Capítulo 5

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Miro a la mujer que llevo a mi lado, ni siquiera ha dicho una palabra, pero la he oído sollozar todo el camino; sus rasgos son idénticos a la de su hijo, es una mujer atractiva y muy llamativa.

La niña en los asientos traseros se mantiene quieta con su cabeza gacha, no se que edad tiene, es muy callada con una larga cabellera, pero su tranquilidad y silencio es inquietante, tanto como el hecho de que mantiene su mirada fija en sus manos cruzadas.

Algo está tan extraño en todo esto.

— Su hijo está en el quinto piso, habitación 98- Estaciono frente al hospital y ella finalmente me mira.

— No tengo palabras para agradecerte, de haber sabido que mi hijo estaba tan mal jamás hubiera permitido que me dejara en ese hotel.- Trago grueso mientras pienso en lo inconsciente que ha sido Jungkook, pero sobre todo en lo extremo que fue esta vez.- Anna es muy tranquila, le prometo que iré por ella una vez mi hijo se estabilice.

Mi mirada se va a la niña , ella levanta la suya y tan pronto como me mira vuelve a bajar su cabeza.

— No hay problema, espero que Jungkook se recupere.- La incógnita en la mirada de la mujer me da a entender que está tan confundida con mi actitud.

No sé que espera de mí o si sabe algo de mí, por más que quisiera quedarme a explicarle mi situación, saber que tengo a Jungkook a unos metros de distancia no ayuda a mi superación.

— Cariño, iré por ti ¿De acuerdo? Se obediente y buena chica.- La pequeña le asiente, ella toca su largo cabello dedicándole una sonrisa comprensiva.

Una vez se baja mi estómago se revuelve, emprendo camino a casa con la niña en mi auto, estoy demasiado mareado pensando en todo lo que me ha sucedido en los últimos momentos de mi vida, me he ofrecido a cuidar de una niña que no conozco, ni siquiera se cómo cuidar niños, no sé cómo cuidare a mis hijos yo solo.

¡Estoy demasiado jodido!

Mi estómago parece ser considerado conmigo, las náuseas han sido controlables en el camino, pero una vez llego a casa no puedo evitar soltar todo lo que me abruma,

La niña ha quedado estática en la entrada mientras yo corro al baño para vomitar; no había tenido síntomas, pero ahora que se que hay dos bebés en mi vientre es como si quisieran hacerse notar después de dos meses.

Expulsó todo, me quedo sin energías y tardo en recomponerme para seguir, pero de pronto me siento tan cansado que seguir el curso de mi vida me parece una pésima idea.

Se que la niña espera por mí, así que me obligo a levantarme, enjuagar mi boca e ir hacia ella.

Anna tiene unos grandes ojos marrones que cautivan a simple vista, sus rasgos italianos son muy notorios, no puedo evitar sentir que...

Son majaderias mías, no debería pensar en esas cosas.

Me preguntó si mis hijos van a tener similitudes con ella, es una niña preciosa, verdaderamente bella.

— ¿Quieres comer?- Ella parece no entender lo que le digo, así que pruebo con hacerle señas a las que ella asiente y así puedo saber que efectivamente tiene hambre. No soy un experto en la cocina, pero estoy seguro de que ella tampoco sabe mucho de comer comidas exoticas, si es como su padre estaré jodido.

La guío al sofá, dejo el control remoto y el televisor a su disposición, mientras mi lucha empieza en la cocina, los olores de la comida me hacen sentir demasiado asqueado, las náuseas vuelven y más que ganas de vomitar, realmente quiero llorar.

Mi casa está reluciente, no hay rastros de el desastre que Jungkook hizo, pero el recuerdo sigue en mi mente, la ecografía de mis niños sigue en el bolsillo, el embarazo está empezando a abrumarme y pensar que el está internado tratando de estabilizar su salud mientras yo estoy lidiando con tantas cosas es desesperante.

Mi marido Italiano +21 [2T]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora