Finge que me quieres

Extra uno.

Summer

Sentía los ligeros movimientos de mi bebé en mi vientre, mientras Nevan se reía poniendo su manita en mi estómago hinchado.

Skyler desde que supo que sería una niña dijo que ya no quería al bebé, que ella no quería una hermana.

Aunque ella al principio deseaba que fuera una niña, no entiendo qué fue lo que pasó para que ahora dijera que no la quería y haya cambiado de opinión.

A pesar de que ya había pasado un poco tiempo de eso, seguíamos sin quitarle esa idea a Sky. Ella pensaba que al tener una nueva hermanita la íbamos a dejar de querer.

—Bebé —Nevan decía mientras se reía poniendo su mejilla en mi vientre, me reí mientras acariciaba su cabello. —Mami, la bebé me pateó —Los ojitos de mi niño se iluminaron mientras me miraba.

—Ella quiere mucho a su hermano, también quiere a Sky.

—¿Poqué Sky no está aquí? —Él parecía preocupado.

—No lo sé, mi amor. Ven, vayamos con tu hermanita. —Me levanté de la cama y el hizo lo mismo mientras tomaba mi mano y ambos salíamos de la habitación y bajamos para poder llegar a la sala.

Dónde Nikolai se encontraba escribiendo unas canciones y Sky jugaba con sus muñecas mientras de fondo se encontraba la princesa y el sapo.

—¡Mami! —Sky pareció feliz de verme antes de abrazarme y darme los brazos para que la cargará.

—No puedo cargarte, mi amor. Si no lastimare a tu hermanita.

Ella miró a mi vientre con rencor.

—No quelo a la bebé.

—¿Por qué no la quieres, mi amor? Si ella te quiere mucho.

Los ojos de Nikolai estaban puestos en nosotros mientras alzaba una ceja.

—Bebé mi hemanito. —Miro a Nevan.—Ella no.

—Ella también es tu hermanita, preciosa. Vas a tener con quién jugar a las muñecas.

—Muñecas mías, de ella no. Y papi y hemanito mio. De ella no.

Miró a Nikolai y el se acercó a Sky antes de tomarla en brazos y besarle la frente.

—¿Por qué no quieres a tu hermanita?

—Ya no me van a quelel.

—¿Quién dijo eso? —Él acomodó su cabello, mirándola con fijeza.

—Ella va a se tu bebé. —Ella hizo un mohín y Nikolai negó suspirando.

—Ustedes tres son mis bebés. Pero tú hermanita va a necesitar un poquito más a mami y a papi.

—¿Poque? —Ella parecía confusa.

—Es una bebé, mi amor. Tenemos que cuidarla mucho para que crezca muy sana como ustedes.

Ella negó mientras abrazaba a Nikolai por el cuello.

Esperaba que cuando ella naciera las cosas fueran un poco más fáciles con Skyler. No quería que ninguno de mis hijos se sintiera reemplazado.

Sentía que en cualquier momento ella podría nacer, estuve leyendo un poco sobre las contracciones y si no me equivocaba era lo que estuve sintiendo en estos últimos días. Estábamos en abril, ella nacería a principios de este mes y estaba nerviosa. A pesar de que ya tenía a dos hijos aún me sentía nerviosa porque ella sería un parto natural, ni siquiera sabía que era lo que me esperaba.

Sus cosas estaban listas desde hace cuatro semanas. Así que si, ya estaba preparada para su llegada ahora solo quedaba esperar el momento en el que ella quiera nacer.