iconic ; enzo fernandez

00105 | palma

martina
☆ ☆ ☆

Hoy es el último partido amistoso de España en Palma de Mallorca, de paso tengo playa en la que tengo que estar disimulando la panza y pretendiendo que no tengo un mínimo de abdomen.

Luego de que estuvimos en Barcelona todos juntos, mi mamá se fué a Miami, yo me fui con mis amigos a Ibiza y Thiago quiso quedarse conmigo para venir a ver los últimos dos amistosos de España antes de la Euro, no porque le tire el país sino que quiere estar cerca mío, o mejor dicho, de mi panza que todo el tiempo la acaricia. Olivia, obviamente está conmigo igual que Madison, Gavi y Héctor... Marc no sé y los otros dos con la selección.

-Queríamos estar tranquilos y se levantó este personaje.

-Si Héctor, también te quiero.

-Era hora, ¿No? -mi hermano me mira mientras desayuna.

-Perdón, dormí mucho -le beso la frente y me siento a su lado.

-Hola hermanita mayor -Madison alza a Olivia de mis brazos sonriendo.

-Esa niña desde que estamos todos juntos todavía no tocó el suelo Madison, déjala caminar.

-No, en un año ya no voy a poder alzarla y voy a extrañar esto.

Ella vive teniendola a upa y después, cuando está conmigo, quiere lo mismo.

-Ay, ¿Jugaron al uno? No me esperaron, que malos.

-No, porque juegas y a mitad cambias las reglas como te parece -Hector me mira riendo.

-Vos sos igual, vas perdiendo y cambias las reglas para ganar.

-Si, pero yo soy yo.

Él se encoje de hombros y yo le salto encima, olvidando que no puedo hacerlo más porque dentro hay alguien a quien tengo que cuidar.

-De tanto saltar ese niño va a salir mañana, cálmate.

-Cuida al anticristo, Martina -mi mejor me mira serio y yo le devuelvo una mala mirada. Pobre, no nace y ya piensan que va a ser terrible.

Me preparo el desayuno y me siento con los demás al lado de mi hermano que tiene su mano encima de mi panza... es el más dulce de todos, ojalá yo tener uno así.

Una rato después ellos van hacia la pileta y yo me quedo ordenando la cocina para luego ponerme la bikini. Me miro al espejo de costado y solo parece que estoy hinchada.

-¿Cómo está Enzo? -mi mejor amigo me mira apenas me siento a su lado en los sillones del patio.

-Quiere que nazca ya... es el más emocionado de todos.

-¿Y cuando nace?

-Principios de Noviembre... no falta mucho.

-¿Y como te sentís? Además de que lloras por todo.

Eso es cierto, estoy más sensible de lo normal y más que en toda mi vida. Me dicen A y lloro, me dicen que estoy linda con el embarazo y lloro, mis amigos me tocan la panza cuando están totalmente en otra y lloro, Olivia toca a su hermanito y lloro... lloro cuando extraño a Enzo. En fin, por todo tengo para llorar.

-No puedo creer que esté embarazada con diecinueve siendo que nosotros pensábamos que yo no iba a tener hijos y prometimos casarnos si llegábamos solteros a los treinta.

-¿Te acordás? Y esa promesa fue antes del mundial.

Antes de conocer a quien iba a cambiar mi vida había prometido eso y un mes después, apareció Enzo.