POV: Bakugou Katsuki
Abrí los ojos. La luz que se colaba por la ventana me pegó directo en la cara. Me dolía la cabeza, como si hubiera bebido toda la noche... pero no era eso. Era peor. Era el tipo de dolor que te carcome desde adentro.
Parpadeé, confundido. Estaba en mi cama.
¿Cómo...? ¿Cuándo había vuelto aquí?
Me incorporé lentamente, sintiendo el cuerpo pesado, como si cada músculo cargara con el peso de lo que hice anoche.
El eco de esa mirada... la de Kirishima.
Y entonces lo entendí. Él me trajo. Aunque estuviera destrozado. Aunque le hubiera hecho lo peor. Me cargó hasta mi habitación. Me acostó. Como si, a pesar de todo, aún le importara.
Me pasé las manos por la cara con fuerza, gruñendo por lo bajo.
—Maldita sea...
Me levanté sin siquiera ponerme bien los pantalones del pijama, con el corazón encogido por una mínima esperanza. Tal vez... tal vez había regresado. Tal vez todo fue una pesadilla.
Salí del cuarto. El pasillo estaba en silencio. No se escuchaba nada. Ni el sonido de una ducha, ni pasos, ni risas. Nada.
Fui directo al cuarto de invitados.
La puerta estaba entreabierta.
Empujé lentamente... y ahí lo confirmé.
Vacío.
Las cosas de Tetsutetsu ya no estaban. La cama hecha. Ningún rastro de su presencia. Se había ido. Y con él, Kirishima también.
Estaba solo.
Completamente solo.
Mi pecho se contrajo. No por la soledad... sino por el maldito arrepentimiento. Apreté los dientes y me giré bruscamente hacia la cocina. Si no pensaba en eso, si hacía cualquier otra cosa... tal vez no me derrumbaría.
Abrí una alacena, saqué lo primero que encontré. Pan duro. Ni siquiera me importó. Puse agua a calentar sin medirla. Tiré café instantáneo en una taza y me quedé mirando cómo el agua hervía.
—¿Qué mierda hiciste, Bakugou...? —me dije a mí mismo en voz baja, con los nudillos blancos por cómo apretaba la encimera.
El sonido del agua burbujeando parecía gritarme lo que no quería escuchar.
Había arruinado todo.
Golpeé la encimera con el puño, frustrado.
—¡Joder!
Y me quedé ahí, de pie, con el cuerpo rígido y el estómago revuelto, sabiendo que el tipo que más me importaba en este mundo... se había ido. No porque no me quisiera.
Sino porque yo lo había hecho pedazos.
El pan quedó sobre el plato, sin probar. El café se enfrió en la taza. Yo seguía ahí, en silencio, sintiendo cómo el tiempo pasaba y me arrastraba con él, como si cada segundo que Kirishima no estaba me hiciera más... insufrible. Más idiota.
No tenía fuerzas para nada. Ni para entrenar, ni para gritar, ni para destrozar algo. Solo para quedarme ahí, en el departamento vacío, con el eco de lo que rompí rebotando en las paredes.
Miré hacia la estantería. Algunos libros todavía seguían ahí, con esas notitas amarillas pegadas en los márgenes. Los había traído Deku hace semanas, cuando aún no recordaba bien nada. "Son cosas que te gustaban antes. Pensé que tal vez..."
No había querido ni tocarlos.
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Recuerdos de lo que fuimos (Kiribaku)
Romance🧠💔 ¿Qué pasa cuando olvidas al amor de tu vida... pero él sigue ahí, fingiendo que nada ocurrió? Tras una misión fallida, Bakugou Katsuki despierta sin recuerdos de los últimos años... incluyendo su relación con Kirishima Eijirou. Los médicos advi...
