27. Que hay de nuevo Vietnam

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Capítulo 27

Que hay de nuevo Vietnam

—Quiero las orejitas.—elijo la diadema con las orejas de Minnie y me la pongo en la cabeza.

—Te pegan más las de gatita.—miro a Erra, señalando un par de color gris y acabadas en punta.—Miau.

—Literalmente Laura.—Juan le da una colleja.

De todos los Disney en los que hemos estado, el de Hong Kong está siendo el más divertido. No hay colas apenas, así que llevamos toda la mañana montándonos en una atracción tras otra, sin tener que esperar.

Esta mañana hemos paseado por el centro, que me recuerda un poco a China y a la vez tiene un aura a Japón. Es una mezcla interesante.

Lo de que las máquinas expendedoras sean un timo en todos los países del mundo es algo que no acabamos de entender. Puede ser por eso que nos hayamos dejado casi treinta euros en sacar un peluche usando el gancho.

Ni que decir que no lo hemos conseguido.

Lo bueno es que la dueña del local se ha apiadado de nosotros, y de la pena y la pinta de inútiles que teníamos nos ha regalado dos.

Erra y Juan se han dedicado a usarlos para ligar y hacer el tonto por la calle. Así que no me he podido llevar ninguno. Han hecho a dos mujeres felices a costa de hacerme a mi infeliz.

Claramente cancelados.

—Yo mejor gorro.—Borja se pasa las manos por el pelo, que empieza a tener demasiado largo. Dice que es porque tiene un proyecto en mente y necesita tener melena.

En mi humilde opinión es porque no ha encontrado un peluquero decente. Y eso que en Dubái aprovecho para retocarse el corte.

Tampoco le dura mucho la prenda en la cabeza: Jopa le quita el gorrito del pato Donald y le pone una diadema azul.

—Vosotros como almas gemelas os tenéis que poner la misma.—me quedo estática al escuchar a Jopa. El cámara está grabándonos de espaldas, y solo espero que no haya dicho esa frase refiriéndose a mí y Dani.

Por si acaso, me recoloco el pelo asegurándome de que me tape las mejillas sonrojadas.

—Nos ponemos las mismas.—eran los Freak Boys, menos mal.—Pero entonces Minnie tiene que tener un Mickey.

Fulmino a Erra, aunque le da igual. Parece que mis miradas asesinas están perdiendo efectividad.

Plex se quita el gorro azul de mago que se estaba probando y se coloca en su lugar unas orejitas negras básicas.

—Parecéis Minnie y Goofy.—se burla Juan, haciéndonos una foto.

Nota mental: pedírsela disimuladamente.

—Y tú Suneo el de Doraemon.—replico. Esta vez sí que se hace el ofendido. Pues no entiendo porque, de todos los personajes el gato azul y el rubio eran los más decentes.

¿No?

Espera, Suneo era moreno. Se me nota ya el cansancio. Esto de editar, no dormir y no comer va a hacer que piense que Pocoyó era rosa.

También te digo, últimamente los dibujos animados cambian mucho. Ahora la madre de Pepa Pig está embarazada. Es complicado estar al día.

Al final, los chicos eligen diferentes gorros y solo Borja y yo salimos de la tienda con nuestras diademas de princesa.

No entienden la puta vibra, está claro.

—¿Te has fijado en que Juan ha cogido dos de las cosas para el pelo?—Dani se curva sobre mí para poder susurrar en mi oído. Las cosquillas me ponen alerta.

Cien Noches | YosoyPlex y AdridobylusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora