Finge que me quieres

Epílogo.

Pongan ahora sí su último presente:

Años después.

Summer

Al momento que llegue a casa, Sky y Nevan corrieron a mi lado mientras me abrazaban las piernas.

—Mi mami. —Nevan me mostró los dientitos mientras me daba los brazos para que lo cargará.

—Hola, mi amor —Le besé la frente mientras lo cargaba, mientras le tocaba la naricita llena de pecas.

—Mamá. —Sky también extendió sus manitas para que la cargará así que la tome pero eso fue un gran error porque Sky le pegó a Nevan y él decidió halarle el cabello desatando la guerra.

—Niños, no peleen. —Los regañé.

—Pelo mami.

—No peleen, si ustedes pelean mami estará muy triste.

Sky me miró como si dudará de mis palabras.

—¿Dónde esta, papá? —Baje a ambos niños.

—Aquí, mila. —Nevan me jalo hasta la cocina dónde Nikolai se encontraba cocinando.

—Hola, Evangeline. —Me sonrió

—Hola, mi amor. —Me acerqué a él para poder besarlo mientras que Nevan me abrazaba la pierna.

—¿Cómo ha ido tu día?

—Espectacular.

—He preparado la cena.

—Bien. —Sonreí mientras tomaba en brazos a Nevan antes de regresar al comedor.

—Sky, ven acá preciosa.

Sky llegó corriendo mientras nos miraba.

—Ven, vamos a lavarnos las manos, es hora de cenar.

Sky aplaudió mientras tomaba mi mano, caminamos al baño y lave las manos de ambos niños.

—Vayan con papá, en unos segundos voy con ustedes.

Lave mis manos y suspiré, mientras buscaba una de las pruebas de embarazo que tenía guardada.

—Mi amor. —Escuché la voz de Nikolai que venía entrando al baño.

—¿Qué pasa?

—¿Te has hecho la prueba?

Negué mientras se la mostraba, él asintió mirándome.

—¿La harás ahora mismo?

—Si, yo creo que sí. Estoy muy ansiosa.

—Si, yo también.

—Me haré la prueba, espérame aquí afuera.

—Bien.

Tomé la prueba mientras la abría y leía las instrucciones, las manos me temblaban, estaba tan nerviosa pero por otra parte Nikolai y yo ya queríamos tener otro bebé. Los mellizos tenían cuatro años.

Y sí, habíamos estado practicando demasiado así que si la prueba no salía positiva se me haría hasta demasiado raro.

Mis dedos sudaban mientras hacía la prueba, al abrir la puerta me encontré a Nikolai que estaba recargado en la barandal de las escaleras mientras me esperaba. Me acerque a él con la prueba en la mano.

—¿Y? ¿Qué salió?

—Debemos esperarnos unos momentos antes de poder ver el resultado.

Nikolai asintió mientras me abrazaba y me besaba la frente.