He Fell First! - KookTae

~5~

—Claro que aún lo recuerdo, Hobi.

Habló y dirigió su mirada a un pelinegro que estaba en el fondo, distraído con el balón.

—Él es Jungkook —Jimin hablo después de seguir la mirada del nuevo. — ¡Jungkook! ¡Ven!

El mencionado volteo tras su llamada y camino hacia ellos.

Jungkook se acercó con pasos firmes, pero al ver a Taehyung, su postura se tensó ligeramente, dejando ver un lado más, como decirlo; Nervioso. Se cruzó de brazos y se inclinó un poco hacia adelante, como si midiera al nuevo sin que este lo notara del todo.

—Uhm, hola, Tae —dijo con una sonrisa rara, tratando de sonar relajado—. Espero que no hayas tenido problemas para encontrar la capilla, llegas tarde siete minutos, otra vez.

Taehyung parpadeó, confundido. ¿Tarde otra vez? ¿Era una broma o un reproche? Jungkook soltó una risa nasal, rascándose la nuca con un gesto que lo hacía ver nervioso, aunque su mirada intensa no desaparecía.

—Tranquilo, solo bromeo —continuó, sonriendo con dientes esta vez—. Pero ya sabes, como capitán, tengo que asegurarme de que todos lleguen a tiempo. Y sí, incluso los nuevos tienen que ganarse mi aprobación.

Taehyung no sabía si sentirse intimidado o divertido, y Jungkook pareció disfrutar un poco de esa confusión. Luego hizo un movimiento rápido con sus piernas y la pelota, mostrando su habilidad inconscientemente mientras decía con tono despreocupado:
—Pero no te preocupes, no muerdo, al menos fuera de la cancha. Aunque, dentro del juego, bueno, ya sabes cómo me pongo.

Los demás intercambiaron miradas de sorpresa, preguntándose si Jungkook siempre se había comportado de esa manera ya que mezclaba bromas, nervios y liderazgo de manera diferente. Taehyung, por su parte, se encontró sonriendo tímidamente a pesar de la rara situación, intrigado por la personalidad complicada y un poco fastidiosa del capitán.

Mientras los demás bromeaban, Tae intentaba seguirles el ritmo, pero las bromas internas lo dejaban fuera.

Hoseok imitaba al entrenador Choi con una voz grave y exagerada, Jimin no podía parar de reír, y Yoongi apenas sonreía, aunque se notaba que lo disfrutaba.
Tae soltó una risa forzada, esperando que nadie notara lo perdido que se sentía.
—No te preocupes, —le dijo Namjoon al verlo callado—, después de unas semanas vas a acostumbrarte a las idioteces de estos tipos.
—Espero que sí —respondió Tae, con un tono burlón, pero internamente sincero.

Jungkook, desde la distancia, los observaba sin decir nada. Había algo en cómo miraba a Tae, como si quisiera hablarle, pero al mismo tiempo se contuviera.

— ¡Que increíble! ¡Todos mis muchachos reunidos! —Se escucho el eco de una voz la cual pertenecía del Entrenador Choi.

Todos al verlo hicieron se enderezaron correctamente e hicieron una reverencia, Tae repitió la acción al ser el único que no sabía qué hacer.

—¡Taehyung! Estas aquí, yo planeaba presentarte a todos, pero los veo riendo en vez de estar entrenando así que ya no será necesario.

Dicho esto, silbo su silbato y se acercó a los cinco chicos.
—¡Acaso son nuevos ustedes!, ¿Que hacen platicando tan relajados? —Los observó  y miro al Capitán quien se atrevió a hablar.

—Señor Choi, nos estábamos presentando para conocernos un poco mejor. —Dijo Jungkook inmediatamente tratando de salvar la situación.

—Eso no es excusa, ¿Que acabo de decir?

Silencio, silencio, incomodo (muy).

—¡Rápido, diez vueltas a la cancha! —Continuo —Menos tu Tae, esta vez te salvaste por recién horneado, estos ya tienen tiempo y actúan como novatos.