Despierta en las Sombras
El aire era espeso. Olía a humedad, sangre antigua y piedra.
Bella (Teresa) abrió los ojos con lentitud, una punzada en la sien le nublaba el pensamiento. Intentó moverse, pero un dolor sordo recorrió su cuerpo. Estaba entumecida.
Sus muñecas y tobillos estaban amarrados con gruesas sogas, impregnadas de algo que ardía contra su piel como si fueran hechas con veneno. No podía moverse... no del todo.Una tenue luz rojiza se filtraba desde una grieta en el techo de piedra. Estaba en algún tipo de catacumba. Vieja, silenciosa, olvidada por el mundo.
Comenzó a recuperar lentamente la memoria. Lo último que recordaba era estar en casa... esperándolos. Caius y Carlisle...
Y después, la oscuridad.Unos pasos arrastrados la sacaron de su pensamiento. Se obligó a mirar hacia un rincón en penumbra, donde dos figuras hablaban en susurros. Una de ellas, una mujer alta de cabello oscuro y ojos carmesí, la observaba con una sonrisa que helaba la sangre.
—Aún no despierta del todo... —murmuró la vampira—. Pero pronto lo hará. Y entonces decidiré si matarla o enviarla de vuelta al mundo del que vino.
Bella parpadeó. ¿Qué?
¿"Enviar de vuelta"?
Su corazón comenzó a latir más rápido.—No entiendo por qué tanto interés por una humana cualquiera —escupió la otra figura, escondida en la oscuridad—. Aunque... ya no es tan humana, ¿no?
—No —respondió la vampira, acercándose lentamente a Bella con una sonrisa burlona—. Esta pequeña criatura... está manchada por el amor de dos vampiros ancestrales. Eso ya la hace peligrosa.
Bella la fulminó con la mirada, y cuando la vampira se agachó para mirarla a los ojos, Teresa emergió, furiosa, valiente.
—Tienen miedo —escupió Bella, su voz ronca pero firme—. Eso es lo que pasa. Saben que Carlisle y Caius no van a parar hasta encontrarme. Y cuando lo hagan... te van a destruir.
La vampira soltó una carcajada siniestra.
—¿Carlisle? ¿Caius? Oh, cariño... Ellos ni siquiera saben dónde estás. Para cuando lo descubran, tal vez ya estés hecha cenizas... o peor, ya ni siquiera estés en este mundo.Bella sintió una punzada de miedo.
¿Qué significaba eso de "enviarla de vuelta"?
¿Estaban hablando de devolverla al mundo de donde vino Teresa?
¿La magia que la trajo aquí podía ser revertida?Pero no bajó la cabeza. Al contrario.
Sus ojos brillaron con furia, con esa esencia altiva, orgullosa, digna de una mujer que había luchado contra todos por tener una segunda oportunidad de vida.—Ellos me van a encontrar —gruñó—. Y cuando lo hagan, tú vas a suplicar que no te partan en mil pedazos. Porque no solo son poderosos. Me aman. Y no hay poder más peligroso que el amor de un vampiro milenario dispuesto a todo por su compañera.
La vampira retrocedió un poco, claramente sorprendida por la fuerza con la que hablaba.
Bella respiró agitada, sus ojos ardían.Teresa había despertado por completo.
Y no pensaba irse sin pelear.------------
Nunca la Encontrarán
—Hablas demasiado —murmuró la vampira de ojos carmesí con una sonrisa torcida—. Y tienes más coraje del que pensé... eso será entretenido. Pero al final, solo es ruido. Palabras vacías.
Bella (Teresa) forcejeó con las ataduras, con la rabia latiendo en su pecho como fuego líquido. El miedo seguía presente, oculto bajo la superficie, pero no iba a permitir que se notara. Teresa Chávez no se quebraba ante nadie.

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Renacer en otra piel [CREPÚSCULO]
Fantasy-En proceso de reescritura- Cuando Teresa Chávez muere a manos de Fernando, su historia debería haber terminado. Pero en ese mismo instante, en un lugar muy lejano, Bella Swan también fallece, consumida por la depresión tras el abandono de Edward Cu...