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— 🍂 ᴘʀᴏᴛᴇᴄᴛɪᴏɴ
El sol brillaba de manera extraña en Forks, especialmente en la reserva. El frío se había alejado de los pueblerinos, y el sol de Julio comenzaba a ocultarse, dejando un hermoso paisaje en el cielo.
Y ese día era sin dudas el día favorita de Kalani Uley: su cumpleaños diecisiete. La chica había ido en la mañana junto a su hermano a casa de Emily, quien preparo su desayuno favorito: chilaquiles.
Y ahora, en la tarde noche, Kalani estaba saludando a todas las personas que estaban en el patio de su casa. Su hermano le había preparado una pequeña reunión con amigos, una parrillada y una fogata.
Las personas favoritas de Kalani estaban ahí. Estaba la manada, Jared, Sam y Paul. Estaban sus amigos de la escuela, Seth, Jacob, Embry y Quill. Y estaban algunos amigos de sus amigos que eran recibidos, como Jack y Bella.
La chica Swan lucía tímida, aunque en realidad Kalani no había hablado con ella, solo la escuchaba hablar sobre porque su pie estaba lastimado y sobre cómo tendría que usar una bota de recuperación por unos días más.
Sam y Emily se encargaban no solo de la parrilla, si no de controlar el consumo de alcohol. Mientras los mayores de edad como Jared, Jack y Paul podían tomar lo que quisieran de la hielera, el resto de ellos tenían que pedírselo a Sam y él les hacía marcas para rastrear cuántas bebidas llevaban.
Kalani tenía tres marcas en su brazo al igual que Quill y Seth. Embry tenía cuatro, y Bella y Jacob no tenían ninguna ya que no tenían permiso de beber.
La fiesta era entretenida y cálida, algunos estaban sentados en la fogata, algunos estaban charlando cerca de la comida, y algunos solo caminan por ahí mientras comían.
Kalani dejó su lugar cerca de la comida para sentarse en la fogata junto a Bella y sus amigos de la escuela.
- ¿Desde hace cuánto se conocen todos? - Preguntó Bella curiosa.
- Mm, creo que casi todos nos conocemos desde que somos niños - Contestó Kalani con una sonrisa - Yo me fui hace algunos años, en realidad no tiene tanto tiempo que regrese.
- Ey, Embry, ¿como sigues con esas cuatro marcas? Es un milagro que sigas de pie - Se burlaba Quill.
- ¡Oye! - Balbuceó ofendido.
- Sam ya no le quiso dar más - Se burló Jacob - Se lo está tomando muy enserio, ¿no?
