Dos mundos, un latido

capitulo 17:en los lugares ocultos

Kageyama no decía nada. Solo caminaba tras Hinata, los pasos resonando en el pasillo silencioso del restaurante privado. El pelirrojo ni siquiera miraba atrás, pero sabía.
Sabía que sus caderas ondulaban justo para provocarlo.
Sabía que cada paso era una sentencia.

El baño estaba vacío. Elegante. Todo en mármol negro y luces cálidas.
Apenas entraron, Hinata se giró y empujó la puerta para cerrarla.
Click. Cerradura echada.

—¿Qué estás haciendo? —preguntó Kageyama, la voz baja, pero ya con el filo de un deseo contenido.

Hinata se acercó.
Cuerpo contra cuerpo.
Su aliento rozando el cuello del alfa.

—Jugando.

Kageyama lo tomó de la cintura y lo empujó contra la pared con fuerza.
No brusco. No cruel.
Apasionado. Animal.

—¿Crees que esto es un juego, Shoyo?

El pelirrojo sonrió, con los ojos brillando.

—Todo contigo es un juego peligroso.

Kageyama bajó la cabeza y atrapó sus labios, hambriento.
Las manos del omega se enredaron en su cabello, mientras el alfa lo apretaba más contra su cuerpo.
Hinata soltó un pequeño gemido entre besos, dejando que la lengua de Kageyama explorara su boca como si tuviera derecho a todo.

—Me vuelves loco —susurró Kageyama, bajando las manos a las piernas desnudas de Hinata, acariciando la piel suave.

—Entonces… piérdete conmigo.

—Hinat—kageyama fue interrumpido por la mano de Hinata que estaba jugando con el cierre de su pantalón.

—aver  mi rey deja que te haga sentir un verdadero rey—dicho esto Hinata se agachó y bajo el pantalón y boxer de kageyama.

—uff mira que linda se ve parece una Fresita Es tan largó y grande—dicho esto Hinata empezo hacerle una mamada a kageyama.

—mhg..Hi..Hinata es-espera—trataba de hablar kageyama pero Hinata estaba empezando a hacer movimientos más rápidos.

Kageyama no quiso quedarse atrás y lo agarro del pelo dando un vaivén en su boca haciendo Que Hinata Botaras lágrimas de. Deseo.

—mierdad..mgh—kageyama acababa de venirse en la boca de Hinata.

—¿estas bien Hinata?—pregunto kageyama.

—si..eso fue muy salvaje mi rey.. no espero llegar ala casa—dijo Hinata mientras se enjuaguaba la boca y mira a kageyama a través del espejo y movía su trasero.

Al kageyama notar eso se posicióno detrás de esto y subió su vestido jugando con el redondo trasero de Hinata.

—jugaremos al rey y el súbdito—dijo kageyama mientras se sacaba su gran longitud de nuevo y se colocaba un condón.

—kageyama esper—Hinata fue interrumpido por un Gemido kageyama había entrando en este de una sola estocada.

Lo miro por el espejo y dijo—silencion los súbditos no hablan—haci empezo  un vaivén entrando y saliendo de este mientras Hinata se mordia la mano para que no se escucharan sus Gemidos.

—ten cuidado mandarina— y dicho esto kageyama pegó la espalda de Hinata hacia su pecho y puso su mano en la boca de este haci empezado unos movimientos más rápidos y presisos.

—kag..kawje... kageyama me voy a venir — logro decir Hinata tras unos gemidos.

Kageyama solo le dio un beso en su mejilla y lo areecostó en la cerámica del baño y puso una mano en su espalda, haciendo que Hinata empezara a gemir más fuerte.