Adiviné.

Me dirijo a mamá y le doy un sonoro beso en la mejilla, tardando más de lo normal, puede que haya dejado un resto de saliva en su cara.

Cuando la suelto me mira como si tuviera dos cabezas.

-Es domingo eeeh -me dice mientras yo me dirijo al fregadero y lleno un gran vaso de agua.

Asiento con la cabeza mientras bebo el agua a sorbos agigantados. Vuelvo a llenar el vaso.

-Este es el mejor día de la semana. - le digo y subo las escaleras, esta vez con cuidado de no derramar el agua.

Me dirijo hasta la habitación de Glenn, no tiene seguro. Parece que no me conociera.

-Debiste haberla cerrado -susurro y no puedo evitar sonreír por mi maldad.

Trato de no pensar en la cara que va a poner para no morir de risa e imagino cosas tristes para mantenerme concentrada.
Abro la puerta con cuidado y doy gracias de que no rechina cuando la abro. La mía es un mini despertador.

Me acerco a la cama y me aseguro que esté dormido.
Un brazo y una pierna sobresalen de la cama.
Su boca está abierta de par en par.

Dejo el vaso en la mesita al lado de su cama y voy hacia donde sobresale su pie, utilizando mis uñas le hago cosquillas muy lentamente.
Glenn gruñe y remueve el pie.

Me muerdo el labio para aguantar la risa. Me obligo a calmarme y una vez lista, con toda la concentración que eso conlleva, me dirijo hacia la mesita donde dejé el vaso, lo tomo y lo volteo encima de Glenn, haciendo que todo el líquido caiga directamente sobre él.

La expresión que hace es algo que jamás podré explicar pero es tan graciosa que empiezo a carcajear.

-¡Me hundo! -exclama.

-¡Mamá, papá! ¿¡Jill!?

Esto último lo ha dicho al darse cuenta de que estoy allí, escondo el vaso detrás de mi espalda.
La prueba de mi delito.

Las lágrimas amenazan con caer de tanta risa que me da.
Glenn vuelve a gritar mi nombre furioso pero ya es tarde. He mojado mis pantalones.
Corro lejos de él antes de que pueda intentar nada y entro al baño poniéndole seguro. Los golpes de Glenn no tardan de llegar a mi puerta.
Lo dejo hablando solo y voy a buscar una nueva muda de ropa que ponerme, no tengo más que ropa sucia en este baño.

Me desvistoz entro en la ducha y regulo la temperatura del agua.
Me meto bajo la lluvia artificial que cae quemándome un poco la piel, me encanta.
Me río al recordar el momento anterior, aunque bien podríamos estar a mano, no me salió tan perfecto como esperaba. Me he meado.

Salgo luego de varios minutos, me seco el cabello y me pongo una toalla tanto en la cabeza como en el cuerpo. Tengo que llegar sana y salva hasta mi habitación.

Abro la puerta y giro mi cabeza de lado a lado viendo si Glenn está esperándome con una venganza, afortunadamente no.

Salgo corriendo y entro a mi habitación cerrando la puerta tras de mí con seguro.

Me visto lo más rápido que puedo, porque con mi pequeño desliz he perdido mucho tiempo y abajo deben estar todos ya desayunando.

Al llegar a las escaleras bajo como acostumbro hacer. Deslizándome.
Entro en la cocina y efectivamente están todos allí.

Glenn levanta la cabeza hacia mi y su expresión cambia a furiosa, qué pena, estaba tan relajado jugando con Jack...
Se levanta de la silla en la que está y sé, mejor que nada, que debo correr.

Corro todo lo que puedo, pero como es de esperar de alguien que no hace ningún tipo de ejercicio, no es mucho, salgo al jardín y me resbalo con el estúpido césped que está húmedo por el estúpido sereno.

Me levanto como puedo, pero ya es tarde, siento que Glenn se tira sobre mí haciéndome caer sobre el césped otra vez, aplastandome en el proceso.
Me empieza a hacer lo peor que me pueden hacer. Y él lo sabe muy bien.

Cosquillas.

Me río como una demente, se que los vecinos deben estar saliendo de sus casas para ver lo que produce tanto ruido pero no puedo parar de reír.

Agradezco al cielo por haber hecho pis antes, porque sino, ahora estaría haciéndolo sin importar que Glenn esté sobre mí. Pequeño problema de incontinencia.

-¡Para! ¡Por favor! ¡Perdón, perdón! -grito aún sin dejar de reír y con la voz muy entrecortada.

-Di que soy el chico más guapo del mundo y te suelto.

-¡No! ¡Jamás! ¡Justin no te fallaré! -grito refiriéndome a mi ídolo del momento, Justin Bieber, Glenn hace más presión y me río aun más fuerte como si eso pudiera ser posible. Dios, ya comienza a ser doloroso.

-¡Me rindo, me rindo! ¡Glenn es el chico más guapo del mundo entero! -desesperada saco mi bandera blanca.

El me suelta y me da la mano para levantarme, la tomo y me levanto.

Trato de regularizar mi respiracion y ato mi cabello en una coleta, agito mi mano dándome aire en el rostro, estoy sudando.

El solo sonríe triunfador y me echa la lengua. Hago lo mismo y vamos hacia la puerta. Me alejo un poco de él y me cubro con las manos, he quedado paranoica con tantas cosquillas.
Mamá está con la cámara mientras nos graba, solo de pensar que me hubiera hecho pis...
Mi madre tiene una obsesión por grabar a todo momento.

Mamá guarda el vídeo y nos mira sin dejar de sonreír.
Tom está con Jack el cual ríe y aplaude como si estuviera viendo la televisión.
Le toco la nariz con mi dedo y este dirige su vista hacia allí viéndose demasiado tierno cruzando los ojos.

-Eres famosa ahora -exclama Glenn con cierto tono burlesco.

Lo miro sin comprender de qué está hablando.
Señala con el dedo detrás de mí, giro y hay como diez personas viéndonos.
Me giro avergonzada y apuesto a que ya mi rostro a tomado el color de un tomate.
Entro a la casa rápidamente y voy a la cocina por mi desayuno.

Me siento y todos lo hacen también.
Comemos y charlamos de todo un poco, nos ponemos al día el uno del otro.

Tengo que ir a cambiarme nuevamente de ropa, estoy toda verde del césped.

Me acerco a Glenn y le doy un sonoro beso en la mejilla dejándole un poco de yogurt.
Me quita fingiendo asco y pasa su mano por su mejilla para así "quitar el beso", típico de él.

Se que luego será él el que vendrá a darme un beso.

No he terminado de pensar en eso que ya ha pasado sus brazos por mis hombros dándome un beso en la mejilla, me río, porque lo conozco tanto. Me giro hacia él y muerdo su brazo para que lo quite.

Quita el brazo y se soba exageradamente.
Mamá y Tom niegan con la cabeza y se ríen.

Fin Flashback.

Sonrío entre lágrimas.
Lo tenía todo. Y ahora nada será igual.
Me limpio el rostro antes de que mamá o Tom puedan verme.
Pensar en que Glenn pudo morir...
Sacudo mi cabeza tratando de alejar esos pensamientos.

Me siento y espero a que las horas pasen, así lo hacen, tan lento, que siento que hace días estoy aquí.

Espero que les esté gustando^-^

Faith - (Daryl Dixon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora