CAÍN © #1 EN LIBRERÍAS

Capítulo 38

Esta historia está publicada en papel por el equipo Penguin Random House grupo editorial. Puedes encontrarlo en diferentes países (explicados en un capítulo especial) y también vía Amazon. 

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Me separé bruscamente de él luego de unos segundos, lo miré fijamente y desvié la mirada.

– ¿Por qué hiciste eso? –Le pregunté casi alterada caminando por el living.

– Solo quería hacerlo –Tomó mi codo y me volteo hacia él.

– Pero no puedes llegar y hacerlo porque se te antoja, tú y yo no tenemos nada ahora. Estoy con Ian y eso es lo único que debe importarme, no tu ni tus estúpidos problemas e impulsos.

– Debería ser lo único que te debe importar –Rodó los ojos.

– Vete de aquí –Dije con impotencia. –No sé para que sigo escuchando todo lo que dices.

– Solo quería aclararte todo lo que paso ese dí­a en el hospital.

– No necesito que me aclares nada Caín.

– Lo lamento Cailín, no quise causarte problemas.

– Los causas, es lo único que haces en mi vida –Subí el tono de mi voz. –Causar problemas.

– No voy a decirle a nadie sobre esto, Ian no se enterara.

– No me importa, ya vete de aquí Caín.

– Me hablas como si fuera cualquier cosa, como si fuera un animal –Bufó. –Estoy enamorado de ti y no puedo sacarte de mí cabeza de un día a otro ¿Comprendes? Es solo eso.

– ¡¿Y crees que vale la pena?! –Me alteré. –No, porque no eres capaz de enfrentar el mundo junto a mí, así que solo estoy perdiendo mí tiempo contigo.

– Lamento no ser lo que quieres –Sus ojos celestes se mantuvieron en los míos con dolor. –Lo último de mi lista era dañarte.

– Ya basta –Mis ojos estaban a punto de rebalsarse en lágrimas.

– Quiero ser honesto contigo –Se acercó a mí y yo me moví unos centímetros atrás. –Voy a seguir protegiéndote estés donde estés Blanca nieves y no dudes en buscarme cuando necesites ayuda. Sabes mi número y sabes donde vivo, no quiero ser un desconocido en tu vida.

– Está bien.

– Lo siento –Besó mi frente con delicadeza y luego se acercó a la puerta, no miró hacia atrás, nunca lo hacía. Abrió la puerta y se marchó dejándome congelada.

¿Por qué viene aquí luego de haberme dejado? Hubiese preferido seguir odiando a Caín en vez de haberme enamorado de él, era más fácil cuando no me interesaba su estado de ánimo, si estaba enfermo o a punto de morir o cualquier cosa, lamentablemente aquí estoy enamorada de una persona que tal vez nunca voy a tener.

Entiendo todo lo que dice, la manera peculiar que tiene de protegerme desde lejos, pero a mi corazón le cuesta procesarlo... No le haces daño a la persona que amas, no a la persona que piensas que puede cambiar tu vida. Caín es una combinación extraña, entre un ángel malo y uno bueno. Tiene todos los defectos que puedas imaginar, pero eso es lo que exactamente hace que valores cada actitud buena que puede llegar a tener. Sé que no le teme a nada, que enfrenta su vida solo y que si debe hacer desaparecer a alguien de su camino lo hará sin dudarlo, pero también sé que puede sonreír con sinceridad, que puede abrazar a una persona sin hacerle daño y que a veces su mirada puede ser tan sincera como la de un niño.

Todo a mí alrededor parecía tan irreal, me sentía horriblemente confundida, como si todo diera vueltas mientras estoy de pie justo en el centro tratando de no caer.