anri x isagi

capitulo 29

Tuve que hacer devuelta el cap ya que me olvidé el nombre verdadero de la hermana de chigiri ahora haré el cap más largo lo siento aveces me olvido los nombres de los personajes
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Koyuki consuela a Isagi

Isagi caminaba por los pasillos del hotel, con las manos en los bolsillos y la cabeza gacha. Después de lo que había pasado con Nagi y el video, sentía que todo a su alrededor se desmoronaba. La confianza que tenía en sí mismo y en las personas cercanas parecía desvanecerse lentamente.

Mientras avanzaba perdido en sus pensamientos, escuchó una voz familiar y suave llamándolo.

Koyuki: Isagi, ¿estás bien?

Isagi se detuvo y levantó la mirada. Era Koyuki Chigiri, la hermana menor de Hyoma. Estaba de pie cerca de una máquina expendedora, con una expresión de preocupación evidente.

Isagi: (suspirando) Ah, Koyuki... No, la verdad que no.

Ella se acercó, ladeando un poco la cabeza para mirarlo mejor.

Koyuki: ¿Querés hablar de eso? Parece que algo te está carcomiendo por dentro.

Isagi: No sé si sea buena idea. Es demasiado complicado...

Koyuki: Bueno, podés intentarlo. A veces, hablar con alguien que no está metido en el quilombo ayuda.

Isagi dudó por un momento, pero finalmente asintió. Ambos caminaron hacia el balcón del hotel, donde podían hablar con mayor tranquilidad.

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En el balcón

El viento nocturno soplaba suavemente, aliviando un poco la tensión de Isagi. Koyuki lo miraba con atención, esperando que comenzara a hablar.

Isagi: Es todo un desastre... (haciendo una pausa) Me cuesta concentrarme, me siento traicionado, y siento que ya no puedo confiar en nadie.

Koyuki: ¿Traicionado? ¿Por quién?

Isagi vaciló.

Isagi: Nagi y... y Anri.

Koyuki levantó una ceja, sorprendida.

Koyuki: ¿Qué pasó con ellos?

Isagi le explicó todo lo que había visto en el video. Mientras hablaba, Koyuki lo escuchaba en silencio, pero su expresión reflejaba indignación y sorpresa.

Koyuki: Eso es... horrible, Isagi. No sé cómo alguien puede hacerte algo así, especialmente en un momento tan importante para vos.

Isagi: (con los ojos brillantes) Sí, y encima no puedo sacármelo de la cabeza. Todo esto me está afectando hasta en la cancha.

Koyuki: (acercándose) Isagi, eso no está bien. No podés dejar que estas cosas te arruinen. Sos más fuerte que eso.

Isagi: (susurrando) A veces no me siento tan fuerte.

Koyuki, conmovida, extendió los brazos y lo abrazó con ternura.

Koyuki: Entonces dejame recordártelo. Sos Isagi Yoichi, el que siempre encuentra la forma de ganar, en el fútbol y en la vida.

Isagi se quedó quieto por un momento, sorprendido por el gesto. Luego, relajó los hombros y aceptó el abrazo, sintiendo algo de alivio en su presencia.

Koyuki: (sonriendo) ¿Ves? No estás solo.

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Después de un rato, Koyuki lo soltó y se sentaron en el suelo del balcón, mirando las luces de la ciudad.

Koyuki: ¿Y ahora qué vas a hacer?

Isagi: (pensativo) No lo sé. Supongo que debo seguir adelante, pero es difícil.

Koyuki: Tenés a tus compañeros y amigos que te apoyan. Y también tenés a personas como yo. (sonriendo) Aunque no seamos tan cercanos, siempre podés contar conmigo.

Isagi la miró, sorprendido por sus palabras.

Isagi: Gracias, Koyuki. Eso significa mucho para mí.

Ella le dio una palmadita en el hombro.

Koyuki: Bueno, ahora andá a descansar. Necesitás estar al 100% para el próximo partido. Y si algo te sigue molestando, sabés dónde encontrarme.

Isagi: (asintiendo) Lo haré. Gracias de nuevo.

Mientras Isagi regresaba a su habitación, sintió que algo de la carga en su pecho se había aliviado. Aunque el dolor seguía ahí, saber que tenía a alguien como Koyuki lo hacía sentir un poco más fuerte para enfrentar lo que venía.

Continuará...