~CAPÍTULO 53~ ¿Dónde está?

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Busqué en todas partes, y pregunté también, pero nadie me daba razón de que una joven embarazada haya abordado un vuelo. ¡Maldita sea! Kibum me había mentido. Salí de aeropuerto con el celular en las manos, marcando un ay otra vez el número de Kibum, pero él no contestaba.

Tal vez jamás debí de marcharme ayer en la noche. Tenía que haberme quedado. La angustia me invadía y un nudo se había formado en mi garganta, tenía muchas ganas de patear todo, tirarme de un puente, o que la tierra me tragase... necesitaba tanto tenerla a mi lado, necesitaba saber la identidad del padre del niño que llevaba en su vientre... ¿De verdad se había marchado? ¡No! Eso no... no importa lo que haga, tenía que encontrar y mi única respuesta a todo era Kibum. Él era el único que podía ayudarme.

Conduje directo hacia la casa de Kibum y llamé a la puerta una y otra vez, pero solo salió uno de los empleados, diciendo que había salido temprano llevándose a (TN) con él.

¡¿A dónde joder te has llevado a (TN)?!—golpeé mi puño en la pared, lastimadme los nudillos, pero ni siquiera me importaba, no sentía dolor o tal vez, el enfado era mucho más fuerte que no me fijaba en las heridas que me había ocasionado.

Al cabo del medio día una llamada ingresó a mi celular, era la llamada por la que había estado desesperado todo el dia... Kibum—

-¡Maldita sea! ¡¿Dónde te la has llevado?!—Pegunté apretando los dientes— ¡Eres un maldito imbécil! ¡Quiero a (TN) conmigo y ahora!—

-Ella está en el hospital—Respondió cortando mis palabras. Miles de pensamientos invadieron a mi mente.. ¿En el hospital?

-¿El bebé está bien? ¿Ella está bien? ¿Qué le pasó? ¿Por qué está allí?—

-Tubo una recaída—respondió—Falsa alarma del nacimiento de su bebé—Completó su explicación—Ella quiere verte Kyuhyun. Quiere hablar contigo—Me quedé en silencio por segundos, tratando de tranquilizarme—Estamos en el hospital central—explicó—

-Voy para allá—respondí y enseguida rodeé el auto para ingresar y emprender rumbo hacia el hospital... ¿Quería hablar conmigo? No sé porque esa frase me atemorizaba tanto, me atemorizaba saber que ella solo quería hacer que fuera para decirme que el bebé no era mío y que quería que me desaparezca de su vida... que ya no me amaba... o peor aún, que estaba enamorada de Kibum... y pensara que había sido yo quien le había pedido a (TN) que se quedara con Kibum, y también le había pedido a Kibum que cuidara de ella... mi erro más grande.

Al llegar al hospital bajé despacio para ingresar a él, había personas en la sala de esperas. Todo estaba en silencio demasiado a mi parecer. Hasta que el llanto de un bebé llegó hasta mi oídos, giré despacio y llevé la vista directo hacia el lugar de donde provenía el llanto... una mujer de una edad no más a veinticinco años con un bebé en manos, meciéndolo para tratar de hacerlo que dejase de llorar—

-No llores- susurraba despacio-- Mamá está aquí—Me quedé en silencio al ver aquella escena: una pequeña criatura en las manos de aquel ángel que la mantenía bajo su protección.

Me moví a pasos cortos hasta llegar a aquella mujer, quien al verme no se incomodó, y siguió meciendo al bebé—

-Es muy hermosa—Hablé muy despacio, observando el rostro del niño, con los ojos cerrando sus pequeñas manos entrelazadas— ¿Cuántos meses tiene?—

-Dos—sonrió amable—Tiene dos meses de nacida—

-¿Dónde está el padre?—Pregunté sin quitar los ojos de la criatura— La joven se quedó en silencio, tal vez no sabía qué responder, pero no era necesario que lo hiciera puesto que pude leer su expresión... era madre soltera... ¿Madre soltera? Esa es una palabra que hoy en día ya es muy frecuente, ¿Acaso tener un hijo no es motivo de motivación? No lo sé, tener un hijo a temprana edad me asustaba, pero... ahora me atemorizaba que el bebé de (TN) no fuera mío... quería ser el padre de ese niño... de verdad lo quería.

-¿Cuál es su nombre?—Pregunté—

-Briana—contestó la mujer con una sonrisa—

-Es un bonito nombre—hice un pausa— Es usted una hermosa madre, también—ella se sonrojó y asintió con ternura. ¿Cómo será el bebé de (TN)? Algo me decía que ese niño era mía, ella me lo había dicho en su silencio... estaba seguro, era mi hijo—Me marcho. Tenga muy buen día—sonreí mirando a la niña—y cuide mucho de su bebé—

Giré y continué caminando, lleno en pensamientos y preguntas sin responder. El milagro de la vida... ¿Tendría un bebé? Dos hijos... aunque, estaba casi seguro que el bebé de (TN) era mío, pero en relación a Tamara, estaba esperando que el nuño naciera para pedir un examen de ADN, ¿no sé ni siquiera por qué me iba casar con ella si sabía claramente que existía la posibilidad de que el niño no era mío? Tal vez solo fue la decepción de que (TN) se me había ido, estaba sumergido en la depresión que ni siquiera pensaba en lo que hacía o debía hacer, pero ahora lo sé... recuperar a (TN) y lograr que me dijera lo que mis oídos querían escuchar, que el niño era mío.

Una nueva llamada de Kibum entró a mi celular para informarme en dónde se encontraba, es el tercer piso, las habitaciones del fondo a la izquierda. Me apresuré y llegué al lugar indicado, encontrando a (TN) recostada en una cama y sonriéndose con Kibum. Al verlos no pude evitar tantos celos... ¿De ese modo me sonreía cuando estaba a mi lado?... sí, pero ahora parecía que solo quería a Kibum a su lado.

Me acerqué captando la atención de ambos, quienes cambiaron su expresión de inmediato.

-Kyuhyun—Habló Kibum con aire de enfado—Saldré por un momento—se puso de pie observando a (TN)- llámame si pasa cualquier cosa ¿Vale?—ella le asintió con una sonrisa, una sonrisa que extrañaba tanto en ella... de verdad era una mujer perfecta ante mis ojos.

Kibum abandonó la habitación dejándonos a (TN) y a mí solos, haciendo que me preguntara una y otra vez qué era eso que tenía que decirme, porque en realidad, yo tenía muchas cosas que charlar con ella.

-¿No vas a sentarte?—arqueó las cejas—

Caminé hasta ella y tomé asiento en la cama, justo a su lado. Llevé la mirada hasta su gran vientre cubierto por una manta, ella parecía incómoda así que empezó a inclinarse hacia delante para tomar asiento. Me acerqué de inmediato para ayudarla apenas. Era increíble cómo una mujer era capaz de soportar ese estado por tanto tiempo.

-(TN)—hablé volviéndome a sentar—Sé que debes estar...--

-Déjame hablar primero—me interrumpió, haciéndome callar y generar un miedo ante las palabras que se disponía a hablar— Kyuhyun. Tal vez no has entendido hasta ahora la razón por la que te llamado, puesto que ayer ni tenía intenciones ni verte... y siendo sincera—fijó la mirada hacia el frente—Sigo sin querer hacerlo. Pero... tal vez mi respuesta te haga cambiar de opinión de lo que hayas decidido y estés empecinado—

¿Estás hablando de que me dirás la identidad del padre de tu niño?—

-Si—asintió—Kyuhyun, el niño no es tuyo, el padre es Donghae y es por esa razón que preferí alejarme de ti— Habló con seriedad. Un dolor en mi pecho y una sensación de nido en el estómago me invadió el cuerpo ¿El padre era... Donghae?—

-Mientes—fruncí el rostro—El niño es mío, puesto jurarlo... estoy casi seguro de ello—

-No lo es—Respondió con timbre de voz enfadado-- ¿Por qué etas empecinado a ser el padre de mi hijo? ¿Acaso ya no tendrás un bebe con mi madre? Pues lárgate con ella y desaparece de mi vida—

-Quiero ser padre, pero padre de tu bebé—respondí casi con desesperación-- ¿Sabes cómo me he sentido estos meses? ¿Sabes la desesperación que sentí cuando me di con la sorpresa de que no estabas en la cama, conmigo cuando desperté? Te dije que me quedaría contigo y... lo decía enserio—Apreté la mandíbula sintiendo un nido en la garganta--¿Sabes qué?—

Me quedé en silencio por largos segundos, tragando saliva para poder articular las palabras—No me importa quién es el padre de tu bebé... no me importa. Déjame serlo aunque yo no sea el padre—Completé levantado la vista para observarla a los ojos—

-Déjame ser el padre de tu bebé—

-¿AH?- preguntó casi anonadada—

El padre seré yo—La voz de Kibum a mis espaldas—El padre del bebé de (TN) seré yo—repitió haciendo que me quedara enmudeced ante tal anuncio...

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Sexo con el amante de MamáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora