Criaturas mitológicas y mágicas

dos: strigoi

Vampiros de la mitología rumana. Se cree que eran espíritus malvados, teniendo su origen documentado a partir de la Edad Media con el croata Jure Grando, el cual aterrorizaba a los pobladores de aldeas, siendo llamado strigoi, que era vampiro para el dialecto de Istria. Aunque strigoi en rumano significa literalmente "grito".

También se les consideraba brujas, que se levantaban de la tumba y tenían habilidades sobrenaturales. Se convertían strigoi los que: nacían con un pedazo de membrana fetal en la cabeza, los que morían de una manera innatural, los que morían antes del bautismo, los séptimos hijos de una familia, el hijo de una mujer embarazada que no comiera sal o fuera mirada por un strigoi o por una bruja. Naturalmente, ser mordido por un strigoi también te convertía en uno. Aunque solo eran mitos, también se creía que podías ser convertido en un strigoi si morías sin casarte, si sobre tu cuerpo inerte caminaba un gato o si morías siendo una persona llena de dolor y arrepentimiento. 

Los strigoi, se creía, podían convertirse en animales, necesitaban consumir sangre para sobrevivir (bebían directamente sangre del corazón), eran invisibles e inmortales, e incluso podían volverse invisibles. Claro que como todo tenían sus desventajas: no podían acercarse a la sal, ni entrar a una iglesia, eran vulnerables al agua bendita y podían ser asesinados si se les cortaba la cabeza y enterraban el cuerpo del strigoi boca abajo. Otra manera de acabar con strigoi era con una estaca de madera al corazón para posteriormente quemarlo.

Físicamente se creía que los strigoi eran altos, con cabello pelirrojo, ojos azules y que tenían dos corazones. De hecho, por eso se asesinaban a los bebés que nacían con ojos azules y cabello rojo. 

Un strigoi podía volver a su vida normal, pero con el tiempo miembros de la servidumbre o animales cercanos a donde viviera solían aparecer muertos. Aunque también se dice que los que morían sin casarse solían regresar a la casa de su novia para matarla. 

Aunque parecieran un mito antiguo, en 2003 se descubrió la historia de un hombre rumano de 76 años, el cual murió y meses más tarde (ya en 2004) una sobrina admitió haber tenido contacto con él y que él había presentado algunos de los síntomas descritos anteriormente. Sus familiares decidieron hacerle una incisión en el pecho y sacarle el corazón. 

¿Quién sabe? Puede que tu también pronto te encuentres con uno. 

¿Alguna obra de ficción donde aparezcan?  Vampire Academy de Richelle Mead, Nocturna de Guillermo del Toro.