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James Potter no se esperaba que Remus Lupin fuese a la fiesta de verano de sus padres con una chica. Quien definitivamente no era de Hogwarts, ni del pueblo en el que vivía Remus. El pueblo estaba lleno de muggles, y la fiesta tenía una estricta norma de no-muggles.
"James, hola." Dijo Remus, notando a su mejor amigo en la entrada. Se suponía que debía estar recogiendo abrigos, pero parecía que la familia Lupin y todos los que habían traído con ellos fueron las últimas personas en llegar.
"Lunático, ¿Quién es la afortunada?" James miró a la chica de cabello oscuro, que estaba mirando alrededor del jardín que estaba lleno de magos y brujas, la música sonaba suavemente aparentemente de la nada y platos de comida del tamaño de un bocado flotaban alrededor.
"Soy su prima. No sé que hago aquí, para ser justos." La chica se encogió de hombros, sus ojos se movieron del agua ligeramente dorada que llenaba el gran estanque hacia James, sus ojos parpadeando sobre su apariencia, como si no lo hubiera notado antes.
"Si ves a un chico de pelo oscuro por aquí", James señaló un punto de su cuello, "no dejes que te obligue a hacer algo que normalmente no haces".
"Nota tomada. Gracias por la advertencia." La chica sonrió y luego miró a Remus, que estaba perdido en su propio mundo. "Rem, ¿te importaría presentarme a alguien? Me han arrastrado hasta aquí con el pretexto de que hay personas que necesito conocer y postres".
"Oh, tenemos muchos postres. En realidad, debería haber varios platos llenos. Si Peter no se los ha comido todos". Respondió James, su voz y actitud tan brillantes como las flores que bordeaban la entrada al jardín.
"Tiger, te trajimos aquí para que te socialices". Dijo una mujer a la que se parecía profundamente la chica del brazo de Remus mientras pasaba, sus ojos se posaron en James antes de volver a la chica. "Será importante para cuando vayas a Hogwarts".
"Puedo hacer mis propios amigos, madre. Además, es poco probable que todo el alumnado de Hogwarts esté aquí. A menos que se escondan detrás de la carpa" Respondió Tiger a la mujer, que suspiró y negó con la cabeza.
"No te preocupes por eso, tía Grace" dijo Remus, volviendo finalmente a la normalidad. "James es un buen amigo mío. Sirius y Peter también deberían estar por aquí. James es el hijo de Fleamont y Euphemia, quienes son los anfitriones de la fiesta."
"Por supuesto que sí. Vaya, hace mucho tiempo que no veo a Monty y a Mia. ¿Tienes idea de dónde pueden estar tus padres, querido?", preguntó Grace Howell.
James señaló a un grupo de personas y dijo algo vago sobre la última vez que los vio allí. Por fin, la señora Howell asintió y se alejó, y se le unió un hombre que, a James, se parecía bastante a la madre de Remus, lo que significaba que probablemente era su hermano.
Tiger pareció desmoralizarse físicamente cuando su madre se alejó, exhalando un profundo suspiro y parándose con naturalidad, en lugar de con la espalda recta, para que su madre no hiciera comentarios al respecto. "Entonces, ¿eres James Potter, eh?"
"Ese sería yo." James sonrió un poco, pasándose la mano por el cabello y ajustándose las gafas. "Remus, ve a relajarte a algún lado, amigo, falta muy poco para la luna llena."
Remus asintió y salió corriendo hacia la casa, donde James sabía que se refugiaría en una de las habitaciones de invitados, durmiendo allí hasta que llegara el momento de irse.
"Gracias a Dios que escucha a alguien", comentó Tiger mientras observaba a su primo retirarse a la casa. "Le decía una y otra vez que podía arreglármelas sola, pero no me escuchaba".
"¿Sabes sobre su condición?" preguntó James, mirando como Tiger asentía, alisando el dobladillo de su vestido de verano, mirando alrededor del jardín una vez más antes de mirar nuevamente a James.
"Yo también soy una animaga. Remus y yo hemos estado en contacto desde que me fui a Estados Unidos, sé casi todo." Tiger se encogió de hombros y James no dejó que la sorpresa que sentía se reflejara en su rostro; sabía que hacía falta algo para que Remus te dijera algo así. "Mis padres no lo saben, así que mantén el tema al mínimo cuando estén cerca de ellos."
"Por supuesto. ¿Mencionaste los postres?" preguntó James, y fue como un animal olfateando a su presa, la forma en que la cabeza de Tiger se giró para mirarlo. Caminaron por el jardín, serpenteando entre varios grupos de adultos, James alcanzó y agarró con éxito una bandeja llena de postres, guiando a Tiger fuera de la parte principal del jardín hacia el área más aislada, sentándose en los escalones de un mirador.
"¿Está mal que asuma que tu forma animaga es un tigre por defecto?" preguntó James, mientras Tigre tomaba varias tartas de melaza del tamaño de un bocado de la bandeja.
"Mira, todo el mundo asume eso. No tengo ni idea de por qué". Tiger puso los ojos en blanco, su voz llena de sarcasmo mientras comía una tarta. "Es un error común. Mi patrón es un tigre, pero mi forma animaga es en realidad un zorro".
"¿Te gusta tu nombre?", preguntó James. Tiger se puso más cómoda y se apoyó contra la columna detrás de ella, contemplando su respuesta.
"Sí y no. Sí, es único, muy poderoso y hermoso. Pero también no, porque no tengo idea de lo que mis padres estaban pensando". Tiger se encogió de hombros y comió otra tarta.
"¿Puedo preguntar por qué estás aquí? Nunca te había visto cerca de Remus antes ni te había visto en absoluto." James tomó una tarta para él y observó a Tiger tragarse su última tarta, cruzando las piernas y ajustándose el vestido ligeramente corto para cubrir lo que necesitaba.
"¿Qué es esto, veinte preguntas? Mis padres decidieron que era hora de mudarse de nuevo". Tiger se encogió de hombros. "Solía asistir a Ilvermorny en Estados Unidos y vivía en Nueva York. Se habrían ido si estuviera a punto de comenzar mi último año allí, pero estoy a punto de entrar en sexto, así que me sacaron de la escuela y me trajeron de vuelta aquí".
"No pareces muy emocionada por eso". Comentó James, tomando otra tarta y relajándose un poco, dejando que sus ojos vagaran libremente, observando los rasgos de Tiger, la cadena de plata alrededor de su cuello, los diminutos rizos de cabello que enmarcaban su rostro, el hilo trenzado que colgaba alrededor de su tobillo.
"No me malinterpretes, no era la mayor fan de Ilvermorny en primer lugar. Pero toda mi educación vino de allí, tiene sentido que me quedara allí por el resto. Además, mis amigos estaban allí". Tiger se encogió de hombros, sin parecer notar los ojos de James trazando el contorno de su cuerpo, observando cada rasgo.
"Así que tuviste que venir aquí para socializar, eso es lo que dijo tu madre, ¿verdad?" Preguntó James, la primera respuesta a su pregunta fue un suspiro.
"Cierto. Se suponía que debía venir aquí porque necesito conocer gente a la que podría ver mucho más durante el año. Algunos de los amigos de Remus. Porque voy a asistir a Hogwarts durante mis últimos años .Así que me verás mucho más, Potter." Tiger tomó otra tarta, se la metió en la boca y se estiró ligeramente, James la observó todo el tiempo.
Y esa noticia no molestó a James Potter en lo más mínimo.
