My Biology Teacher

~Capítulo 12~Pensamientos nebulosos

****************************COMENTEN Y ESTRELLITA*************************

Todo se va quedando atrás. Los edificios, el restaurant del cual hemos salido hace cinco minutos. Me mantengo en el asiento, con la respiración acelerada y suplicando porque él lo note.

Su perfume impregna todo el amiente del auto, y no puedo evitar no mirarlo de reojo. Mis emociones están completamente mescladas y mis pensamientos entreverados. Estoy jadeando.

Aprieto las manos y los puños tratando de recobrar mis sentidos. "Detente, (TN)" ¿Qué estas haciendo?—

Miro de reojo a la calle y ni siquiera sé por dónde nos hallamos. Mis sentidos están evaporándose. Observo la zona y sé que me es conocida pero no recuerdo de dónde.

"Detente, (TN)" ¿A dónde vas? ¿Vas permitir esto y luego ser una burla para él?...

Repentinamente él estaciona el auto y yo me dispongo a mirar desesperada el lugar a donde hemos llegado. Es una zona en donde hay edificaciones de algunas casas. No son edificios ¿Vive solo en casa?—

-Hemos llegado—Anuncia y yo volteo hacia él. Mis mejillas están ardiendo "Quiero regresar a casa"

Mi garganta está seca. Estoy apretando las piernas inocentemente y me hallo mirando sus labios. "Quiero volver a besarlo"

-Llévame a casa—Murmuro en un susurro—Ya no quiero hacer esto. Me arrepentí—

Pronuncio tan bajo y en el fondo me estoy arrepintiendo.

Levanto la mirada esperando su rostro disgustado. Una expresión de desaprobación y quizás termine dejándome en media calle para que tome mi propio taxi, pero lo que hallo es una expresión seria, completamente firme.

Trago saliva tratando de excusarme, pero una sonrisa llena de vacilación dibujándose en su rostro me detiene. Mis sentidos empiezan a confundirse. "No comprendo"

-Señorita Taylor. Por favor, observe muy bien donde estamos—Arquea las cejas mientras su rostro es iluminado por una emoción que se convierte en burla para mí. Mi pecho se alborota y levanto el rostro hacia el exterior, identificando la zona. Observo las calles tranquilas, las flores y el césped en la casa del frente. De pronto reconozco el lugar y mi cuerpo cae de golpe. Una oleada que me deja sin aire y me hace hervir las mejillas se apodera de mis mejillas. Nos hallamos a la vuelta de mi casa. "Me ha traído a casa" Jamás pretendía acostarse con migo.

-¿A dónde pretende que la lleve señorita?—Pronuncia con la voz ronca, llena de petulancia—

Volteo el rostro y concentro mi atención en él.

-Es un idiota—Escupo entre dientes—Ha perdido una gran oportunidad—Digo sin pensar. Estoy avergonzada y en lo único que puedo pensar es en hacerlo quedar mal, también—

-Quizás—Apoya su codo en el timón y su brazo en su barbilla, dedicándome una sonrisa seductora—Me he pedido la mejor oportunidad que me has permitido—Arquea la ceja—Pero pagaría oro por grabar la cara que tienes ahora—Pronuncia enarcando las cejas y levantando la comisura derecha de sus labios. Esa sonrisa que asegura su victoria y yo me hallo sin palabras—

Trago saliva, aprieto los puños y me obligo a regularizar mi respiración. Quiero golpearlo.

-Váyase a la mierda—Mascullo e intento abrir la puerta pero esta esta con seguro. Mi rabia se ha extendido tanto que empiezo a golpear la puerta para que me permita salir—

-Eh, tranquila— Siento su mano en mi hombro y yo volteo intentando golpearlo, pero él me sujeta las muñecas—Tranquila—Arquea las cejas—

-Abra la puerta—Exijo y él me sonríe inclinándose hacia adelante. Mi respiración es demasiado irregular.