Una Adicción Peligrosa

Capítulo 9 - El Encuentro

Lygal caminó por la senda de piedra cargando parte de su disfraz mientras su hermano le ayudaba con la otra. Ya que él tenia auto le había llevado ese día a la escuela, tenían que ensayar antes de que el festival iniciara y asegurarse de colocar todos los detalles de la escenografía. Como sea, ese distaba mucho de ser el tema, el día anterior Drink le había avisado que iría con alguien a su obra, por lo que la curiosidad le dominaba justo en esos instantes.

-Entonces... ¿tienes mucho de conocerle?- preguntó intentando que su hermano le dijera más, Drink era un chico muy popular pero no tenía suerte en las relaciones, precisamente por sus virtudes más evidentes siempre había una chica interesada pero siempre era el mismo problema, ellas necesitaban más tiempo del que Drink podía darles y siempre terminaba decepcionado. Recientemente había comenzado a salir con todo aquel que se lo pidiera, quizá con la esperanza de encontrar a alguien adecuado pero... no parecía funcionar.

-En realidad apenas unos días, le invité a salir en un arranque del momento – había pensado que quizá un género diferente le iría mejor y el chico era atractivo, normalmente los chicos no le parecían atrayentes pero dada la excepción pensó que debería probar. Aunque sin duda lo que más le atrajo fue el evidente deseo del otro de no acapararlo, a menos que se equivocara su ahora pareja deseaba un acostón y seguir adelante, vaya... él comenzaba a entender los prejuicios de las mujeres, sin embargo eso, lejos de molestarle, le emocionaba un poco- No siento que quiera acapararme como en mis relaciones anteriores y eso me gusta- Lygal hizo una mueca.

-Bien, no creo que las locas controladoras con las que has salido sean la respuesta- incluso las chicas más lindas habían cambiado al salir con su hermano, comenzaba a pensar que el problema no eran ellas, sino él –Pero alguien que te ignore no creo que sea la respuesta- arrugó las cejas. Drink rió.

-Claro que no me ignora, en realidad creo que es... bastante consciente de mí- sonrió pícaro y Lygal le vio mal.

-No creo que el camino de la lujuria ciega sea tampoco lo que buscas- le regañó ligeramente y Drink se encogió de hombros.

-Creo que necesita algo de...mmm... entrenamiento y trabajo, pero puedo con ello- Lygal se rió.

-¿Qué es? ¿Tu pareja o tu nuevo proyecto?- era raro ver a su hermano tan entusiasmado al pensar en dedicar tiempo y compromiso a algo, normalmente no se entusiasmaba mucho con sus parejas. Sólo esperaba que su entusiasmo fuera de verdad, porque la chica le gustara y no por verla como un reto o un nuevo proyecto a concluir y dejar- Oye... después quisiera hablar contigo- aún no le decía a Drink lo del cambio de carrera y quería tratarlo con él antes que con sus padres. Sabía que Drink lo apoyaría e iba a necesitar ese apoyo.

-¿Ocurre algo?- Lygal le sonrió.

-Ocurre, pero no hay prisa, lo podemos platicar cuando no esté a punto de volverme un árbol -bromeó y Drink se relajó.

-Bien, hablaremos luego entonces- Lygal tenía la impresión de que su hermano había sabido que terminaría tomando aquella decisión desde hace mucho, cuando le había acompañado a principio de año había echado un ojo a sus materias y había sonreído mientras decía "¿todas tronco común? Buena elección", él mismo al parecer ya había sabido que terminaría tomando aquella decisión, sólo le había faltado valor para hacerla realidad en aquel entonces.

-¡Hey, bombón, ya llegaste!- Lygal reconoció la voz de su amiga y sonrió.

-¿Quién es ella?- preguntó tranquilamente Drink, con un tono similar al de un padre interesado en los amigos de su hijo.

-Es Lucía, una amiga, te había hablado de ella ¿no?- Drink la recordó y sonrió.

-Es bonita- dijo a modo de halago más que de apreciación. Gracias a Dios Lucía no había alcanzado a escucharlo, para cuando llegó a su lado pasaba la mirada de uno a otro con una expresión pícara, cómo preguntándose qué pasaba ahí. Lygal no entendió del todo su mirada sino hasta escuchar otra voz conocida.