Capítulo 1

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La desaparición de Will Byers

6 de noviembre, 1983

En un sótano de una de las casas de Hawkings, Indiana, un grupo de niños se encontraba jugando animadamente el juego "Calabozos y dragones". Un mapa frente a ellos era la guía del juego, y en su rostro se notaba la emoción por el mismo.

Uno de los chicos, Mike Wheeler, de 12 años, comenzó a hablar.

—Una sombra crece en el muro detrás tuyo, y los sumerge en la oscuridad. Ya casi está aquí —advirtió metido en el papel de narrador.

—¿Qué es? —pregunta William Byers, o Will para sus amigos, de la misma edad de Mike, ansioso por ello.

—¿Y si es el Demogorgon?  Dustin Henderson, otro de los niños presentes, hablo, sintiendo la tensión del momento— ¡Estamos fritos si es el Demogorgon!

—No es el Demogorgon... —Lucas Sinclair, el último de los cuatro, intentó calmar a su temeroso amigo.

—¡Un ejército de trogloditas irrumpió en la recámara! —Dijo de nuevo Mike, tirando seis muñecos sobre la mesa— Sus colas golpean el suelo... ¡Boom!

—¿Trogloditas?

—Te lo dije...

—Esperen, ¿escucharon eso...? —Mike hizo una pausa dramática— Ese sonido no era de los trogloditas ¡Venía de otra cosa!

Miró a sus amigos, quienes esperaban ansiosos, por lo que rápidamente sacó una figura de nuevo y la puso sobre la mesa.

—El Demogorgon... —dijo Mike serio.

—¡Mierda!

—¡Will, haz algo!

—No-no se... —el nombrado dijo, no muy seguro.

—¡Usa una bola de fuego! —dijo Lucas algo nervioso.

—¡Tendría que sacar un trece o más!

—Muy riesgoso, usa un hechizo protector —Dustin lo miró, asustado por la idea de perder.

—Cobarde, ¡lanza la bola de fuego!

—¡El hechizo protector es más seguro!

—El Demogorgon se cansó de sus tontas peleas humanas. —llamó la atención de ambos niños— ¡Avanza hacia ustedes!

—¡Bola de fuego! —volvió a decir Lucas.

—¡Hechizo protector! —contraatacó Dustin.

—¡Bola de fuego!

—¡Hechizo protector!

—Y...

—¡Bola de fuego! —exclamó Will, lanzando el dado más fuerte de lo normal, haciendo que este se perdiera en el sótano.

—¿Qué salio? —preguntó Lucas nervioso.

—¡No se!

—Ay dios mío, ay dios mío, ay dios mío... —repetia Dustin ansioso.

—¡¿Salió un 13?!

—¡No se! —volvió a decir Will.

Los chicos, algo apresurados, se levantaron para intentar mirar el resultado de los dados, sin embargo, de la nada la puerta del sótano es abierta por una mujer. Los chicos la miran, pero Mike es el único que habla.

Experimento 012 (Will Byers x Male Oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora