Mi marido Italiano +21 [2T]

Capítulo 17

Miro como Jungkook frunce el ceño mientras me cambio de ropa.

— ¿Por qué tienes que salir con ese tipo?

— Me ha invitado a un café, no quiero ser descortés.

— Hay café aquí y puedo cuidarte estando aquí.- Ruedo los ojos, me pongo el abrigo y voy hacia él tomando asiento en su regazo.

— Mi amor, se que eres un controlador de primera y créeme, amo mucho como eres, pero podrías por favor solo relajarte, estaré bien.

Él me mira por segundos, detalla cada facción mia, después de cerrar los ojos y suspirar, asiente abrazandome contra él.

— Lo siento, me he vuelto un celoso contigo y los niños.

— Como si fueran a robarnos.- El ríe, acaricia mi vientre y besa mis labios lentamente.- Esto es delicioso.

— Tu eres delicioso.

Jamás podré cansarme de esa sensación, de sentirme amado, protegido, cuidado y anhelado por el, Jungkook es realmente lo mejor que me ha pasado en la vida entera.

— Debo irme.- Murmuro sobre sus labios y el me besa una vez más antes de finalmente aflojar su agarre, en una clara señal de que me dejaba libre.

— Cuídate mucho ¿Sí? Llámame si algo sale mal o si me necesitas, iré corriendo hacia tí.- Asiento y beso sus mejillas.- Te quiero vida mía.

— Te quiero mucho más.

Finalmente después de una larga sesión de besos y mimos, salgo de casa, mi cuerpo está en alerta mirando en todas las direcciones, pero nuevamente es como si todo hubiera sido el resultado de mi sugerente imaginación.

Ver a Yoongi me relaja, después de todo solo él sabe la angustia de mi alma, solo puedo confiar en él.

— Ha crecido mucho.- Sonríe viendo mi vientre.- ¿Crees que en otra vida, ellos fueran, mis hijos?

Ruedo los ojos y el ríe bastante divertido.

— También me alegra verte Min.

Tomo asiento y el me mira detenidamente.

— Cuéntamelo todo.

Hay algo extraño en el ambiente, pues su mirada parece perdida y temblorosa por momentos, sus manos se cruzan y traga grueso constantemente.

— Creo que la he visto.- Eso llama su atención y asiente.

— ¿Quieres un café?

Cruzó el ceño y miro su extraña actitud.

— No, he venido aquí por...

— Esto no es tu asunto Jimin.- Quedó en silencio.- Me refiero a... Todo éste asunto, la vida de ese hombre, la mafia, nada de esto te concierne.

— Qué estás diciendo...

— De alguna manera, esa mujer se ha enterado que estoy detrás de ella.- Mi corazón palpita con fuerza mientras los nervios se apoderan de mí.- He recibido amenazas escalofriantes, si esa mujer muere mi cabeza estará comprometida junto a toda mi familia, tengo hermanos pequeños Jimin.

Es como si todos los momentos felices que he pasado últimamente se esfumaran, sumergiendome en un nube de amargura que invade mi ser.

— ¿Entonces es todo? Eres un miedoso.

— ¡Y tú un gran idiota! ¿Qué no te das cuenta? Ese hombre al que dices amar, es una ruina, su vida está comprometida, no importa lo que hagan, él es propiedad de ella y tú estás arriesgando tu vida y la de tus hijos por alguien que jamás será libre completamente.