Eres para mí ♡ [Completa]

Capítulo 47

Cada segundo que pasaba sin ver salir a Nolan del edificio era una puñalada directa al pecho. Sentía que me arrancaban el alma poco a poco.

Mis lágrimas no paraban de caer.
El oxígeno ya no era suficiente.
Nada lo era.

-Por favor... por favor, vuelve... -susurré apenas, sintiendo la mascarilla deslizarse de mis manos. No tenía fuerzas para sostenerla, menos aún para volver a ponérmela.

Mi cuerpo era una mezcla de ceniza, temblores y heridas invisibles.
Pero el peor dolor estaba en mi pecho.
Ahí donde vivía el miedo. Donde vivía él.

Entonces... algo cambió.

A través del humo espeso, entre las sombras y las llamas... aparecieron siluetas. Borrosas al principio. Inestables. Tropezando entre los escombros.

Mis ojos, nublados por el llanto, se abrieron de golpe. El alma, que ya creía perdida, se aferró a la esperanza como si fuera oxígeno.

Era Nolan.
Y Ryan.

Se sujetaban mutuamente, como si uno no pudiera caminar sin el otro. Las ropas rasgadas, ennegrecidas por el humo. Las caras cubiertas de ceniza. Las manos temblorosas.
Detrás de ellos, varios bomberos salían también, y uno de ellos cargaba a alguien en brazos.

¿Grace? ¿Nora?
No lo sabía.
No podía saberlo.

Solo me importaba una cosa: Nolan estaba vivo.

Me bajé de la camilla tambaleándome, ignorando el dolor en mis piernas, ignorando las voces que me decían que me detuviera, que volviera a recostarme.

Mis pies casi no me respondían, pero yo seguía.
Como si una fuerza invisible me empujara.

Tropecé un par de veces, pero seguí. Hasta que lo vi más claro.

Corrí hacia él. No lo pensé. No respiré. Solo... lo abracé.
Fuerte.
Con todo lo que me quedaba.

Solo necesitaba sentirlo.
Saber que no era una alucinación.
Saber que todavía lo tenía.

Me derrumbé en su pecho.
Lloré. Lloré como nunca en mi vida.
Como si todas las lágrimas del mundo solo existieran para ese momento.

-Nolan... -sollozaba, aferrándome a él-. Nolan...

-Tranquila, amor... tranquila... ya estoy aquí -me susurró al oído, con la voz temblorosa y los brazos rodeándome con desesperación.

Me aferré a él como si me fuera la vida en ello.
Porque así se sentía.

Los paramédicos se movían con urgencia, gritando instrucciones y organizando a todos como si ya supieran qué hacer en medio del caos. Nos llevaron hasta una ambulancia. Nolan subió primero, ayudado por uno de ellos, mientras yo me sostenía como podía para seguirlo. Ryan también fue subido rápidamente, con una mascarilla de oxígeno cubriéndole la cara.

Subieron a Nora a otra ambulancia.
Estaba inconsciente, su rostro con algunas quemaduras, manchado de sangre y polvo.
Sus labios entreabiertos parecían no poder tomar suficiente aire, y uno de los paramédicos murmuraba algo sobre shock traumático y daños internos mientras conectaban un suero y preparaban oxígeno.
Tenía el cuerpo cubierto por una manta térmica, pero aún así tiritaba.
Estaba mal... muy mal. Se la llevaron de urgencia.

Escuché la voz grave y serena de uno de los bomberos, hablándole al director.

-Hicimos todo lo posible... pero por la intensidad de la explosión, no logramos sacar a una de las estudiantes. Las probabilidades de supervivencia... son prácticamente nulas.