Kings of Anything

III

Narra Wirt:

Estaba estresado, en definitiva me estresa el hecho de estar en una nueva escuela lejos de James y de Namy, ambos eran mis mejores amigos en Nueva York con los cuales viví todas mis aventuras desde niño, y luego lo arruiné todo cuando decidí que quería tener algo con James, cuando me deje llevar por mis sentimientos y pensar con mi corazón y no con la cabeza; los extrañaba, aún cuando seguimos hablando por Skype y quizás no es mucho, pero era suficiente para nosotros. Obviamente la relación de James y mía quedó en el pasado en el momento que mis padres y los suyos optaron por separarnos.

Lo peor no fue eso.

Lo peor fue que él lo negó todo.

Obviamente no hablé más con él, por lo menos hasta ahora no he vuelto a hablar con él, he ignorado sus mensajes en todo tipo de red social, mensajería de texto e inclusive sus cartas, no quería estar junto a alguien que se mantuviese en un closet tan grande como lo era el suyo.

Sin embargo, me gustaba este lugar, tenía algo dentro de él que era como una chispa a un paso de explotar, por qué era tan misterioso y magnético que te hacía sentir en casa; cuando llegué al salón me senté al final de este, junto a la ventana, algo cliché pero me gustaba.

Vi a Dipper entrar a la clase y debo decir que me sorprendí, era trigonometría avanzada y Dipper solo tiene 16 años, pensé que sería el más adelantado de la clase pero veo que me equivoqué con eso lo que me lleva a pensar en cada vez que me he equivocado en esta vida con la apariencia de las personas, iniciando con James y ahora con Dipper.

Al final, le hice señas para que se sentase junto a mí, no quería compartir puesto con un completo extraño si puedo compartirlo con alguien que trata de ser mi amigo y además me agrada.

- Hola, Wirt - dijo Dipper dejándose caer en el asiento y suspirando profundamente - No sabía que veías trigonometría avanzada también

- Olvidé mencionarlo, pero quien me sorprende eres tú... Tal parece que eres todo un geniecito - dijo haciéndole reír

- Me gusta la matemática, es todo - dijo mientras que reía conmigo tranquilamente

Vimos al profesor entrar y detrás de nosotros se sentó una chica de cabello negro con lentes, se veía muy tímida y pequeña para estar aquí y cuando vio los números y las gráficas en el pizarrón no dudó en irse del salón a dios sabrá dónde.

La verdad es que Dipper me sorprendió más de lo que me gustaría admitir, por lo que llegue a ver en esta clase es muy rápido con los números y muy preciso, aun cuando traté de seguirle el paso no pude, simplemente no pude por el hecho de ser más rápido que yo.

- ¿Cómo lo haces? Eres muy bueno en esto - dije algo agobiado

- Mi tío Ford es un científico y un genio, por lo tanto aprendí de él todo lo que se, como no tengo muchos amigos simplemente estudio con él cuando tengo mucho tiempo libre, si no me pongo a escribir o a hacer cualquier cosa.

- Eso es interesante, me sorprendes - acote terminando de copiar lo que tenía el pizarrón sobre él

- Gracias, pero eso me hace ser un poco nerdo ante los demás - dijo riendo como si nada pasará ahí

- No pienso que seas eso, eres increíble si puedes entender estos gráficos sin dificultad y más aún si puedes resolverlos

Vi a Dipper sonreír para luego bajar el rostro y reír en voz baja, no detecté ningún sarcasmo en su risa así que lo tomé como una buena señal entre nosotros... Empezaba a gustarme más y más Gravity Falls, quizás Dipper sea ese amigo que tanto necesito, después de todo; además que él no se esconde en un armario como algunos otros en mi vida.

Al final del día he vuelto con Dipper y Mabel a casa luego de buscar a Greg en su escuela, el pueblo no es muy grande así que es fácil ir a casi todos lados sin perder mucho tiempo; la maestra de Greg me dijo que fue un buen niño, que comió todo y que se había comportado perfectamente, me alegré bastante al escuchar eso.

Vi a Greg quedarse dormido en el auto mientras que conducía Dipper a casa y Mabel iba en silencio sonriéndole al teléfono celular en sus manos, Dipper iba muy entretenido en el camino mientras que yo simplemente no sabía que hacer o qué decir ante esta nueva situación, jamás había tenido tan buenos amigos y menos junto con llegar a una nueva ciudad, aunque no quisiera admitirlo, esos dos Pines se estaban ganando mi aprecio más profundo.

Al llegar a casa cargué a Greg en mis brazos y entré a su cuarto para dejarle tranquilamente mientras que bostecé, el primer día fue agotador, así que simplemente me acosté junto a mi hermano menor y me dejé llevar en brazos de Morfeo a la tierra de los sueños.

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Narra Dipper:

Estaba tan alegre, tenía un buen amigo hombre, finalmente alguien con quien hablar y que además ve conmigo trigonometría avanzada, lo cual le da algo de inteligencia y me gusta bastante saberlo, además del hecho que desprecia a los homófobicos y a Tristán.

Y a eso debemos sumarle el hecho de que es un hombre, es decir, no me tomen a mal, pero estar todo el tiempo con Mabel y sus dos mejores amigas -y un porcentaje de gente que adora a Mabel por el hecho ser simplemente ella misma-, pero también deseaba tener un solo amigo hombre por una vez en mi vida. Y ahora estaba Wirt ahí tendiéndome su amistad y aceptándome tal y como soy.

Que Wirt sea mi amigo ahora no quiere decir que empezaré a dejar de lado de nuevo a Mabel como hace unos años, ya había aprendido la lección al casi perderle contra Bill por simplemente ocultarle cosas e irme con el tío Ford dejandole a ella vulnerable y sin conocimiento alguno de la situación en la que nos encontrábamos.

Vi a Mabel entrar enojada a la habitación maldiciendo como pocas veces lo hace, me extrañé al verla así, la vi dejarse caer en la cama boca abajo y gritar en la almohada para que no se escuchase casi.

- ¿Todo bien, Mabs? - dije algo confundido

- No vendrá tampoco este año, seguirá estudiando en casa de sus tíos - dijo ella sollozando lentamente mientras las lágrimas rodaban por su cara - Tampoco estará aquí este año

La miré con compasión y suspiré, estaba seguro de que esto conllevaría un tiempo, una semana o dos quizás, de Mabel llorando desconsoladamente por qué es el tercer año seguido sin el amor de su vida a su lado.

Mabel no siempre era tan alegre como todos suponían.

- T-tú sabes que estará bien, siempre encuentras una forma para que estén cerca - dije acercándome a mi hermana y acariciando su cabeza con ternura

- Es solo que... No lo sé, esperaba algo mas esta vez - suspiró ella secando sus lágrimas con la sábana de su cama

- Quizás quieras salir al centro comercial y comprarle un regalo, podemos enviárselo o podría simplemente dejarte mi auto para que simplemente tengas algo de tiempo a solas

Vi la cara de mi hermana iluminarse ante mi idea tan demente y su sonrisa floreció con todo su resplandor para mí, era tan lindo volver a verla sonreír.

- ¡¿Me dejarías!? - dijo ella emocionada - ¡Oh, Dippinsause! ¡Prometo hacer todo por ti de ahora en adelante!

Sonreí entre el abrazo de mi hermana tan efusivo como solo ella puede llegar a serlo, estaba orgulloso de Mabel y de su fortaleza, la cual suele sorprender a la mayoría de la gente que la subestima.

En definitiva mi hermana era mi héroe y mejor amiga.