No confíes en los Trancy

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Ciel puso la carta de nuevo dentro del sobre y la dejo sobre la bandeja que estaba al lado de su cama en aquella mesa escarlata, miro fijamente a su odiado mayordomo y se dispuso a dirigirle la palabra.

Ciel - La leíste ¿cierto?

Dijo suponiendo que esa era la razón de su notable enojo, este no hizo nada más que desviar la mirada hacia otro lado dando a entender que lo había hecho.

Ciel - Entonces lo sabes, que dentro de poco iniciarán los planes para mi boda con mi prometida, y que cuando esto suceda ella vivirá conmigo, en esta habitación, no tu.

Dijo con desprecio remarcando las palabra "En esta habitación" mientras lo miraba de manera desafiante.

Sebastian - Me temo que lo que usted dice es verdad - se acerca lentamente hacia el y recorre su dedo índice por el cuello de su amo hasta que quedaron mirándose fijamente el uno al otro - pero nada asegura que no valla a hacer algo en contra de eso.

Dijo este en un tono amenazante a lo que Ciel respondió desafiante.

Ciel - Si tu haces algo juro que yo-

Sebastian - Recuerde que ahora todo de usted me pertenece, y puedo acabar con su vida si es que así me apetece.

Ciel frunció el seño con enojo y se quedo sin argumentos a decir, ya que era así la situación, el no podía hacer nada en contra de su mayordomo, ya que todo de el ahora estaba bajo la disposición de este.

Sebastian; por otro lado, sonrió ante aquella reacción de su amado y acorto la distancia entre sus labios en un beso amargo por parte de Ciel, apasionado por parte de Sebastian.

Ciel se sonrojó un poco ante aquel beso debido a que sin querer abrazo a su mayordomo por el cuello y cayo dentro de la trampa.

Sebastian; ante la acción de su amo atrajo más su débil cuerpo a el.

Will - Como lo supuse, los demonios llegan a persuadir tanto a sus amos al punto de que llegan a caer en sus sucias garras, no es así Sebastian Michaelis.

Ciel se alteró al momento de escuchar la voz de aquel Shinigami.

Sebastian soltó el cuerpo de su amo y lo dejo caer en la cama.

Sebastian - Que se supone que haces tu aquí?

Will - Eso no es algo que te incumba a ti, si no a tu amo.

Dijo mientras apuntaba con su guadaña a Ciel quien se encontraba algo confuso por la presencia del Shinigami.

Sebastian - Todo lo que tenga que ver con mi amo, me incumbe y-

Ciel - La presencia de un Shinigami solamente se debe a una causa; muerte.

Dijo con la mirada sombría y tratando de asimilar las cosas.

Will - Tal como El Niño dice, hay varias muertes que tienen que ver con aquel niño, y todo lo que tiene que ver con ese niño tiene que ver contigo, asqueroso demonio, las muertes son de gente de la nobleza, no por esta zona, si no en la vivienda de Alois Trancy, me temo que gracias a esto, tendré que vigilar todas sus acciones, ya que si hay tantas muertes es por algo, y no quiero trabajar más horas extra debido a ustedes dos.

Dijo mientras acomodaba con su guadaña sus gafas como era de costumbre.

Retomemos un poco, la razón por la que Will no quería trabajar horas extra, era porque en estas muertes se encontraba involucrado un demonio, y este podía comerse las almas de aquellas personas.

Por otro lado; Ciel se encontraba algo atónito por el hecho de que justamente en ese día tenían una reunión pendiente con la cabeza de la familia Trancy, justamente un baile en su mansión.

Ante las Puertas del Infierno (SebastianxCiel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora