-Si están aquí es porque Andrew les ha avisado y quiere que sepan lo que ocurre-continuó Álvaro-. Si nuestros padres se enteran de lo que hacemos, María y yo no podremos volver a pisar la calle jamás.

-Saldremos de la ciudad-dijo Carla-. No se darán cuenta. Podemos hacerlo.

-¡No! En cuanto nuestros padres hablen con Andrew estaremos condenados. Seremos sus hijos y aunque les cueste nos entregarían a la policía.-Álvaro y yo nos miramos y empezamos a contarles todo sobre nuestros padres.

-Pondrán policías en todas las fronteras, en las calles, carreteras... todo-comencé-. Salir de aquí será casi imposible sin que nadie salga herido. Buscando a gente no les supera nadie...

-Hay que irnos de aquí, entonces-habló Yoli y todos la miramos con el ceño fruncido-. Si son tan buenos como decís buscando gente, aquí no estamos seguros. Si alguna vez vinieron a este sitio, es posible que vengan a buscarnos.

A todos se nos abrió la boca ante lo que había dicho. Nuestros cuerpos se tensaron cuando escuchamos que alguien había entrado en la cocina. Cuando entraron por la puerta todos nos aliviamos cuandp vimos que eran Sandra y Blas. Nos habían encontrado. Si ellos lo hacían, mis padres sabrían directamente donde estábamos.

RAQUEL

AQUELLA MAÑANA

Me levanté como siempre para ir a la universidad. Desayuné, me vestí, cogí mi mochila y salí de casa. Cogí el coche y conduje hasta llegar a la universidad. Tuve que aparcar un par de calles lejos de la universidad ya que no había ningún sitio. Caminando a la universidad ví varios coches de policías pasar a toda velocidad.

A primera hora empecé a tomar apuntes puesto que en unos días tendría un examen y no había empezado a estudiar. Levanté la cabeza asustada cuando escuché la voz de Álvaro entrando en clase. Al parecer tenía que hablar conmigo y pidió permiso a la profesora para que saliera de clase.

La profesora me miró y yo asentí para que me dejara salir de clase. Si Álvaro estaba aquí era porque algo importante había pasado. Una vez fuera empezó a hablar.

-Tenemos que irnos. Algo malo ha pasado y las cosas no van bien.

-¿Qué ha pasado? Cálmate y respira un poco.-cogió aire y empezó a contarme todo lo que había pasado.

-Esta mañana la policía entró en tu casa y por poco se llevan a Carla y a David con ellos.

-¿Están bien?-le interrumpí.

-Lograron escapar, pero vinieron a nuestra casa para ver si nos encontraban. Por suerte, David y Carla nos avisaron minutos antes de que llegaran y logramos escapar. Estamos todos bien, pero en vuestra casa había fotos y tienen que estar a punto de llegar a por ti, igual que en la universidad de Yoli.

-¿Qué? Tenías que haber ido a por Yoli en vez de venir a por mí.-me alteré un poco y levanté el tono de voz.

-Cálmate, Carlos está en la universidad recogiendo a Yoli. Tenemos que irnos asi que entra ahí, coge tus cosas y salgamos pitando de aquí.-asentí.

Noté como el color de mi piel se había ido un poco y estaba pálida.

-¿Srta. Raquel está bien?-asentí despacio y me senté en mi sitio.

-¿Qué ha pasado?-negué con la cabeza-Has entrado con la cara pálida, todo el mundo sabe que algo te pasa, cuentámelo.

-Voy a fingir un desmayo, tienes que coger mi mochila y llevarme a la enfermería, ¿vale?

-Sí, claro, pero que...-no pudo terminar la frase debido a que fingí mi desmayo.

Todos se acercaron para ver lo ocurrido y la profesora dejó que Sandra me acompañara a la enfermería. Hizo lo que le pedí, cogió mi mochila y salimos de clase. Una vez fuera, me incorporé como si nada me hubiera pasado y mi piel fue volviendo a su tono normal. Salimos del edificio y Sandra me sujetó del brazo para que le explicara algo.

JUNTOS SEGUIREMOS EL COMPÁS(Auryn, no son famosos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora