Isagi regresó a su habitación después de la cena, todavía procesando la sorpresa del regreso de Naruhaya y las palabras de Ego. Cerró la puerta detrás de él, suspirando mientras se dejaba caer en la cama. Miró el techo, perdido en sus pensamientos sobre el Mundial, el equipo, y la presión de estar a la altura.
Unos suaves golpes en la puerta lo sacaron de su ensimismamiento.
Isagi: (Levantándose) ¿Quién es?
Anri: Soy yo, Anri. ¿Puedo pasar?
Isagi se acercó rápidamente a la puerta y la abrió. Anri estaba de pie, con una sonrisa cálida y algo de nerviosismo en su rostro.
Isagi: (Sorprendido) Anri, ¿todo bien?
Anri: (Asintiendo) Sí, pero quería hablar con vos. ¿Te molesta si entro un momento?
Isagi se hizo a un lado para dejarla pasar. Anri entró lentamente, observando la habitación con curiosidad.
Anri: (Mirándolo) Sé que todo esto del Mundial debe ser una locura para vos. Solo quería asegurarme de que estés bien.
Isagi: (Sonriendo) Es mucha presión, pero estoy acostumbrado. Aunque, para ser sincero, es bueno tener a alguien como vos que se preocupe.
Anri: (Riéndose suavemente) Claro que me preocupo. Te he visto crecer como jugador desde el principio. Es imposible no sentirme orgullosa de vos.
Isagi sintió un calor en el pecho al escuchar esas palabras. Había algo en la forma en que Anri lo miraba que lo desarmaba por completo.
Isagi: (Mirándola fijamente) Gracias, Anri. De verdad. Significa mucho para mí.
Anri: (Sonrojándose un poco) Bueno, también quería darte algo de ánimo antes del torneo. Sé que vas a darlo todo en la cancha, pero no te olvides de cuidar de vos mismo también.
El silencio que siguió estuvo cargado de una extraña pero reconfortante tensión. Isagi dio un paso hacia ella, inseguro pero decidido.
Isagi: (En voz baja) Anri... gracias por siempre estar ahí.
Anri levantó la vista y lo encontró mirándola con una intensidad que nunca había visto antes. Su corazón comenzó a latir más rápido, pero no apartó la mirada.
Anri: (Sonriendo tímidamente) Yo también quiero agradecerte, Isagi. Por nunca rendirte, por demostrarle al mundo que podés superar cualquier obstáculo.
Sin pensar demasiado, Isagi dio un paso más cerca y tomó su mano con delicadeza.
Isagi: (Con sinceridad) Vos también sos una de mis razones para seguir adelante.
Anri no respondió con palabras, pero su expresión lo decía todo. Ambos se acercaron lentamente hasta que sus labios se encontraron en un beso suave y lleno de emociones contenidas.
El tiempo pareció detenerse en ese momento, donde todo lo demás quedó atrás. La presión, los entrenamientos, el Mundial... nada importaba más que estar juntos.
Cuando se separaron, Anri lo miró con una mezcla de ternura y nerviosismo.
Anri: (En voz baja) Bueno, supongo que eso cuenta como un buen comienzo para el Mundial, ¿no?
Isagi: (Riéndose suavemente) Definitivamente lo es.
Pasaron unos minutos más conversando y disfrutando de la compañía del otro antes de que Anri se despidiera, dejando a Isagi con una sensación renovada de determinación y felicidad. Esa noche, Isagi se durmió con una sonrisa, listo para enfrentar cualquier desafío que el futuro le deparara.

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anri x isagi
Romanceestá pareja me gusta mucho y intentaré hacer la mejor novela de ellos dos