PASIÓN MORTAL || FREENBECKY (G!P)

59. Imparable [2/2]

🦦 BECKY 🦦

Mis ojos se abrieron lentamente. Estaba acostada en una cama mientras un señor que no conocía vendaba mi pierna.

:- Becky - escuché la voz de Camila a mi lado.

:- Camila - dije con la voz un poco débil.

:- ¿Estás bien? ¿Cómo te sientes? - preguntó ella.

:- Me duele todo el cuerpo - respondí.

Jeff entró en la habitación.

:- Becky, despertaste, ¿estás bien? - dijo Jeff, claramente preocupado.

:- Un poco adolorida, pero viva - dije, tratando de sonreír.

:- Señorita Armstrong, tuvo suerte. Sus quemaduras no llegaron más allá y no tiene ninguna fractura. Necesita tomar estos analgésicos y guardar reposo por unos días. Trate de no caminar para que su pierna se recupere y no use mucho las manos, también están delicadas - dijo el doctor. Miré las vendas que cubrían mis manos, dejando solo los dedos expuestos.

:- Muchas gracias, doctor - dije asintiendo.

:- Llámeme de inmediato si la joven llega a tener alguna complicación - añadió el doctor, dirigiéndose a Jeff, quien asintió antes de acompañarlo a la salida.

:- Camila - la llamé, y ella me miró.

:- ¿Sí?-

:- Necesito que hagas algo por mí - dije en voz baja. Ella asintió, expectante.

:- Por supuesto, ¿en qué puedo ayudarte? - dijo, acercándose.

Miré hacia la puerta, asegurándome de que nadie más escuchara, y la jalé suavemente para susurrarle al oído.

Camila abrió los ojos como platos.

:- ¿Qué? Becky, estás loca. No voy a hacer eso. ¿Quién diablos es Madelyn? - preguntó, sorprendida.

:- Hazlo, por favor. No quiero que la policía me siga buscando - le supliqué.

:- Becky, eso es una locura - respondió, insegura.

:- Esa inútil es una cobarde. Solo tienes que sonar convincente y llevar un arma - dije.

Camila asintió lentamente, mirándome con preocupación.

:- Eres la mejor, ¿lo sabías? - dije, esbozando una sonrisa.

:- Por supuesto - contestó, rodando los ojos.

:- Anda, no hay mucho tiempo a le indiqué, dándole la dirección de Madelyn.

Camila, aunque dudosa, siguió mis instrucciones al pie de la letra y salió del apartamento.

Después de unos minutos, el cansancio volvió a abrumarme. Sentía mi cuerpo congelado, agotado. Me quedé dormida durante horas, sin saber cuánto tiempo había pasado, hasta que un escándalo proveniente de la sala del apartamento de Jeff me despertó.

:- ¡Freen, cálmate!- escuché la voz de Friend intentando controlar la situación.

:- Maldito imbécil, me quieres ver la cara de idiota. Sé que Becky está aquí - la voz de Freen sonaba llena de furia.

:- Ya te dije que no está, imbécil - respondió Jeff, con tono frustrado.

:- ¡Freen, ya suéltalo!- exclamó Friend.

:- Oye, ¿a dónde crees que vas? - gritó Jeff, y luego escuché unos pasos apresurados acercándose al pasillo.

Las puertas se abrieron de golpe, y los pasos se hicieron más fuertes.