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〘CHAPTER TWO 〙 :wait: .·:*¨ ¨*:·. :wait:
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—Vamos Lana, no puedes estar así para siempre.
La pelirroja rodó los ojos y dejó la jarra de hidromiel en la mesa de forma brusca.
—Ya deja de molestar, nada ni nadie me hará volver a la forja— sentenció con el entrecejo levemente arrugado— Ese... Ya no es lugar para mi.
—Pero-
—Draal— el tono de voz amenazante calló al grandote— Si quieres darle un lección a la bolsa de carne, adelante, hazlo. Pero no vengas a buscarme, ya no quiero estar involucrada otra vez con la magia de Merlín.
Refunfuñando el trol adulto bebió de un solo sorbo el alcohol y se levantó para salir del bar.
—Cobarde— soltó antes de desaparecer por completo.
Aún con la vista puesta hacia donde se fue el trol, soltó un suspiro cansado relajando su postura y dejó caer sus hombros tensos. Entendía la molestia de Dral, si bien ella había estado entrenando por algunas décadas para ser una cazatroles, él llevaba siglos. Y el hecho de que un humano que no sabía pelear, que no tenga más de dos décadas de vida y fuera un completo ignorante de la existencia de las criaturas como ella fuera el elegido, le hervía la sangre.
Miró sus manos llenas de cicatrices antes de cerrarlas en un puño.
La responsabilidad sagrada por la que Draal y ella, habían sacrificado su cuerpo y tiempo, estaba en manos de una insignificante y frágil individuo.
—¡Ya deja de perder el tiempo y trabaja!— el grito de su jefe la hizo mirar en dirección de la forja.
Pero solo negó con la cabeza eliminando algunos pensamientos y siguió con su labor.
—¡Siete cervezas por aquí!— una trol alzó una jarra borracha y con gran euforia.
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