Prólogo

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Disclaimer: The Gray Garden no es de mi propiedad, le pertenecen a Ogekom y Deep Sea Prisioner.

Advertencias: Posible OoC, historia completa de mi autoría, cualquier parecido con otra es coincidencia.

Notas iniciales de capítulo: Hola a todos, antes que nada, este es un pequeño proyecto que tomaré como Hobby... en otras palabras no sé cuando lo actualizaré ^^U Esto será por diversión así que no me puedo comprometer oficialmente con este fic. Aún así, ¡espero les guste!

Y muchas gracias a todos por leerme me alegra que a les guste mis historias.

♦️♦️♦️

Había una vez... una niña y un niño.

Los dos pequeños no se conocían, no sabían el nombre del otro ni su edad, esos niños no sabían nada de su compañero. Ambos estaban juntos en ese parque, en los columpios sin decir una palabra, ambos conscientes de la presencia del otro, uno esperaba a que el otro hiciera algo, pero ninguno se atrevía a siquiera mover un pie o decir un "hola".

El niño vestido de negro era tímido, la niña vestida en blanco esperaba a que él dijera algo y él a su vez esperaba que la pequeña empezara la conversación. Así era muy complicado que ambos se comunicaran.

No dijeron nada, siguieron aguardando por minutos y minutos hasta que el sol se ocultó y ninguno había dicho palabra alguna.

El niño de negro era callado y aquella de blanco hablaba demasiado, pero a la niña le apetecía que el niño empezara con la charla y él esperaba que ella empezara diciendo algo.

Así era difícil comunicarse.

Al final, ni se miraron, sólo se levantaron de los columpios y se quedaron callados mientras cada uno tomaba su rumbo, ninguno de los dos había podido decir palabra alguna, así una conversación no podía fluir y terminaron rindiéndose y marchándose sin hablar y sin conocerse...

...

...

...

... Pero, ¿y si el niño hubiera hablado? ¿O si la niña se hubiera presentado? ¿Si se hubiesen visto a los ojos podrían haberse ahorrado las palabras que no se dijeron?

Si el niño hubiera hablado la niña se habría ido con una sonrisa a su casa.

Si la niña no hubiese esperado a que el niño hablara posiblemente habría tenido un nuevo amigo.

Si se hubieran visto a los ojos las palabras habrían sobrado.

Pero no lo hicieron. El niño no hizo sonreír a la niña, la niña no tuvo un nuevo amigo y sus ojos estuvieron distantes todo el tiempo.

Así... era muy difícil conocerse.

Blanc-Black: The first yearsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora