a ser como mil palabras.
