Laugh |Laughing Jack|

Capitulo 17

La sonrisa lobuna de Nina nuevamente se encontraba frente a mi.

-Vaya, no serás una asesina, pero eres impulsiva como una- gruñe Clock al otro lado de mi habitación.

-Gracias Nina- digo, ignorando a Clock. Esta rueda su ojo y se acerca a mi, sentándose en el borde de la cama.

-¿Quien es Eric? ¿Era alguno el mas joven, no?- pregunta. Trago saliva y niego con la cabeza.

-Por...-balbuceo, intentando explicarme -Por culpa de él me enviaron a ese hospital...

Ella parece no sorprenderse.

-Quieres matarlo.- dice por fin, me limpió las lágrimas que se derraman por mis mejillas -Y yo te voy a ayudar en eso.- finaliza con una sonrisa aterradora.

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L. Jack's POV:
¿Es un deja vu?

Debe ser otra cruel ironía en mi puta existencia.

Suspiro, pasando mi dedo por los colores secos de las paredes de mi confinamiento.

-Isaac...- susurro. Acordándome de su negligencia, su locura... Y su inocencia perdida.

¿Si no hubiera jugado contigo, como habrían sido las cosas?
Los humanos mueren. Todos mueren.

¿Algún día podré morir yo también?
La incertidumbre me carcomía. Había estado perdiendo el tiempo con otros creepypastas, matando y regocijandome en mi locura. Había olvidado quemo existencia como ente en esta dimensión era una cosa muy diferente de matar.

Pero... ¿Qué era más hermoso que la muerte? ¿Jugar con ella?

Y ahora me daba cuenta de que esta caja era mi infierno personal. ¿Dónde estaría ahora? Tal vez en el descansa-brazos del trono de Zalgo, mientras él se carcajea ante mi impotencia.

Y ya me debatía entre si debí haber robado el alma de Venecia. Sólo era una humana, una vil copia de Isaac y mía mezclada.

Y no nos conocimos por el "destino" como contaría una historia cliché de amor. Zalgo y sus retorcidas intenciones lo planearon.

Golpeo la pared con fuerza. Maldita caja.

"Deja de golpear, es inútil." Oigo la voz de Zalgo desde afuera.

-Déjame salir, pagare las almas que quieras.- susurro. Yo rogando, que bajo he caído.

Este suelta una siniestra carcajada.

"¿Como podrías asegurarme eso? Te puse una prueba muy fácil, ella era tu pasado. Sin embargo, no te pudiste separar de ella. No, tenías que enamorarte de ella."

¿Me enamore de ella? ¿En qué momento? Es decir, ya sabía que era eso, pero nunca me considere alguien para sentirlo. Era casi un privilegio.

Pero ella me quería... ¿Aún lo hará?

Venecia... Cuanto me gustaría verte, para acabar con tu cuerpo, que me recuerda a Isaac, conservar lo que queda y recordarte como una chica, no como mi pasado.

¿Alguien sabe que estoy aquí? Bueno, supongo que "aquí" es el infierno o donde quiera que viva Zalgo.

Pero no puedo depender de alguien para salir de aquí. Yo me busque esto. Incluso aquí debería estar "disfrutando" de los gritos de dolor que oigo del exterior, incluso a veces veo sangre brotar de las paredes.

Pero no podía disfrutarlo. Y no podía o no quería tirar la culpa a alguien, no tenía a quien.

Ni siquiera es culpa de Venecia. Ella podía haber sido feliz, terminar sus estudios y casarse.

Pero no. Tenía que ser escogida por el puto demonio por su apariencia.

No puedo quedarme aquí sin hacer nada, encerrado por toda la eternidad como un castigo y para saciar los deseos sádicos de Zalgo.

-Tengo un trato que hacerte...- digo. Mi voz tiembla al principio, pero después se torna decisiva.

Venecia... Ojalá valgas lo que estoy apunto de hacer.

Se que lo hace...

Haría todo por que ella volviera a ser feliz, y que volviera a sonreír.

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Si :D no me olvide de esta novela. Pero para serles sincera, no sabía como seguirla, aún así, se me acaba de ocurrir lo que sigue y hasta lo que podría ser el final.

Pero aún tengo que arreglar algunas cosas...

Espero que les haya gustado.

Besos en la nalga derecha.