Fin

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Epilogo:

4 meses después...
Bora-Bora.

Si, ojala estuviéramos en Bora-Bora. Pero no, solo estábamos en la playa de nuestro amor, de nuestra felicidad. Respiré profundamente el aire marino y me apoyé con cuidado en la baranda del balcón. Miré hacia abajo y vi como todos los invitados comenzaban a tomar asiento en las pequeñas sillas pagables que Zayn había traído. Todo se veía demasiado blanco. Me miré a mi misma... hasta yo estaba de blanco. Y bien, ¿Qué esperaban? Es una boda. Supuestamente todo tiene que ser en blanco. Quise cambiar un poco y ponerme un vestido color natural... pero casi fui asesinada por mi madre al intentarlo.
Todo iba mejor. Perdoné a mis padres por haberme mentido y les pedí que vinieran para este día. Pablo también iba a estar presente. Aunque sé que las cosas entre él y nuestro padres no están del todo bien.
Suspiré y me di la vuelta. Me sobresalté un poco al verla allí.
-Te ves hermosa -me dijo algo emocionada.
-¿Tú crees? -inquirí y entré de todo a la habitación -Todavía no estoy del todo convencida.
-Estás perfecta, TN_________ -sonrió Miranda. Le devolví el gesto.
Me acerqué al espejo para terminar de maquillarme. Mi vestido de novia no era la gran cosa. Un vestido perfecto para casarse en una playa. Blanco, largo, con unos finos breteles. Algo escotado... Zayn dijo que le gustaría quitármelo luego en la noche de bodas. Sonreí sin poder evitarlo. Y luego solté un suspiro.
Mi cabello estaba recogido con un pequeño adorno de perlas blancas, y algunos mechones escapaban a propósito.
Y de repente me sentí nerviosa. Yo estaba por casarme con el hombre más importante de mi vida. Jamás pensé que esto podría suceder. Tantas cosas han pasado en todo este tiempo. Y ahora estoy a punto de ser completamente feliz.
La puerta se abrió y ellas entraron. Mis ojos se conectaron con los ojos marrones de ella. Danielle corrió hacia mí y nos abrazamos. Zayn le había contado toda la historia hacia un par de meses, pero por una y otra razón recién hoy iba a poder verla.
Me abrazó con fuerza.
-Estás tan... tan... -se alejó para mirarme a la cara -No puedo creer que seas tú...
-Estás igual que siempre Peazer-le sonreí.
-Mentira -se quejó -Las gemelas me han sacado como 10 años de vida -todas reímos -Pero aun así son lo mejor que pasó.
-¿Dónde están? -pregunté -Quiero verlas...
-Están abajo... peleándose por quien de las dos va a ser la novia de tu hijo.
Solté una estrepitosa carcajada. Ese jovencito, era todo un galán.
-No puedes culparlo -habló Brittany -Salió igual de galán que el padre.
La rubia lucía una enorme panza. Se veía tan bonita así. Mi sobrinita crecía muy rápido allí dentro. Alguien más entró al cuarto. Isabella Pettyfer tenía un aspecto agotador.
-¿Qué te sucedió, Bella? -le pregunté. Ella cerró la puerta de golpe.
-Zayn... Zayn quiere entrar a verte -dijo agitada.
Rápidamente todas se pusieron de pie como si una guerra se nos viniera encima. Las miré extrañadas.
-¡Dile que ni se le ocurra entrar! -exclamó Miranda. Y entonces la puerta sonó.
-TN_________, amor, ¿estás ahí? -preguntó él. Sonreí y me iba a acercar a abrirle cuando Brittany me tomó del brazo. Me giré a verla.
-¿Acaso has perdido el juicio? -preguntó -¡No te puede ver!
-Pero... ¿Por qué? -quise saber.
-TN_________ -habló Danielle -Es de mala suerte que el novio vea a la novia antes de llegar al 'altar'
-Por dios -me acerqué de nuevo a la puerta -Son solo puras tonterías.
-¡No! -chillaron las cuatro a la vez. Las miré algo asustada.
-¡Zayn, vete! -le gritó Isabella.
-¿Qué? -preguntó e intentó abrir la puerta pero Bella estaba apoyada sobre ella -Déjenme ver a mi futura esposa, cuarteto de arpías.
-¡No, no puedes verla! -le dijo Danielle.
-Pero, ¿Por qué? Solo quiero darle un besito y decirle que es lo mejor que me pasó en la vida, que la voy a hacer muy feliz y que la amo más que a nada y que en este momento estoy muy nervioso y necesito que me diga que vamos a estar juntos para siempre.
Todas entonaron un armonioso Aaaaaw. La sonrisa en mi rostro no podía ser más grande porque no me daba la boca para sonreír más.
-Mi amor -le hablé detrás de la puerta -Las chicas dicen que es de mala suerte que veas antes de que lleguemos al altar... no quiero más malas cosas.
-No, yo tampoco -dijo él. Apoyé una de mis manos por la puerta.
-Voy a estar contigo para siempre, Zayn... y yo también voy a hacerte muy feliz, bonito. Te amo, te amo, te amo, te amo...
-Diablos, si no estuviera esta maldita puerta al frente podría ver lo hermosa que te debes ver diciéndome esto.
-¡Yaaa, Romeo, vete que dentro de 5 minutos bajamos! -le exigió Danielle.
-¡Eres una aguacursilerías, Peazer! No cambias más... Todavía estoy sentido contigo por haber interrumpido aquel momento de pasión que estaba teniendo con la madre de mi hijo en aquel armario.
Mis mejillas se tiñeron de un suave carmesí.
-¡ZAAYN! -le reproché. Ellas rieron.
-Ya me voy... te veo enseguida, futura esposa.
Lo escuché alejarse y me di la vuelta para mirar a mis amigas. Comencé a saltar y dar pequeños grititos. Ellas imitaron mi acción. Parecíamos 5 locas que necesitaban con urgencia una ayuda muy especial.
Las chicas se despidieron de mí y me dijeron que en 3 minutos bajara, que ya estaba todo listo. Se fueron dejándome con el corazón acelerado. Me estoy por casar... estoy por convertirme en la señora de Malik. Esto es genial.
Los tres minutos se hicieron interminables. Miré la hora sobre el reloj de pared y me puse de pie, tomé mi ramo de flores blancas y salí de la habitación.
Bajar las escaleras no fue algo muy complicado... ya que estaba descalza. No iba a ponerme zapatos caros para casarme en la arena.
Llegué hacia la puerta y mi corazón parecía una bomba de tiempo. Traté de calmarme pero se me estaba haciendo imposible. Abrí la puerta y la música llegó hacia mis oídos. Todos se pusieron de pie. La mayoría estaba de colores claros, con antojos y sombreros... varios de nuestros invitados tenían puestas sus mayas. Estoy segura que la fiesta será un descontrol. Y mi mirada se posó en él.
Allí estaba, el amor de mi vida, vestido con una camisola blanca, que dejaba un poco su pecho al descubierto. Unos pantalones sueltos del mismo color y también descalzo. Tenía las manos en los bolsillos y me miraba con tanto amor... que hacía que me temblaran las piernas.
Comencé a acercarme a él. Mis ojos se llenaban de lágrimas a medida que llegaba a mi destino. Mi hijo estaba parado al lado de su padre. Su cara de orgullo era increíble. Aquella imagen era más que perfecta.
Llegué hasta Zayn. Él estiró su mano y me acarició el rostro.
-Por dios, pareces de mentira -murmuró. Bajé la mirada y sonreí.
-Y tú pareces un príncipe -le aseguré. Él se iba a acercar a mí, pero alguien delante nuestro acomodó su garganta.
-Aun no, jovencito -le dijo. Reí por lo bajo. El viejo curita del pueblito era el que iba a casarnos. Se acomodó un poco los anteojos -Estamos aquí reunidos ante todos ustedes y la creación de dios -señaló al mar -Para unir en sagrado matrimonio a esta joven pareja que quiere sellar su amor para siempre -el sonido del mar era la música perfecta para aquel momento -No me voy a extender leyendo retazos de la Biblia ni nada de eso, no quiero que la gente se me duerma -algunas risas llegaron a nuestro oídos. Zayn tomó mi mano y la entrelazó con la suya -Solo voy a decirles algunas palabras... cursis -las risas volvieron. Aquel viejito era tan tierno -El amor siempre se construye de a dos, tiene sus altas y sus bajas... pero por más que la tormenta enfurezca al mar y todo pareciera terminar... siempre se vuelve a la calma. Ustedes dos aun tienen mucho por vivir, y con solo verlos se nota que el amor les sobra. Se aman, y eso es lo único que aquí importa. ¿Quieren que ya empiece con los votos o sigo hablando?
Zayn rió por lo bajo.
-Los votos, por favor -le pidió.
-Bien. Zayn Javvad Malik Brannan, ¿aceptas por esposa a TN_________ ________(2do nombre) Hudgens para amarla y respetarla, tanto en la salud como en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza por el resto de tu eternidad? -le preguntó. Zayn me miró. Había tanto amor en aquella mirada.
-Si, claro que acepto.
Me mordí los labios.
-TN_________ ________(2do nombre), ¿aceptas por esposo a Zayn Javvad Malik Brannan para amarlo y respetarlo, tanto en la salud como en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, por el resto de tu eternidad?
-Si -murmuré ya que casi no podía ni hablar.
-Entonces solo me queda una pregunta súper formal -miró a los invitados -¿Hay alguien en esta playa que sepa de algún motivo por el que esta joven pareja no pueda unir sus vidas? Que hable ahora o calle para siempre.
-¡Yo! ¡Yo me opongo!
Mi corazón dejó de latir al escuchar aquella voz. Sin dudarlo dos veces giré para encontrarme con su figura al final del pasillo blanco. Los murmullos comenzaron a llegar.
Él no podía ser real, debo estar soñando... debe ser un sueño. Allí estaba mi Extraño, con un bastón en la mano y... los ojos abiertos. Mirándome fijamente.
-¿Papá? -le pregunté.
-No puedo creer que te ibas a casar sin mi permiso, Monstruo -me dijo.
Sin dudarlo corrí hacia él. Choqué con su enorme cuerpo y sentí que sus brazos me envolvían con fuerza. ¿Cómo podía ser aquello posible? ¿Cómo? Me alejé para mirarlo a la cara y tomé su rostro con mis manos.
-¿Cómo... cómo es que estás aquí? ¿Por qué nadie me avisó que despertaste? -le pregunté mientras las lágrimas resbalaban por mis mejillas. Él las secó con su mano.
-Estás aquí, princesita -su voz tembló -Y pensar que creí que te había perdido, que no te había cuidado como debía.
-No fue tu culpa, Extraño -aseguré -No lo fue...
Miré hacia un costado y allí estaban Erica y el pequeño Peter tomados de la mano, mirándonos con una pequeña sonrisa.
-Despertó ayer en la noche -me contó ella -Quise llamarte, pero el muy terco no me dejó. Dijo que quería hacerlo en persona.
Lo volví a mirar. Ahora todo sería completamente perfecto.
-¡Malik! -lo llamó a Zayn.
-¿Qué tal, suegrito? -le preguntó él.
-Debería patearte el trasero, hijo -le aseguró -No me has pedido la mano de mi princesita.
-Lo siento -dijo. No se le notaba el arrepentimiento a decir verdad -Pero es que... no me podía aguantar más.
-Te perdono, te perdono -dijo divertido -Pero ahora... yo voy a llevarte hasta él y les daré mi bendición para que todo esté en completo orden.
-Eres tan antiguo, Hugh -dijo Erica.
-Tú me debes una boda -le dijo. Ella lo miró algo sorprendida -Espera a que me reponga un poco y lo haremos todo como dios manda.
La música volvió a sonar y Hugh me llevó hasta estar de nuevo al lado de Zayn. El castaño lo abrazó con fuerza.
-Me alegro que ya estés aquí -le dijo sin soltarlo.
-Y yo me alegro que hayas decidido formalizar con mi hija.
Se alejaron y ambos rieron. Mi Extraño se puso a un costado y el curita suspiro.
-Y yo que pensé que esto iba a ser rápido -reí levemente -Bien, ya no más interrupciones. ¿O alguien más tiene algo para decir?
-¡Siiii! -chilló Pablo. Lo miré extrañada -Yo me robé una porción del pastel de bodas... lo siento, hermanita.
-¡Pablo! -dijo sin poder creerlo Brittany.
-¿Puede decir la frase, padre? -le pidió Zayn. El anciano asintió.
-Los declaro marido y mujer... puede besar a la novia.
Los aplausos comenzaron y Zayn se acercó a mí para juntar nuestras bocas. Rodeé su fuerte cuello con mis brazos y lo acerqué un poco más.
-¿Sabías qué? -murmuró contra mis labios.
-¿Qué? -le pregunté divertida.
-Vas a volver con la cocina llena de humo luego de nuestra luna de miel...
Reí y volví a besarlo.
-No tengo ninguna duda de ello, señor Malik.
Y ahora si... todo estaba yendo más que bien.

FIN!!!!

Que lindo c: esperó que les haya gustado tanto como a mi.
Las que comenten este capítulo las seguiré si o si (claro si igual me siguen) bye. :')

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⏰ Última actualización: Jan 31, 2016 ⏰

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N.E.M.C. 2° TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora