𝐼𝑙𝑙 𝑤𝑖𝑙𝑙 𝐶ℎ𝑎𝑡 𝑁𝑜𝑖𝑟 / 𝐴𝑑𝑟𝑖𝑒𝑛

𝔸𝕟𝕚𝕞𝕒𝕟 ஜ ══

La observaba mientras él hablaba. No podía negarlo era bonita, muy bonita, pero su actitud la arruinaba por completo. —Pero soy un asco con las chicas—

—Y ella es tan linda, educada, rica, es popular, es la chica perfecta, pero no para mi—se quejaba. En verdad la estaba idealizando tanto y no entendía cómo.

—Nino creo que tienes la imagen equivocada de ella—Sincere. Él me miró confuso. —Primero que nada ella no es educada—señale en su dirección. —Es la chica más hostil y grocera que he conocido—.

Nino me tomo de los hombros. —Hermano se que no te llevas con ella, pero el punto es que me guste a mi y no a ti—me señaló. —Créeme que agradezco tanto que no se hayan besado aquel día, no podría vivir con un beso entre ustedes dos en mi cabeza — .

Suspire cansado, estaba enamorado, cualquier cosa que él dijera sobre ella iba a ignorarla. —Voy ayudarte Nino—Afirme . Quería que él mismo cayera en cuenta del error que estaba cometiendo al ponerla en un pedestal.

—¿Pero que hago hermano? Soy un chico normal y ella es...—su voz se apago con eso último. —No lo sé —lo pensé por algunos segundos.

Kathleen no era cualquier chica, si quería impresionarla tenía que esforzarse. Un restaurante muy lujoso, ropa muy lujosa, era demasiado trabajo para Nino.

—Quiero invitarla al zoológico —No pude evitar soltar una carcajada ante lo que dijo, si quería que le tirara sus tacones en la cabeza seguro esa sería la mejor opción. —Es una buena idea, te dirá que si, seguro. —Si quería que Nino abriera los ojos tenía que ponerlo en tal situación.

No quería que ella lo humillara, quería que él mismo se diera cuenta de la clase de persona con la que estaba tratando. Nino tomó valentía y se acercó a ellas pero de inmediato retrocedió.

—¿Qué tal si actúo como un tontosaurio? —Negué decepcionado. —No te preocupes viejo, yo te apoyo —chócanos nuestros puños.

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Ambas estaban saliendo de la escuela. Las vigilamos por un rato mientras Nino se preparaba para ir a invitarla. No quería cruzar palabra con ella, de verdad odiaba estar en vuelto en esta situación pero por el bien de Nino tenía que hacerlo.

Nos paramos enfrente de ellas, cubriéndoles el paso, empuje a Nino hacia a ellas para  que procediera. Al ver cómo se congelo no tuve más opción que ir a su rescate.

La revista que tenía Marinette en las manos se cayó al suelo iba a recogerla pero mi cabeza chocó con la de alguien. —Ya me estoy cansando de esto—murmuró la  rubia acariciando su frente. Fruncí el seño.

Siempre pensaba solo en ella y cómo podían afectarle las cosas a ella.

Tome la revista y se la entregue a Marinette. Mire a Nino de mala forma al ver que no reaccionaba. Reuní toda mi fuerza de voluntad para decirlo. —Lo siento Kathleen —quise lavar mi boca con jabón al pronunciar aquellas palabras.

Ella hizo un gesto de sorpresa y se cruzó de brazos. —Y para que veas cuanto lo sentimos—golpee el hombro de Nino al notar como me estaba dejando solo en esto. —Te queremos invitar al zoológico—Dije con incomodidad. Odiaba verme en esta situación.

Ella frunció el seño y soltó una risita. —¿Tu?—me vio de arriba a bajo con desdén. Hice una mueca al sentirme juzgado. —Nosotros—señale a Nino y después a mi.

Chasque los dedos en la cara de Nino para que reaccione. —Tienen una pantera nueva —murmuró. Kathleen miró a Marinette con complicidad. Observe cómo le golpeó el codo con una sonrisita. —¿Una cita doble?—No lo entendía ¿Por qué invitaba a Marinette? Ella no estaba dentro del plan.