Capítulo 38: El culpable

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Yoon-Ah

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Yoon-Ah

Cuando desperté, la luz del día ya iluminaba tenuemente la habitación. No tenía idea de qué hora era, pero esta vez In-ho no estaba a mi lado.

Un pequeño suspiro escapó de mis labios mientras me giraba en la cama, sintiendo la suavidad de las sábanas aún impregnadas con su aroma. Fue entonces cuando noté una nota en el buró junto a mí.

Tomé el papel entre mis dedos y, aún con los ojos algo pesados por el sueño, comencé a leer.

"Princesa:

Tuve que salir más temprano hoy. No quise despertarte porque te veías muy tierna. Regreso lo antes posible. No me gustaría que estés encerrada si no lo quieres, así que puedes salir al jardín o, si lo deseas, dar un paseo a algún lado. Pero sí o sí, avísame si lo haces, Yoon.

En el mueble enfrente de ti dejé tu desayuno listo, al igual que tus medicamentos.

Te amo.

Con amor, In-ho."

Un leve calor se expandió en mi pecho mientras recorría con la mirada la nota una y otra vez. A pesar de lo serio y estricto que podía ser, tenía esos detalles que me hacían sentir protegida... querida.

Me incorporé en la cama y miré hacia el mueble frente a mí. Tal como decía en la nota, mi desayuno estaba ahí, cubierto con una tapa de cristal.

Me levanté con calma, estirando un poco mi cuerpo adormecido. Desayuné en silencio, tomé mis medicamentos y luego cambié el vendaje de mis heridas. Ya no dolían tanto como antes, pero aún había momentos en los que un simple movimiento me hacía sentir punzadas incómodas.

Después de arreglarme, me quedé mirando mi reflejo en el espejo por un rato, sin saber realmente qué hacer con el día. Finalmente, tomé el celular que In-ho me había dado, aquel que solo usaba para comunicarme con él, y le envié un mensaje.

In-ho

Voy a salir.

Muy bien, linda. ¿A dónde?

Aún no lo sé.

Bueno, llamé a un chofer en quien confío. Él te llevará a donde quieras y también te acompañará en todo momento. 🩷

In-ho, te dije que no quería un guardaespaldas.

Lo sé, pero es importante que sí
o sí tengas uno al dar un paso
fuera de la reja de la casa

🙄

A pesar de todo, terminé de prepararme para salir, aunque aún no tenía claro a dónde iría. Pero justo cuando iba a abrir la puerta para salir, un dolor punzante me paralizó.

Just for you | Hwang In-ho Donde viven las historias. Descúbrelo ahora