Cap 1: ¿He estado enamorado alguna vez?

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Del amor al odio solo hay un paso. O eso dicen. Aunque, si es así, del odio al amor también lo habrá. Bueno, no soy el más indicado para hablar. Quiero decir, para ser sinceros, yo nunca me he llegado a enamorar. No es que tenga ninguna prisa, y la verdad es que lo prefiero así. Si si, soy un amargado, un solitario, decir lo que queráis. Pero el amor no es más que un invento creado para vender. Sobre mi punto de vista no es más que una estupidez. Un engaño del cerebro. Nada más.

¿Que que hago pensando en estas mierdas? Buena pregunta. Es solo que hay gente que es demasiado cotilla.

-Ohara, contesta... -había cinco chicas rodeándome, las cuales habían estado todo el día preguntándome cosas. Aunque no contestaba ni a la mitad de ellas, seguían preguntando.- Entonces... ¿te has enamorado alguna vez?

-Ya me lo habéis preguntado dos veces, -suspire mirando a una de ellas. Miré a la chica que me había hecho la pregunta, pelo castaño claro y ojos verdes, bastante mona la verdad y, además, no estaba mal de cuerpo, eso era un plus- ¿que os hace creer que esta vez voy a contestar?

-A la tercera va la vencida. -esta vez era otra la que había hablado. Rubia de ojos marrones, la única pega que tenia era que era demasiado alta.- Venga, contestamos... -las cinco de pusieron a hacer pucheros.

-A veces sois demasiado pesadas... -apoye las dos manos sobre la mesa, mirando de nuevo a la morena.- de todas formas ¿porque os interesa tanto?

-Veras... -la morena bajo la mirada y junto los dedos, sonrojándose levemente.- es que, no parece que tus relaciones duren demasiado... -levante una ceja algo sorprendido ante aquella respuesta, ¿acaso es su problema? Pareció darse cuenta de mi gesto y se puso a agitar las manos y a negar con la cabeza nerviosa.- N-No es que sea un problema, o que nos incumba lo más mínimo... es solo que nos preguntábamos si alguna vez has durado más de una semana con alguien. O si alguna vez te ha gustado alguna persona aunque no fuera correspondido... -se sonrojo aun más mientras las demás asentían.

¿Un amor no correspondido? Nunca me había parado a pensar en eso. Realmente no recuerdo que eso me hubiera pasado. Y eso de mis cortas relaciones tiene una explicación. Veréis, siempre son ellas las que dan el primer paso, quiero decir, nunca me he llegado a declarar a alguien. Al principio, puede que por pena, siempre aceptaba aquellas declaraciones y acababa saliendo con ellas. Después de un tiempo eran ellas las que empezaban a aburrirse, diciendo que era aburrido y que no era nada cariñoso, que no las prestaba atención. Ese no era mi problema, eran ellas las que decían que me querían solo por mi aspecto.

Hoy en día la cosa no ha cambiado demasiado, lo único que ahora soy un poco más selectivo digamoslo así. Me fijo más en los pequeños detalles. Aunque no es un problema demasiado grande, no tengo un prototipo de chica perfecta. Solo me fijo en el físico para aceptarlas, después de todo ni siquiera quieren una relación. Solo me quieren por mi cuerpo, así que ya suponéis cual es su propósito.

-Oye Ohara, ¡no te pierdas en las nubes! -se me olvida que ellas todavía seguian ahí. Realmente me había perdido completamente en mis pensamientos.

-¿Enamorarme? -suspiré de nuevo y alcé la mirada. Las vi mirándose entre ellas, algunas incluso estaban agarrando sus camisas. Parecían realmente impacientes por mi respuesta.- Supongo que no.

Oí gritos que procedían de ellas, estaban dando pequeños saltitos. Eso era ¿alegría? Inmediatamente después de eso salieron disparadas hacia la puerta. Entonces vi una luz a mi izquierda, cuando me gire vi a Ryu con el móvil en las manos. Ese cabronazo me estaba sacando un foto.

-¿Se puede saber que haces? -vi que intentaba aguantarse la risa tapándose la boca con las manos. - No le encuentro la gracia.

-Tu cara. -alcé una ceja de nuevo ante ese comentario, lo cual hizo que finalmente explotara y se riera hasta que una pequeña lágrima cayera de uno de sus ojos.- Nunca borrare esta foto. -se seco las lágrimas con la mano mientras miraba su móvil.

-Maldito peliazul. -me levante rápidamente y extendí mi mano para intentar alcanzar su móvil. Ese mocoso tenía buenos reflejos, y consiguió apartarse a tiempo. Me miro sonriente y suspire, no podía enfadarme con ese mocoso. Levante mi mano un poco más hacia su cabeza y el la agacho encogiéndose de hombros. ¿Realmente creía que le iba a pegar? Se me escapo una pequeña risa y le revolví el pelo.

Ese mocoso se llamaba Ryuichi Hira. Aunque siempre lo había llamado Ryu. Era como mi hermano pequeño, habíamos estado juntos desde que éramos pequeños. Siempre había sido lo mas parecido a un hermano que había tenido.

No era demasiado alto, media aproximadamente 165 cm, no era precisamente el mas alto de clase. Aunque , para ser sinceros, él siempre había sido mas alto que yo, aunque yo fuera mayor que él. Hasta hace dos años cuando finalmente pegue el estirón, y, bueno, ahora le saco un cabeza de altura.

Al igual que yo tenía 16 años, aunque yo pronto cumpliría los 17. Nunca le había gustado ser como los demás, así que hace un año se tiño el pelo de azul; así sigue a día de hoy, y no creo que cambie. Ryu tiene los ojos marrones, y suele ponerse unas lentillas moradas, ya que el marrón es "demasiado común" según él.

Realmente nuestras personalidades eran completamente distintas. Ryu siempre intentaba destacar, ser mejor que los demás, digamos que quería llamar la atención. Hablaba con todo el mundo e intentaba caer bien a todos.

En cambio, por mi parte, prefería no hablar con nadie, no relacionarme con la gente. Podéis suponer que no tengo demasiados amigos.

Cierto, se me olvidaba, mi nombre es Kai Ohara. Si no fuera por el estúpido uniforme del instituto, me vestiría de negro todo el tiempo. Tengo el pelo negro y los ojos azul celeste. Intento no destacar demasiado, al contrario que Ryu; aunque es algo difícil teniéndole a él alrededor.

- ¿Me harías el favor de borrar esa foto? -Ryu negó con la cabeza mientras guardaba de nuevo su teléfono en su mochila. Le lancé una mirada de enfado al instante.

-Bueno, me lo pensare... -sonrió de nuevo, cogiéndome de la muñeca y tirando de mi para que me levantara.- de todas formas vámonos ya... -me miró haciendo pucheros al ver que no tenia fuerza suficiente para moverme.- ...tengo hambre.

Me reí viendo que cada vez aplicaba mas fuerza al intento de hacerme caminar. Finalmente me levante de golpe, lo cual causo que Ryu soltara mi muñeca y se empezara a caer hacia atrás. Antes de llegar a tocar el suelo conseguí coger su mano evitando que se cayera. Tire de él hacia mi, dejándolo a unos centímetros de mi cuerpo.

-Anda vámonos. -cogí mi mochila y me dirigí hacía la salida; pero no sin antes de comprobar que ese idiota me seguía.

Dejame Quererte (Yaoi/Gay) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora