Renacer en otra piel [CREPÚSCULO]

Capitulo 14

Teresa y Jacob pasaron un buen rato cocinando juntos. Entre risas y juegos, terminaron cubiertos de harina y condimentos. La cocina era un desastre, pero la risa de Teresa llenaba el ambiente, algo que a Jacob le gustaba ver. Después de terminar de comer, se miraron con resignación antes de empezar a limpiar el caos que habían dejado atrás.

—Creo que hicimos más desastre del necesario —dijo Teresa, tratando de limpiar la harina de su cabello.

—Pero valió la pena —respondió Jacob con una sonrisa—. No había visto a alguien divertirse tanto en una cocina.

Teresa sonrió de lado mientras terminaba de secar los platos. Por un momento, sintió algo extraño: tranquilidad. A pesar de todo lo que había vivido desde que despertó en el cuerpo de Bella, estar con Jacob la hacía sentir en paz.

Cuando terminaron de limpiar, se sentaron en la sala, cada uno con una bebida caliente. La noche ya había caído, y la brisa fresca entraba por la ventana. Fue entonces cuando Jacob, con expresión seria pero curiosa, le preguntó:

—Teresa... ¿Cómo era tu vida antes de... renacer en Bella?

Teresa bajó la mirada, jugueteando con la taza entre sus manos.

—Era... diferente —respondió con un suspiro—. Crecí en un mundo donde las apariencias y el dinero lo eran todo. Donde si no tenías poder, eras insignificante.

Jacob la miró en silencio, dejándola hablar.

—Fui ambiciosa, arrogante... Hice cosas de las que no estoy orgullosa, lastimé a personas que me amaban. Y al final, cuando creí tenerlo todo, lo perdí en un instante.

—¿Cómo moriste? —preguntó Jacob con suavidad.

Teresa se quedó en silencio unos segundos antes de responder:

—Sola... en el lugar que menos imaginé. Y lo último que pensé antes de cerrar los ojos fue que quería otra oportunidad, que quería hacerlo bien esta vez.

Jacob frunció el ceño.

—Y entonces despertaste aquí.

—Sí... en el cuerpo de Bella Swan. Sin recuerdos de su vida, sin saber quién era ni a quién conocía.

Jacob la miró fijamente antes de hablar:

—Bueno, si tienes otra oportunidad... ¿qué harás con ella?

Teresa lo miró a los ojos y sonrió con determinación.

—Voy a vivir. Voy a hacer lo que no hice antes: elegir mi propio destino.

Jacob asintió, sonriendo también.

—Me parece un buen plan.

Después de haber compartido la cena y haberse divertido con la comida, Teresa y Jacob se quedaron en la mesa, cada uno con una taza de café caliente en las manos.

El ambiente en la cocina de Charlie era tranquilo, solo interrumpido por el sonido lejano de la televisión en la sala.

—Dime, ¿en qué estás pensando? —preguntó Jacob, apoyando un codo en la mesa mientras la observaba con detenimiento.

Teresa dejó escapar un suspiro y miró el líquido oscuro en su taza.

—En mi vida pasada... y en lo que descubrí cuando desperté en este cuerpo.

Jacob ladeó la cabeza, intrigado.

—¿Qué quieres decir?
Ella levantó la mirada y fijó sus ojos en los de él.

—Cuando abrí los ojos en este cuerpo... lo primero que noté fue que estaba en los huesos. No exagero, Jacob, Bella estaba completamente demacrada. Era como si no hubiera comido bien en meses.