💕Steve Harrington's One shot 🏀💕

Confesiones en una noche de luces y monstruo

Holaaa 😊, Volví después de unas semanas, H es estado ocupada 😔, Así que actualice, Espero que les guste y muchas gracias por sus lecturas y votos 😊🥹🫶🏼, ❤️ 

Nunca imaginé que mi vida terminaría en una casa llena de luces parpadeantes, con un bate con clavos en las manos y un monstruo de otra dimensión acechando entre sombras. Pero ahí estaba, junto a Nancy y Jonathan, esperando el momento en que esa cosa apareciera para terminar con todo.  

Las luces tintineaban erráticamente, creando un patrón caótico en la sala de los Byers. Mi respiración era un desastre. Cada latido de mi corazón me recordaba lo loca que era esta situación.  

Y entonces, él apareció.  

—¿Qué demonios está pasando aquí? —La voz de Steve Harrington rompió el tenso silencio.  

Me giré bruscamente, el bate casi resbalándose de mis manos. Ahí estaba él, de pie en la entrada, con su cabello perfectamente alborotado y una expresión de absoluto desconcierto.  

—Steve, tienes que irte —le dijo Nancy rápidamente, cargando la pistola con manos temblorosas.  

—¿Irme? ¿De qué están hablando? —Steve dio un paso más dentro, su mirada recorriendo el caos a nuestro alrededor: las luces colgadas por toda la casa, las trampas improvisadas, nuestras caras llenas de terror.  

—No hay tiempo para explicaciones —dije con urgencia, mirando las luces que parpadeaban con más fuerza. —Pero si te quedas, quédate en silencio y cerca de nosotros. Esto no es un juego.  

Él me miró con incredulidad, pero luego su expresión cambió. Me conocía lo suficiente como para saber que no estaba bromeando.  

—¿Qué diablos están haciendo? —preguntó de nuevo, pero antes de que pudiera obtener una respuesta, las luces estallaron en un resplandor aterrador.  

Un rugido ensordecedor rasgó el aire.  

Mi cuerpo reaccionó antes que mi mente, aferrando el bate con todas mis fuerzas. El demogorgon se apareció frente a nosotros, su boca llena de dientes afilados abriéndose con un chillido inhumano.  

Steve gritó.  

Y entonces, todo se volvió un caos.  

 Horas después  

Will estaba a salvo. El demogorgon ya no estaba. Pero mi corazón seguía latiendo como loco.  

Me encontraba sentada en el estacionamiento del hospital, sintiendo la brisa helada de Hawkins en la piel. Jonathan y Nancy estaban dentro con la familia Byers. Yo necesitaba un momento para respirar.  

—Tn.  

La voz me sobresaltó. Me giré y lo vi. Steve. Con el rostro aún manchado de polvo y sangre, el cabello desordenado, pero con los ojos clavados en mí con una intensidad que me hizo contener el aliento.