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El sonido de una maleta siendo arrastrada se escuchaba fuerte y claro crujiendo a lo largo   de la acera. Los estudiantes se dirigían a los dormitorios de la universidad. Algunos habían sido llevados por sus tutores, otros viajaron solos. Alice pertenecía al último grupo: era una estudiante tailandesa rodeada de muchos extranjeros.

 —Bienvenidos a todos al dormitorio central. En la habitación hay un set de regalo para darles la bienvenida a los nuevos estudiantes. Está sobre la mesa. No olviden desembalarlo y usarlo.

 Uno de los guardias saludó a todos en la entrada, era un estudiante que vivía en el dormitorio.

 Alice se quedó esperando el ascensor lleno de estudiantes.  Algunas personas caminaron hacia las escaleras porque estaban en el primer piso. Su habitación estaba en el quinto piso. Si tuviera que subir una maleta grande y una mochila por las escaleras, seguro se desmayaría desde el segundo o tercer piso.

 Había otro guardia vigilando a los nuevos estudiantes frente al ascensor mientras Alice se subía  por fin al ascensor después de haber esperado unas tres rondas.  Era el primer día de ingreso al dormitorio, lo que provocó que todo el edificio estuviera lleno de gente entrando y saliendo.

La chica arrastró su bolso fuera del ascensor en el quinto piso, mirando de izquierda a derecha para encontrar su propia habitación.

 —¿Qué habitación? —preguntó una mujer de cabello largo, liso y rubio dorado, ojos azules, rostro esbelto, nariz prominente, ojos grandes que arrastraba una maleta en una mano mientras en la otra, sostenía una gran bolsa de lona.

 —32A —respondió ella.

—Tengo 32B —los ojos de la mujer se abrieron como platos.  —Creo que deberías ir por este camino.

 Dijo antes de llevar a Alice hacía donde estaban varias habitaciones con números claramente marcados en el frente de las habitaciones.

 —Lo encontré —gritó, tomando la llave y abriendo la puerta de la habitación.

 Un estrecho pasillo la recibió.  A la derecha estaba la sala de la cocina, a la izquierda estaba la habitación de invitados, la habitación 32A era la primera habitación, lo que significaba que la 32B estaba al lado. La otra arrastró sus maletas por el camino antes de detenerse y pararse frente a su propia habitación.

 —Soy Daphne. ¿Y tú?

—Alice, encantada de conocerte. —Estaba emocionada de conocer a su compañera de cuarto.  —Estoy estudiando una maestría en animación. ¿Y tú?

 —También estoy estudiando  una maestría pero en criminología  Terminemos de desempacar y sentémonos en la cocina para tomar  té, ¿Te parece?

 —Está bien.

 Ambas entraron a sus propias habitaciones. Alice se sintió aliviada de que su compañera de cuarto fuera amigable.  Además, ella también era guapa, lo que hizo que su corazón se acelerara. Lo más importante era que el inglés de la otra parte era fácil de entender, lo que hizo que ella no tuviera miedo al tener que hablar.

Alice inspeccionó su habitación. Solo había visto la foto parcial en el sitio web de la universidad. Cuando lo vio en la realidad, pareció diferente. Pero eso era probable que fuera porque  no había sábanas ni almohadas. La mesa estaba vacía. Sólo estaba el juego de regalo que mencionó el guardia.  

La joven mujer entró al baño y abrió el armario antes de ir a su maleta y sacar su ropa lo cual no le tomó mucho tiempo. Luego, la cerró y la guardó en el mismo armario.  

Al escuchar el sonido de la puerta abriéndose desde la habitación de al lado, rápidamente abrió la puerta y salió también.

 Daphne atravesó su habitación hasta la cocina.  La otra persona sostenía una tetera y  tazas de té en la mano.

Shhhh o se darán cuenta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora