Capitulo 25 Nunca te dejare ir

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Ichigo

Cuando luchas día a día por no lastimar a alguien, siempre al final terminas lastimando

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Cuando luchas día a día por no lastimar a alguien, siempre al final terminas lastimando... 

Mucho mas de lo que se quería evitar....

.-. Ichigo es hora de levantarse !!! .-. La voz de mi hermana se escucha a través del marco de la puerta de una habitación cerrada con llave.

La lucha es contante incluso en la vida de una persona bondadosa. 

.-. Bajo en un momento yuzu .-. 

Vemos como enemigos potenciales a todo lo que nos rodea, la cama que te acobija cuando tienes frió, las pantuflas que evitan que tus pies se congelen, el cepillo de dientes, incluso contra las hojas de los arboles que caen cuando el invierno se acerca.

.-. Ichi-nii, es hora del almuerzo .-. Se me había olvidado que ya era un lunes por la mañana, mi padre y mis hermanas habían llegado ayer por la noche.

.-. Quisimos entregarles sus obsequios de viaje a ti y a rukia-chan, pero todo estaba en silencio, se fueron a dormir temprano?? ....-. Yuzu prepara los platos para el desayuno, karin aun no bajaba y mi padre mas seguro que este en la clínica. Como se cerro la clínica la mayor parte de la vacaciones los personas ya estarán esperando a primera hora. -. Y rukia por que no baja?.-. Me cuestiona al ver que solo era yo quien se encontraba de pie en la entrada de la cocina .-. Creí que se había quedado dormida en tu habitación.... .-.  

.-. Rukia tuvo que ir a reglar unos pendientes...-. Era una semana aproximadamente desde que rukia se marcho. 

.-. Cuando regresara, quiero entregarle sus obsequios .-. 

.-. No lo se yuzu .-. Y era cierto no sabia, cuando ella iba a regresar.

.-. Bueno, entonces la esperare .-. 

Y yo voy a buscarla.....

Si tan solo.

.-. Ichi-nii, no iras a la escuela???, tu uniforme  .-.

.-. No me siento bien .-.  

Hubiera sido mas sensible, me hubiera percatado de la fragilidad de Rukia y  tal vez nuestro futuro habría sido distinto.

.-. Quieres que llame a papa? .-.

.-. No.... solo quiero dormir un poco ...-.

Ahora entiendo cuando dicen que un minuto hace la diferencia.

Que date conmigo.

Era lo que quise decirle cuando se desvanecía frente a mi el día que se fueron mis poderes. Y eran las mismas palabras que intente decir cuando la volví a ver. 

Hacia mas de una hora que mis hermanas salieron de casa, cogí mi sudadera y mis llaves. El sentimiento de asfixia al estar dentro de mi habitación, era insoportable. Quería salir era lo único que pensaba.

Camine un par de minutos hasta llegar un pequeño cruce, la gente se sumergía en mensajes de texto que tal vez nunca mandarían, a no ser que fueran de trabajo o por que alguien espera por una respuesta... 

Porque era yo el que no se atrevía en mandar un mensaje, por miedo a que nadie se encontrara al otro lado de la linea ignorándome.

Desde que la conocí, siempre intente en seguir avanzando con la esperanza de poder alcanzarla. Miraba un horizonte buscando que ella saliera, alcanzando un cielo pensando que ella cogería mi mano y la distancia de la tierra al cielo se acortara.

Cuando estoy con ella, tengo una fuerte confianza en que todo saldrá bien. 

Y cada vez que ella se marcha mi corazón se marchita por el vació que ella deja.

La primera mañana en la que ella se marcho sentí, que todo se desvanecía, que las luchas que habíamos ganado juntos no tenían un significado, y que se desvanecieron por que no había sido lo suficiente mente fuerte para aferrarme a ellos ni a ella. 

Que había perdido mi oportunidad de ir a una buena universidad, por las constantes falta, que envejecería pronto por las constantes noches sin dormir. Pero todo me resultaba de un color gris.

¿No era eso lo que quería?

Quería ser alguien normal por eso me aburría todo... Y nunca me considere alguien especial.

¿Entonces por mi mundo se torno gris?

Todo en lo que creía se desvaneció junto a su presencia.  Fue en ese momento cuando colapse. 

Seguí en mi rutina diaria, sin percatarme de lo que pasaba a mi alrededor, la condición física que obtuve me ayudo a mantener una vida deportiva estándar, comía a mis horas, dormía adecuadamente, me volví un alumno ejemplar nunca faltando a clases. Incluso por mi mente se cruzo la idea de matricular en una universidad. 

No obstante, mi instinto de pelea no se fue, seguía vivo.

Esta mañana antes de que yuzo me despertara, estaba soñando, el mismo sueño que toda esta semana se repetía cada vez que lograba conciliar el sueño. Fue el día que nos conocimos, en medio de la acera de las calles rumbo al centro, una espada filosa empuñada por una pequeña chica.

Recuerdo que esa misma noche la luna estaba en todo su esplendor y la misma espada filosa atravesó mi pecho. 

Fuiste tu quien convirtió mi deseo de proteger en algo real.

.-. Quien habla .-. El móvil que estaba dentro mi chaqueta había empezado a vibrar.

.-. El portal esta listo .-. y con eso el pitido de una llamada por terminada se había escuchado.

Pero a diferencia de el antes y el ahora, hay una cosa de lo que estoy seguro y es que nunca mas quiero dejarla escapar. 


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