Capítulo 21

3.9K 316 90
                                        

Sus palabras seguían resonando en mi pecho como un eco imposible de callar.

"Yo te pertenezco, Olivia..."

Sentí que el aire me faltaba. Mi corazón latía tan fuerte que podía escucharlo.

Nolan seguía ahí, frente a mí, tan cerca que su aliento acariciaba mi boca.

Y sus ojos...

Esos malditos ojos grises que parecían tener el poder de doblarme las piernas y de dejarme sin palabras.

-Yo también estoy enamorada de ti.- Mi voz salió suave, temblorosa, pero cargada de verdad.

Sus cejas se alzaron, sorprendido, y luego... sonrió.

—Dilo otra vez —susurró, con una urgencia suave, como si necesitara asegurarse de que no lo había imaginado.

Tragué saliva, mordiéndome el labio antes de repetirlo.

-Estoy enamorada de ti, Nolan.

Sus ojos se cerraron por un instante, como si esas palabras lo atravesaran por dentro.

—Dios... —murmuró, acercándose más, con los labios rozando los míos—. No sabes cuánto deseaba escuchar eso de tu boca…

Acortó la pequeña distancia que nos separaba, como si no pudiera esperar un segundo más. Hizo lo que tanto deseaba.

Me besó.

Su boca se encontró con la mía con una urgencia que me hizo temblar. Nuestros labios se chocaron con tanta intensidad que solté un pequeño jadeo contra su boca. Era como si mi cuerpo entero hubiese estado esperando este momento desde hace años. Y ahora, por fin, se desquitaba con todo el fuego que había guardado.

Besarlo era...

Increíble.

Perfecto.

Había fantaseado con este momento más veces de las que podía admitir, pero nada, absolutamente nada, se acercaba a esto. Su boca sabía a menta con algo dulce, como si el universo hubiera decidido que el sabor de Nolan tenía que ser adictivo.

Mis dedos volaron por instinto hacia su nuca, hundiéndose entre su cabello, atrayéndolo más a mí. Quería sentirlo más cerca, más profundo. Quería grabar ese momento en mi piel.

Nos separamos solo porque el aire comenzó a faltarnos. Aun así, nuestros rostros seguían cerca, nuestras respiraciones se mezclaban, y mis labios ardían como si su boca los hubiese encendido por dentro.

Lo miré, con el corazón latiendo tan fuerte que podía sentirlo en las sienes.

-Entonces... tú y Grace... ¿nunca...?

-Yo y Grace nada -me interrumpió con firmeza-. Jamás ha pasado nada con ella.

-Pero... el mensaje que vi. Ella decía que la próxima vez lo hacían en su casa... Y ese día, después del instituto, te fuiste con ella...

Nolan sonrió. No con burla, sino con ternura.

-Ahhh... ese mensaje. -Rodó los ojos y suspiró como si le fastidiara tener que hablar de eso-. Se refería a un maldito trabajo de literatura que nos habían dejado. Pero nunca fui a su casa, Olivia. Sabía con qué intenciones quería que yo fuera, por eso me aseguré de quedar en una cafetería. Terminamos el trabajo y me largué.

Trabajo de literatura...

Eso era lo pendiente. No... no lo que mi mente había imaginado todo este tiempo.

-Pero... -dije, aún con una espina clavada en el pecho-. Yo la vi salir de tu habitación esa noche, cuando estábamos en el hotel.

Nolan frunció el ceño, confundido. Me miró fijo.

Eres para mí ♡ [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora