Jess disfrutaba de un capítulo nuevo de su serie preferida tirada en su cama, cuando de repente Alisa entró en su habitación furioso.
—¿Qué es esto? —gritó mostrándole el móvil y tras leer el título, tuvo que ver el video.
—Al parecer nuestro atractivo Jayden no sabe a qué gemela elegir —anunciaba Hannah—. Y es que tras el intenso partido y una cita fallida por el incidente en el que Jess estuvo envuelta, esta mañana se ha visto en la playa a esta última con el chico que tanto odia las redes sociales.
—Y si el video del partido nos dejó momentos calientes, os digo que verlos a los dos en la tabla...en fin, mejor lo veis vosotros mismos —prosiguió Taylor, dando paso al video.
A Jess no le hizo falta verlo porque sabía muy bien lo que había pasado esa mañana, pero al parecer los chismosos hermanos tenían algo más que contar.
—Y tras ese encuentro —dijo Hannah, retomando la palabra—, nuestro chico se ha visto con Alisa y al parecer no se lo han pasado nada bien.
El video que seguía a continuación era el del balonazo de Alisa, su caída y como ella le gritaba al chico tras intentar ayudarla.
—¿Qué estás haciendo? —gritó Alisa tras apartar el teléfono—. ¿Tonteas con él?
—No, no, te juro que no...coincidimos, me llamó y si no hubiera sido por tu bocaza y le hubieras hablado de lo mal que lo he pasado esta semana, él no me hubiera propuesto una actividad para divertirme —protestó, poniéndose en pie y comenzó a pasear por la habitación, sin dejar de escuchar las maldiciones de su hermana—. Pero tienes razón, lo que he hecho ha estado mal, perdona. Te juro que no pensé que eso fuera algo más que dos amigos pasándolo bien, lo siento, no volverá a pasar.
Angustiada, Alisa tomó asiento en la cama y su hermana se arrodilló frente a ella y le tomó de la mano.
—¿Qué ha pasado? —se interesó Jess.
—¡Todo ha sido un desastre! Ya lo has visto...yo...es tan diferente. ¿Quién no tiene redes sociales hoy en día? ¿Por qué las aborrece tanto?
—Puede que recibiera bulling a través de ellas, es una posibilidad. Sea cual sea el motivo, pasó antes de que nosotras llegásemos y sé que te gusta mucho, pero Ali, cada uno es como es, igual que él es de una manera, tú tampoco deberías cambiar por nadie, es algo que quiero que lo tengas en cuenta. ¿Pasaría algo malo porque no plasmases toda tu vida en las redes y vivieras el momento? No, no pasaría nada, pero tú sabes lo que quieres ser y eso nadie debe cambiarlo.
—¿Qué piensas de los influencer?
—Algunos me gustan y aportan contenido que me gustan y me sirven y lo sabes, es mi opinión, ¡un trabajo! Pero un trabajo también debe permitirte tener momentos para ti, ¿vale?
Alisa asintió, se sintió más aliviada y se puso en pie.
—Espero que esta tarde salga mejor. Vendrá conmigo a una fiesta y parte del tiempo trabajaré, y otra parte me divertiré.
A Jess le pareció bien que lo intentase, más que nada para que aprendiera a distinguir su vida en las redes, de la real y pudiera ser feliz no solo mostrándolo en una pantalla, sino también en la realidad.
Los nervios recorrían todo el cuerpo de Jayden mientras esperaba a que llegase Alisa y no era por volver a verse con ella, sino por hacerlo en una fiesta, no una normal, sino una de influencer. No solo quería tener otra oportunidad con Alisa y sentir lo mismo que la semana pasada durante el partido, sino que era el momento de enfrentarse a sus miedos. Al fin, la chica llegó y tras ocultar toda su angustia tras una sonrisa, montó con ella en el vehículo y media hora más tarde llegaron al lugar.

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Amor en la mentira
RomanceJess afronta su último año de instituto feliz porque su sueño de ir a estudiar a Nueva York esté cercano, pero un día, Alisa, su hermana gemela le pide que se intercambie con ella en clase de Educación Física por una urgencia. A regañadientes, Jess...