Una Elección Inesperada ©

28. Audrey

Trato de abrir la puerta con todo el silencio del mundo pero al parecer, cuando más silencio intentas hacer, los objetos conspiran contra ti y ¡Más ruido hacen!

Chucheo hacia la puerta cuando la cierro y hace un gran ruido. Parpadeo varias veces al ver todo oscuro y pongo mis manos en la pared para rodear la mesa y subir las escaleras. Cuando me tambaleo causando que casi me caiga, suelto una risita y tapo lo boca ¡Cállate, Audrey, te descubrirán!

En eso, las luces de la sala y el comedor se encienden y parpadeo muchas veces para acostumbrarme al intenso color.

-Audrey-me volteo al escuchar mi nombre y mi corazón se detiene durante un segundo al ver que es mi madre. Entrecierro los ojos para concentrarme en ella-Ya es suficiente, otra vez llegas tarde-dice molesta-¡Y llegas borracha!-se acerca a mi tomando mi rostro olfateándome-¿Qué te ha pasado Audrey?-pregunta preocupada y con cierta decepción en la voz.

-He cambiado mamá ¿No es eso lo que querías?-le espeto. Todos esperaban esto de mi, que cambiara, pero al momento en que lo hago ¡Nadie está feliz! ¿Qué quieren que haga?

-No, cariño-dice ella-No quería que te convirtieras en esto-intenta alejar las lágrimas que se avecinan a sus ojos y suspira-Vamos a tu habitación-toma mi mano y me ayuda subir hasta mi habitación.

***

Entro a la escuela con un gran dolor de cabeza. Seguramente me veo peor de lo que me siento. Al levantarme, un intenso dolor atravesó mí cabeza pero las pastillas que estaban en mi mesa me ayudaron un poco. Me bañe y me coloqué unos pantalones y una camiseta negra. Ni siquiera me puse maquillaje y estoy segura que mis ojos se ven totalmente rojos.

Como todos los días, cuando entro a la escuela y camino por los pasillos, las personas me ven. Todos se han enterado de mi "ruptura" con Jude y que Killian, Chuck y yo no somos amigos. Ahora soy como la chica mala de la escuela.

Lo odio. No sé cómo alguna vez pude desear ser alguien interesante, ser el tema de conversación en toda la escuela pero ahora lo único que deseo es regresar a ser la vieja he invisible Audrey. Me convertí en una Willow 2.0 y es de lo que más me arrepiento.

Lo bueno es que finalmente el año está por terminar. Solo falta una semana más y ya no tendré que ver el rostro de todos ellos, a excepción de la graduación o la fiesta de graduación, si es que me decido a ir

Me acerco a mi casillero con lentitud cuando me doy cuenta que Killian y Chuck ya están en los suyos pero en cuanto llego, los ignoro.

-Audrey-me llama Killian y lo ignoro-Audrey-me llama de nuevo-Por favor, mírame-sigo viendo hacia mi casillero mientras saco los libros que necesito-Lo siento Audrey ¿Cuántas veces tengo que decirlo para que me perdones?-lo volteo a ver tan rápido que lo sobresalto y no se que ve en mis ojos, pero se aleja un poco de mi.

-¿Has terminado con Willow?-alzo ambas cejas al preguntarle y él suelta un suspiro.

-Audrey...

-Responde la pregunta-le espeto y hace una mueca.

-No-murmura sin verme a los ojos.

-Pues sigue disculpándote-le espeto cerrando mí casillero con fuerza.

-Audrey, no entiendo por que la odias, por que no confías en ella-dice desesperado y lo veo indignada ¡Realmente es un gran idiota!

-No confió en ella por que es una ladrona que solo quiere tu dinero ¿Por qué no puedes verlo? Si ¡La odio! Y no puedo creer que le hayas creído a ella en lugar de a mi-le grito sin ocultar mis lágrimas ya que quiero hacerlo sufrir. Quiero que vea cuánto me ha hecho sufrir todos estos años.

-Audrey-vuelve a decir, esta ves con vos rota y me giro para no tener que escucharlo decir mi nombre nuevamente. Mientras voy caminando hacia mi clase, me encuentro con Jude, quién me observa triste y desvío la mirada antes de que pueda volver a llorar de nuevo.

***

Cuando salgo de mi casa, preparada para ir a otra fiesta a la que me invitaron, me encuentro con Killian apoyado en el auto de mamá.

-¿Qué haces aquí?-me maldigo a mí misma por sentir a mi corazón latir con rapidez contra mi pecho al verlo aquí.

-Esperándote-me responde encogiéndose de hombros.

-¿Para qué?-pregunto cruzándome de brazos

-No dejaré que vayas a alguna fiesta-dice cruzándose de brazos y hago una mueca.

-No puedes obligarme, no eres mi padre-le espeto tratando de apartarlo de la puerta, pero al no poder hacerlo, suelto un grito frustrado ¿Por qué no solo me deja en paz de una vez? ¿Por qué me tiene que hacer sufrir más?

-Soy tu amigo y...

-Dejaste muy claro que ya no somos amigos-lo interrumpo viéndolo mal y el se estremece.

-¡No lo decía en serio!-me grita cerrando los ojos como si le doliera-No puedo vivir sin ti Audrey. Mi vida es horrible sin ti. He tratado de decirte que lo siento-me quedo en silencio mientras habla y veo sus ojos cristalizados-Me preocupo tanto por ti que me asusta, Audrey y no dejaré que vayas a esa fiesta, no dejaré que sigas bebiendo o fumando y arruinado tú vida de está manera-trato de rodear el auto pero él agarra mi brazo.

-¡Suéltame!-le grito sin verlo a los ojos.

-No-me dice entre dientes y me acerca a él, tanto que puedo sentir el calor que emana su piel.

-¡Suel-ta-me!-le grito entre dientes tratando de liberarme de su agarre.

-¿Por qué no puedes entender que eres importante para mi? ¿Por qué no me dejas entrar a tú vida de nuevo?-me grita tomando mis hombros como si quisiera sacudirme.

-¡Por qué no soy lo suficientemente importante!¡No de la forma en que tú lo eres para mí!-le respondo, quebrándome lentamente-Si dejo que entres a mi vida nuevamente, ya no podré soportar el dolor que me causa estar cerca de ti sin poder ser nada más que solo amigos.

-¿Qué?-pregunta negando con la cabeza-¿A qué te...?

-¿Qué es lo que se te hace difícil de entender? ¡Todos lo saben y tú eres demasiado despistado o estúpido para verlo! ¡Te amo, Killian! ¡Te amo tanto que duele!-cuando termino de gritar, ambos nos quedamos en silencio. No puedo creer que al fin se lo he confesado, después de tanto tiempo, pero simplemente ya no podía mantenerlo por más tiempo.

-Audrey yo...-comienza a hablar él pero al ver su expresión, se que sigue sorprendido.

-Ya no interesa, se que estas con Willow, así que, da igual lo que sienta-me encojo de hombros apartándolo de la puerta y entro al auto solo para encenderlo he irme lo más lejos posible de él.