Capítulo 24.

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Me quedé en silencio, solo se escuchaban los sollozos de los dos, maldita sea esta situación en la que estoy, maldita sea Deborah.

"Ni siquiera lo repitas!" Le ordené casi gritando mirándo a sus ojos llenos de lágrimas.

"Entoces?" Susurró agachando la cabeza.

"No lo sé, de verdad me dolió mucho lo que hiciste pero sería demasiado tonta si dejara ir a un chico como tú" Dije de corrido y sin pensar, el levantó su mirada.

"Y cómo soy yo?" Preguntó.

"Perfecto..." Susurré, no soporté más y me lancé a sus brazos.

Nuestros labios se unieron en un dulce beso, sentí como tomaba mi barbilla y me acercaba más a él. Simplemente puse mis brazos alrededor de su cuello, acariciando su suave cabello.

Mis labios poco a poco se volvieron salados al unirse todas las lágrimas que estabamos derramando.

"Lo siento" Susurró y puse mi dedo en su boca, callándolo.

"Ya no lo sientas, estas perdonado" Le dije y el sonrió abrazándome.

"No sabes cuanto dolió pensar que te perdería." Dijo y suspiré sonriéndo.

"Ya no pienses en eso" Le rogué mientras nos separabamos del abrazo.

Habíamos arreglado todo, tal vez exageré un poco pero de verdad dolió lo que hizo. Nos levantamos del patio y entrelazamos nuestras manos, caminando juntos hacia clase de química, en la cual, nos tocaba siempre juntos.

El resto de las clases pasaron normales, aunque en el receso Caitlin se enojó con Justin por haberme hecho llorar. Haciéndome reír con la cara de perrito mojado de Justin.

Ahora estaba caminando con Justin hacia casa, habíamos salido recién del colegio.

"Qué te parece si ahora pasamos por unos helados?" Preguntó poniéndose en frente mío y caminando sin mirar atrás.

"Claro que sí" Le dije contenta, tomándo su mano para desviarnos del camino a casa para dirigirnos a la heladería.

Cuando llegamos, caminamos hacia la caja para pedir los helados, Justin me dijo que buscara una mesa para sentarme mientras el iba por los helados.

Me dí cuenta que me había sentado en la misma mesa en la que habíamos tenido nuestra "Primera cita", aunque no era oficial, por lo que también recordé que Justin había estado celoso del chico que atendía, que anteriormente ya nos había atendido.

"En qué piensas?" Escuché a Justin, apareciéndo con los helados en la mano, el de vainilla con frutillas para mí y el de chocolate con más chocolate para Justin.

"En que nunca hemos tenido una cita oficial" Le dije mientras tomaba mi helado, se tensó.

"Y eso es malo?" Preguntó preocupado.

"Claro que no, Justin" Le respondí y suspiró. "Es solo que, sería lindo tener una cita contigo, además, nuestro aniversario de un mes ya pasó por alto, fue el 20 Junio, y estamos 6 de Julio." Le dije jugando con mi helado.

Justin se quedó en silencio un rato, mientras yo seguía jugando con mi helado.

"Yo lo arreglaré" Dijo.

"Justin no es obligación." Le dije levantando mi mirada para verlo.

"Claro que no ____, fui un descuidado, pero no te preocupes porque tendrás tu cita." Me dijo seguro de sí mismo con esa sonrisa tan bella.

"Como quieras" Dije sonriéndo y el comenzó a comer su helado, quedando tan concentrado en eso.

No pude evitar dejar de mirarlo, parecía un niño devorando su helado. Mientras el miraba su helado, me dispuse a observar sus ojos, como siempre tenían un brillo tan especial y ese color miel tan dulce, lo hacía ver tan inocente.

Without a famous Bieber. Justin Bieber. (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora