¡Mira lo que nos hizo!
¡Alejate de el!
Hola pequeñín, ven irás conmigo...
Levantando el rostro su silueta es confusa, pero su voz... Es como
¿Hoseok?
Abriendo sus ojos la oscuridad lo acompaña, sudado y acelerado, no está asustado, su cabeza empieza a doler y solo puede pensar en... Reconoce ese lugar, reconoce esa voz.
¿A caso estaba quedando loco ya?
Se mueve, saliendo de los grandes brazos del hombre a su lado, le cuesta adaptar su mirada a la oscuridad pero tras unos minutos lo hace.
El reloj marca las 4:am. Siempre suceden a la misma hora...
Caminando fuera de la habitación, empieza a bajar las escaleras, escuchando un leve ruido en la cocina. Con algo de temor toma un jarrón de cristal y con pasos silenciosos se dirige al lugar.
– ¿Lea? - La mujer y sirvienta del lugar salta en su lugar y voltea hacia su dirección, mirándolo a punto de estrellar aquel jarrón en su cabeza.- ¿Qué haces?
– Señor, oh mi Dios, señor lo lamento no podía dormir, estoy aterrada.
– ¿Aterrada?- Bajando el jarrón se acerca a la mujer.- ¿Qué sucede?
– He escuchado voces cerca de las habitaciones, también pasos, salí en busca de un cuchillo, temo que alguien haya ingresado a la casa y quieran hacerles daño.
– ¡¿Qué dices?! Joder.
Saliendo rápidamente de la cocina corrió hacia su habitación nuevamente, abriendo la puerta bruscamente, logrando levantar al hombre en su cama.
– ¿Bebé?
– Alguien ha ingresado en la casa, Lea... Lea lo ha escuchado.
No espera un segundo, Jeon se levanta, descalzo con un pantalón de Pijama y sin camisa, levanta un poco el colchón para sacar un arma de ahí.
– Quédate aquí.
Tan malditamente excitado se sintió Jimin al ver a su hombre con ese aspecto varonil, semi desnudo, despeinado con su ceño fruncido y un puto arma en su mano.
– S-si.- Debía controlar sus ansias.
Sigilosamente salió con su arma arriba, necesitaba alertar a sus hombres y empezar una revisión.
Apuntando a cada rincón, agudizando su oído, finalmente llegó a la puerta.
– ¡Hank! ¡Alerta a todos alguien ha ingresado a la casa, joder!
Entonces el alboroto comenzó, sus hombres entraron a la casa, corriendo por todas partes con sus armas, las luces fueron encendidas y vaya mierda...
Había una gran foto de Jimin pegada en una de las paredes de la sala, era una en el jardín de su hogar, mientras miraba aquella revista, aquello lo dejó perplejo.
Tomaré lo que me pertenece, mi dulce niño.
¿Qué carajos?
Era una advertencia, era una clara advertencia de que alguien iba por Jimin.
– Lea llama a Hoseok, lo quiero aquí de inmediato.
– Si señor... Eh... ¿Debo quitarlo?
El corazón de Jungkook latía con fuerza, su respiración era tan pesada que podía sentirse.
– Desaparecelo de mi vista.
– Si señor.
Mirando a su alrededor sus hombres corrían por todo el lugar, no tenía sentido, simplemente no tenía sentido.
El tenía seguridad, una gran seguridad que había funcionado por muchos años ¿Cómo alguien burlaba esta y entraba a su hogar?
Definitivamente había un traidor entre los suyos.
Oh definitivamente se la iba a pagar.
– ¿Jungkook?- Entonces la voz temblorosa de su bebé lo hizo mirar en su dirección, tan tímido y tembloroso en medio de las escaleras, mirando a los hombres invadir la privacidad de su hogar.- ¿Qué está pasando?
Camino hacia el, para luego cargarlo en su cintura y llevarlo nuevamente a la habitación.
– Es mejor que hoy te quedes aquí, alguien ha ingresado a la casa.
– ¿Acaso es eso posible?
– Yo creí que no, voy a doblar la seguridad.- tomando asiento en el borde de la cama y dejando el arma en la mesa de noche, se dedicó a abrazar a Jimin en sus brazos.- Te juro que voy a resolverlo.
Su cuerpo temblaba, aquello lo había tomado desprevenido, había sido un golpe bajo.
– Ey.- El menor tomó su cara.- ¿Por qué estás así? ¿Sucede algo?
– Cariño tu... ¿Conoces a un tal Siwon?
Los ojos del menor se tornaron oscuros, alejando sus manos de la cara del mayor, empezo a respirar un poco forzado.
– ¿Por qué? ¿Qué tiene que ver en esto? ¿Cómo sabes de el?
– Jimin, vas a decirme ahora mismo quien es ¿Entendido?
– Lo recuerdo, Siwon es el hermano menor de papá, el... No me agrada Jungkook, era raro, siempre quería jugar conmigo, me invitaba a su casa y luego se acercaba mucho, yo... No me sentía seguro cerca de el...
Maldito hijo de puta.
– El... ¿Alguna vez llegó a pasar la línea?
– N-no solo decía cosas, decía que era el niño más lindo del mundo y... No quiero verlo Jungkook, el me atemoriza.- Abrazando el cuerpo del mayor Jimin se aferró a el.
Recordar su infancia era complicada, habia cosas que no recordaba y otras que si, era tan confuso.
– Nadie va a tocarte, nadie.
Y el creía en su Jungkook, sabía que solo podía creer en el.
...
– ¿Qué sabes de ese Siwon Hoseok?
– Hemos estado vigilandolo, el hombre no hace nada fuera de lo normal, está demasiado tranquilo.
– Algo no está bien.- Suspirando derrotado dejó caer su cara en sus manos.- Alguien burló la seguridad, pegaron una imagen de Jimin en la sala con una puta advertencia.
– ¿Qué? He estado vigilando a los hombres, incluso Jackson lo ha hecho, quien este traicionando sabe lo que hace Jungkook, necesitamos estar alerta.
– Voy a matar a quien haga algo en mi contra y se atreva a tocar a mi Jimin.
– Joder hombre, yo también.
Sin importar nada, una vida menos a cambio de la paz en su vida, realmente no le importaba, el debía proteger a Jimin a toda costa sin importar nada ni nadie.
– Jungkook... Nadie va a tocarlo.
Pero aún así, había algo en todo esto que lo tenía alerta, había algo retorcido y oscuro que lo hacía estremecer.
Quizás el miedo de perder a Jimin.
Quizás el saber que no está teniendo el control de la situación o que está enfrentándose a un fantasma.
Definitivamente había algo demasiado extraño y por primera vez Jeon sentía nervios.
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Ninfomanía [KM]
FanfictionEl mal tiene ojos, grades y redondos, un cuerpo atlético y un metro ochenta de altura. Jeon Jungkook con los años ha ganado una fortuna, como también enemigos que buscan ocupar su lugar o eliminarlo definitivamente del camino. Pero lo mas importante...